Un recuerdo memorable de las miserables calles de los barrios bajos de Nueva York, el reparto de promesas jóvenes, que florecen dentro del cine indie acompañado de un elenco de actores reconocidos, hacen de esta película, una obra donde los sentimientos reales se guardan dentro de armaduras oxidadas. Un excelente Chazz Palminteri, que adereza muy bien su curtido recorrido por la "zona Bronx" encamina a estos jóvenes actores dentro de problemas con tratos familiares y lazos de amistad, de aquellos entonces. Es una película a la que se podría sacar algo mas de jugo si el argumento no estuviera tan machacado por otras tantas películas insulsas que no aportaron nada.