Los Pitufos en la aldea perdida

Es difícil comentar todas las bondades de esta película sin caer en el spoiler, así que me limitaré a decir que ha resultado ser una gratísima sorpresa, de una profundidad (dentro de lo que cabe y dado el género infantil) mayor de la que parecería, con unos personajes tiernos, divertidos e ingeniosos y un mensaje ejemplificador sin caer en absoluto en moralinas tópicas, sobre la identidad y la igualdad. Muy recomendable.

Los Pitufos: La aldea escondida da una lección de animación a todos los estudios. Se asemeja a El viaje de Arlo con la magia que transmite las paletas de colores utilizadas, pero el efecto se eleva a la enésima potencia. El resultado: un festín de sensaciones desde que cruzan el gran muro que los separa del Bosque prohibido.

Si hay algo destacable y necesario en los tiempos que corren es el mensaje que envía el personaje de Pitufina. Tendemos a estar tan condicionados por lo que otra gente piensa y dice de nosotros, que a veces nos cuestionamos a nosotros mismos para qué valemos o por qué no acabamos de encajar. Todo el viaje que realizan los cuatro pitufos para buscar un lugar en que Pitufina se sienta comprendida nos enseña a aceptarnos tal y como somos.

Los Pitufos: la aldea escondida es una película para niños y así ha de ser valorada. Si bien es cierto que muchos gags cómicos no provocan ni una sonrisa a los mayores de doce años, las aventuras por las que pasan los cuatro seres entretienen y hacen que la hora y media que dura parezca apenas media hora.

Difícil opinar sobre una película infantil ya que no esta destinada al publico adulto, hay alguna película de niños que son mas aptas para los mayores, pero esta es una película para niños y en mi caso para niñas.

No he visto que haya emocionado a mis sobrinas, pero no se han aburrido, la película es entretenida a ratos, algún momento es un poco aburrida, pero tiene acción, alguna sorpresa y humor.
Aunque me había hecho spoiler la guapa morena, tiene un villano que le da emoción a la historia y con el que solté una carcajada cuando se esta ahogando en el río.

De pequeño leí tebeos de los pitufos y esta película es una versión moderna, con las mejores técnicas de animación y una evolución de los dibujos clásicos que ha perdido en el camino la utilización del verbo pitufar.

Hay películas que recordare siempre porque las vi en un momento concreto, hay a gente que le pasa con la música, una canción les trae un recuerdo determinado. A mi me pasa con el cine, y esta película es una de esas.

Una película animada y colorida, que nos traslada a una aldea mágica donde los conejos son fluorescentes, las libélulas escupen fuego y las plantas lanzan besos. Los pitufos resultan entrañables, con texturas muy bien conseguidas en un gran trabajo de animación, que a pesar del 3D consiguen mantenerse fieles a los originales. Atención especial a la melena de Pitufina, envidia de cualquier actriz de carne y hueso.

La música sin embargo, nos traslada a otro lugar, exactamente a una discoteca. Canciones que acompañan los movimientos y el ritmo trepidante de estos pequeños seres azules, pero que seguramente no sea del agrado de la mayoría del público. Aunque, si recordamos a los pitufos maquineros, no nos resulte tan raro la banda sonora elegida para esta ocasión.

La película está dirigida principalmente para niños. El enfoque infantil de los comics de Peyo se observa en este nueva producción que choca y contrasta con el mensaje tan maduro que transmite. Y es que estamos ante un mensaje potente sobre la identidad personal. Pitufina no es capaz de definirse, no sabe en que es buena o en que puede destacar. La película nos llevará a un viaje al corazón de la voluntad, dejando claro que una persona no se puede describir con un único rasgo y sobre todo, que lo que realmente nos define somos nosotros mismos y nuestros actos.

La pregunta es, ¿hasta qué punto los niños serán de captar el mensaje, o solo se quedarán con lo colorido de la producción y los gifs de pitufos saltando y haciendo piruetas? Quizás haya sido una oportunidad desaprovechada teniendo un mensaje tan poderoso. Pero a pesar de ello, nunca está de más transmitir buenos valores, y si además los niños disfrutan con estos pequeños seres azules, no habrá sido todo en vano. Y ya sabéis, a pitufar.

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En una lucha por su aceptación total en la aldea, ‘Los Pitufos: la aldea escondida’ presenta una novedosa faceta de nuestra protagonista, que deja de ser tan risueña como en otras ocasiones para demostrar todo su potencial como una buena pitufa. Asbury ha decidido, junto con los guionistas del film Stacey Harman y Pamela Ribon (‘Vaiana’), crear una reinvención del personaje, dejando de lado su faceta coqueta, creída y tontita para dar paso a una “mujer” más decidida, dinámica y aventurera.

A pesar de este buen giro del argumento la película en si no dista de ser cualquier otra cinta de animación que jamás pasará a la historia como una buena animación, ni mucho menos como un buen largometraje. Con una historia bastante llana, Sony vuelve a introducir a los Pitufos como un mero recuerdo de la infancia y un intento de recabar nuevos adeptos que se queda a medias, sin profundizar sobre un tema con mucha capacidad.

A fin de cuentas, la nueva aventura de los Pitufos agradará a los más pequeños de la casa ya que, a pesar de su buen mensaje, lo único que transmite es una sensación de diversión para ellos y una constante luminosidad que mostrará la alegría del film, una función importante pero que no sirve para cumplir con su género como lo han hecho muchas otras; ya que una animación no solo sirve para entretener al espectador.

Como ya se ha mencionado, toda la cinta se caracteriza de una gran iluminación que perdura durante todos los minutos de la historia, la cual consigue crear una sensación de entretenimiento vacío y con muy poco entusiasmo. La trama, en su conjunto, carece de encanto para todos aquellos que van a verla, sobretodo aquellos padres obligados por sus hijos pequeños engañados por tanto color.

Para leer más: http://proyectofreak.com/pw/critica-los-pitufos-la-aldea-escondida-la-decision-de-pitufina/