Grata sorpresa me ha producido este film rodado cámara en mano en su immensa parte y con un pulso narrativo envidiable. Pocos cineastas pueden permitirse el lujo de arriesgarse tanto en una historia, basada como todos sabemos en hechos reales, véase por ejemplo: la gripe porcina, las vacas locas, la gripe aviar, la gripe A...y que lanza al espectador cuestiones morales, interrogantes, reflexiones y demás temas que se convierten en ineludibles durante el metraje de la cinta, y salir triunfante de la jugada, como es el caso de Steven Soderbergh. Tiene la gran capacidad de utilizar este " virus" para contarnos algo mucho más importante, como somos los humanos, como reaccionamos ante una situación incontrolable, como afecta el miedo y la inseguridad a nuestras vidas, todo ello en el contexto de un mundo asolado por un virus mortal, pretexto perfecto, para hacernos saber que un posible futuro apocalíptico nos espera...

Terror, perturbación, suspense, intriga, miedo, repulsión... son varios de los ingredientes que forman parte de una de las historias más apasionantes que nos ha dado la realidad de nuestros días en nuestro querido siglo XXI. Una película maldita desde su estreno ( fue prohibida su exhibición en Alemania), lo cual ya le da un cierto halo de polémica. La película está narrada desde el punto de vista de una estudiante americana que se desplaza a Alemania para realizar una tesis del caso. A medida que va avanzando la narración, ella y nosotros, los espectadores, vamos conociendo los antecedentes familiares y la infancia de los personajes, que les marcará su futuro. Lo que más sorprende, es la mano maestra de un director que no cae en lo explicito sino que se centra en los personajes, en sus acciones, y no en la "sangre fácil" y en el "morbo", lo cual se agradece, porque gracias a eso, el "viaje" se vuelve más oscuro hasta llegar a un final abierto y contundente. Recomiendo este film como documento vivo de nuestro tiempo.

Me ha vuelto a sorprender!! Borja Cobeaga se ha superado a sí mísmo y ha conseguido alcanzar cotas mucho más altas con su particular visión de la comedia.Una historia sencilla, un solo decorado, y muchos personajes, algunos de ellos, extravagantes, nos hacen pasar una "velada" de lo más divertída. Esta película se convierte en una "SITCOM A LA AMERICANA", con muchos sketches de humor, resueltos con maestría, creíbles, aunque también hiperbólicos, cuando lo demanda la escena, y con varias historias entrelazadas, secundarias, y un hílo principal, un chico que quiere recuperar a su novia, la última noche del año. Los personajes secundarios le ayudarán en la faena,y algunos, se lo complicarán un poco... Me he desternillado de risa, he llorado de risa, tanto!! que sinceramente, recomiendo que la visioneis, en cualquier época del año!! Unax Ugalde sorprende en su rol cómico y Julián López hace las delicias del personal, INSUPERABLE!!!

Llevaba esperando mucho tiempo, más de un año, el estreno de esta película, básicamente por dos razones esenciales: BARDEM E IÑÁRRITU. JUNTOS.Lo han demostrado!! Este es un tándem que estaba destinado a trabajar mano a mano, con una historia que hace justicia a ambos, uno, delante de la cámara y el otro, detrás. Desde el minuto uno, el espectador se sumerge en la cuenta atrás de un hombre a la deriva, que intenta nadar a contracorriente, en contra de su destino, peró se hunde, con cada paso que da. Bardem es Biutiful. Bardem es la película. Sin él, no tiene sentido. Un via-crucis de principio a fín, que no deja respirar al espectador, ni le deja tomar aliento, hasta dejarle exhausto en su butaca, sin poder hacer nada. Este es un viaje abstracto, al interior de todos nosotros, un viaje de ida, peró no de vuelta..."El viaje de la vida" que nos propone Iñárritu, no es fácil, agradable, bonito... peró alberga "esperanza" y "liberación". Su mejor y más personal film. Aunque muchos piensen lo contrario.

Nunca una película me había perturbado tanto y me había causado tan grata impresión por su mensaje implícito. ¿Como es posible que haya pasado casi desapercibida? Estamos ante una obra de arte, en estado puro. CINE, con palabras mayúsculas. Una visión realista, sincera, sin concesiones, sin tapujos, realizada sin miedo, sin temor, y con el mejor ingrediente de todos, con la voz del que es libre y lo propugna a los cuatro vientos, para hacernos llegar una historia que habla lo que muchos quieren callar, que muestra lo que muchos quieren ocultar y que logra hacernos reflexionar sobre la educación, la sociedad, el miedo, la moral llevada al extremo, la familia, el sentido común y sus consecuencias, en una representación excelente llena de momentos imborrables y secuencias que se clavan como agujas y quedan incrustadas, para recordarnos que no estamos solos, y más allá de esos muros, hay gente como nosotros, que necesita de nosotros, y como no, aunque a veces no queramos admitirlo, nosotros de ellos.