Remedio para melancólicos

Una película muy atractiva: por el movimiento de la cámara, por el tratamiento del color, por la frescura que transmiten los personajes y por la historia: una pareja de color, él viéndolo todo en blanco y negro, en un esquema vital de arrinconamiento que responde a la realidad de la ciudad de San Francisco, y ella tendiendo al aburguesamiento, intentando tener una visión del mundo menos restringida pero irremediablemente más integrada en una sociedad injusta, la otra cara de la ciudad.

Me esperaba más, está bien que Barry Jenkins admire a WKW, pero aquí el intento de que le salga algo parecido a lo que hace Kar Wai, se hace demasiado evident: argumentalmente quiere hacer lo que hace Linklater de alguna forma, pero visualmente se guia de Wong, y creo que le sale un batiburrillo un poco artificial. Decepcionante.

Esta medicina no funciona.
Está bien, es cine independiente, cine arte, como quieras llamarlo, pero no presenta nada nuevo.
Un hombre y una mujer que no se conocen charlan durante toda la película, ¿no les suena familiar? "Antes del amanecer" ya lo hizo, y por lo menos hablaban en profundidad.
Tocan la temática racial, que parece lo único que la hace única, pero no alcanza.
Muchos silencios, y sin explicación de la decisión de acción de ninguno de los dos personajes. Terminamos viendo dos hojas al viento hacer y decir cosas que no son verosímiles, sino que fueron indicadas para justificar una vaga idea.