Los excéntricos Tenenbaums

Wes Anderson se aleja de la estructura narrativa convencional para ofrecer un original retrato de familia, donde todo gira en torno a la figura de un hombre ruin y egoísta, que busca redimirse tras una vida de abandonos, triquiñuelas y desinterés por su esposa e hijos. El trabajo interpretativo es magnífico, la cámara persigue una estética preciosista, la música es buena y oportuna, y el humor es muy contenido, se oculta en los detalles sin provocar la carcajada fácil, como ocurre con la ropa y los complementos de los protagonistas. De hecho, es mucho más drama que comedia, y a pesar de las excentricidades, el espectador llega a comprender el inmenso dolor que arrastran los personajes. Muy interesante.

Una película muy emotiva creo que para todo el mundo llena de amargura en sus partes centrales, para desembocar como todos esperábamos en un final feliz.

Muy buena la actuación de Gene Hackman que nos sigue demostrando por qué sigue ahí arriba en cuanto ala interpretación.

Desde mi punto de vista, la mejor actuación es para Luke Wilson. Sublime.

Todo esto envuelto por una muy buena banda sonora.

Los Tenenbaums me han conquistado.
Me fascina como Wes Anderson trata un tema tan vital como la importancia del apoyo (y amor) paterno durante la infancia.

Me fascina que los personajes no esconden como se sienten y que los actores sepan reflejar con tanta maestría el interior de unos personajes totalmente transparentes. Es como si Anderson le hubiera dado la vuelta a los personajes y mostraran de cara al mundo claramente su interior.

El color y los planos son la seña de Anderson y transmiten (a parte del cierto estilo vintage característico) la apatía de Margot, la rabia de Chas o la tristeza de Richie.

Hay humor, hay amor, hay dolor.
Hay, en definitiva, una pequeña descripción de lo que es la vida.

Primera película de Wes Anderson que veo por segunda vez. La vi en cine y una década después me he atrevido a volver a verla. Me sigue pareciendo igual de aburrida, pretenciosa y bien realizada e interpretada que lo que me pareció en su estreno. Gene Hackman está inconmensurable.
Wes Anderson es un genio creando personajes pintorescos, dando gracia a actores inexpresivos, creando unas composiciones simétricas brillantes con una fotografía exquisita. Lo reconozco es casi genial. Pero en cambio, su excéntrico o extraño humor no conecta para nada conmigo. No entiendo si lo que pretende realizar es una crítica al pijerismo americano o en cambio pretende rendirles un homenaje. En ese aspecto me gustaría conocerle más para saber posicionarme mejor ante su cine. Creo que ya de origen está cayendo en algunos de los errores que ha cometido Woody Allen con algunas de sus películas, en las que en vez de realizar una ácida crítica sobre las costumbres del ciudadano medio se ha situado en su ámbito como un justificante de esos hábitos.
Sin duda el problema más grave de Anderson es que se cree uno de los alumnos más aventajados de su clase. No es que le falte razón pero esas ínfulas a algunos cinéfilos nos resultan cargantes.

Fantástica, un simple melodrama al que Wes Anderson le da su mágico toque de extravagantes personajes y vidas raras hasta rozar el límite. Grandiosa comedia con sugerente profundidad, recomendable para todos los públicos. Anímense.