Wilder seguía entregándonos comedias de altura, aunque en esta ocasión a diferencia de obras maestras anteriores, el argumento no era tan brillante (sí muy bueno, pero no brillante) y el guión pesaba un poco más de lo normal, unido a su excesiva duración. A cambio nos entrega una parte técnica encantadora y realmente bonita, en una Italia llena de color mediterráneo y con una banda sonora excepcional, unida a una realización impecable en una muestra de maestría más del director.

Con un triplete actoral genuino y en estado de gracia, un Jack Lemmon (Armbruster Jr.) en plena etapa de madurez interpretativa, una creíble y cercana Juliet Mills (Pamela) y un fantástico Clive Revill (Carlucci) como director italiano del hotel, la película tiene mimbres y momentos de genialidad absoluta y la clásica fina ironía de Billy Wilder, pero no termina de ser un film redondo desde el mismo momento en que parece alargarse la situación en exceso.

Y no es que estemos hablando de mal relleno, pero sí de una sobrecarga con la que una comedia difícilmente puede salir airosa.

'Avanti!' es una gran película, pero podría haber sido mejor limando esos pequeños defectos. Por lo demás, su propuesta y punto de partida es original, su fotografía enamora a orillas del mar cubierto por un cálido sol, su música es embelesadora, muchas de sus situaciones son extraordinarias y desternillantes, otras simplemente míticas (cada vez que Lemmon y Revill cruzan sus palabras, por ejemplo. O la familia Trotta...).

Desaconsejable perdérsela.