la trama sigue a un equipo de operativos Delta, liderados por el novato de la Fuerza Aérea Kinney, en una arriesgada misión de rescate en Filipinas. Con el apoyo del piloto de drones Reaper desde la base, el equipo se enfrenta a complicaciones cuando son atacados y capturados por insurgentes.

La dirección de Eubank destaca por su capacidad para crear una atmósfera inmersiva y asfixiante. Sin embargo, podría haberse centrado más en el guion que en la dirección, ya que la película carece de profundidad y complejidad.

En cuanto al aspecto técnico, la película ofrece un espectáculo visual con escenas de acción llenas de explosiones, tiroteos y enfrentamientos cuerpo a cuerpo. Aunque estas secuencias son impresionantes, la película no explora adecuadamente las motivaciones de los personajes.

A pesar de su trama predecible, evita algunos clichés típicos de las películas de acción. Sin embargo, su falta de originalidad y la ausencia de aportes novedosos resta al conjunto del film.

Ofrece entretenimiento sólido para los amantes del género bélico, pero podría haberse beneficiado de un guion más profundo y complejo. A pesar de sus defectos, sigue siendo una opción atractiva para aquellos que disfrutan de un buen espectáculo visual.

Destaca por su enfoque en las relaciones humanas y la importancia de la empatía. La trama se sitúa en un entorno rural cerca de Tokio, donde una empresa planea construir un camping de lujo que amenaza con alterar el ecosistema local. Lo que comienza como una película de denuncia ecológica, evolucionando hacia un thriller que sumerge al espectador en una atmósfera inquietante.

La dirección de Hamaguchi se distingue por su capacidad para encontrar poesía en la sutileza de la realidad, centrándose en la creación de una atmósfera única. Los planos lejanos, las imágenes nítidas y el uso del silencio contribuyen a una sensación casi mística. Aunque la narrativa experimental puede desconcertar a algunos, la película es una experiencia sensorial que invita a la reflexión.

El inicio de la película, con un largo travelling contrapicado que muestra las copas de los árboles, establece el tono y la estética de la película. Aunque puede resultar lento en momentos, la belleza de los paisajes y el mensaje ecologista compensan cualquier tedio, ofreciendo un viaje cinematográfico que vale la pena experimentar.

Fusiona la belleza natural con una narrativa enigmática y cautivadora. A pesar de sus desafíos en ritmo y estilo, ofrece una reflexión profunda sobre las relaciones humanas y el impacto del desarrollo en el medio ambiente.

Dirigida por Michael Mohan, ofrece un enfoque intrigante del género de terror religioso. La trama sigue a Cecilia, una monja estadounidense que llega a un convento remoto en la campiña italiana, solo para descubrir que el lugar alberga oscuros secretos y horrores inimaginables.

La película rinde homenaje a los clásicos del terror religioso de los años 70, lleno de suspense y atmósfera inquietante. Aunque algunos elementos pueden parecer familiares a otras películas, es una excelente introducción al género para los nuevos aficionados.

El guion de Andrew Lobel es ágil y efectivo en la presentación de los personajes y establece rápidamente la premisa de la trama. La fascinación por el oscuro convento, situado apartado de la sociedad, se maneja de manera inteligente al no situar claramente los acontecimientos en el tiempo.

La trama se desarrolla con el misterio del embarazo de Cecilia, que plantea preguntas sobre si es un milagro o algo más oscuro. Aunque la película ofrece pocas respuestas satisfactorias, esta ambigüedad puede resultar frustrante.

Sydney Sweeney brilla en el papel de Cecilia, ofreciendo una actuación que destaca incluso en medio de las deficiencias de la película. Su interpretación agrega profundidad al personaje y muestra su versatilidad como actriz.

Es una película que mezcla horror y elementos sexualizados con una visión artística decente. Aunque tiene sus defectos, es entretenida en ciertos aspectos y merece la pena ser vista.

Es una película que te lleva en un viaje emocional lleno de cordialidad y autenticidad. La trama se desarrolla en una casa que parece ser un personaje en sí misma, un lugar que alberga recuerdos y experiencias de la niñez. La historia se centra en la reunión de tres hermanos en el presente, entrelazada con los recuerdos de su padre, creando una narrativa que es tanto personal como universal.

Álex Montoya dirige con maestría esta historia, dotándola de una sensibilidad y sutileza que la eleva por encima de lo convencional. Su atención al detalle y su habilidad para capturar las emociones y los matices de los personajes hacen que la película destaque.

El reparto coral brilla en cada escena, pero son David Verdaguer y Olivia Molina quienes más destacan con sus interpretaciones . Su actuaciones aportan profundidad y autenticidad a sus personajes, convirtiéndolos en el eje emocional de la historia.

Es convincente y logra unir distintos espacios y tiempos de manera fluida, desde la impresionante fotografía hasta el montaje meticuloso y la banda sonora conmovedora, el aspecto técnico es impecable. Cada elemento contribuye a crear una atmósfera envolvente que sumerge al espectador en la historia y en el mundo de los personajes.

Es una película que te hace reflexionar sobre la familia, los recuerdos y el paso del tiempo, es una obra que, sin duda, deja una huella en el espectador. es una obra cinematográfica excepcional que combina una trama cautivadora, una dirección magistral, actuaciones brillantes y un aspecto técnico impecable. Sin duda, la mejor película del año hasta el momento y una candidata segura a figurar en las listas de lo mejor del año.

Sigue la historia de Colt Seavers, un doble de acción interpretado por Ryan Gosling, quien se ve inmerso en una trama de suspenso después de un accidente casi catastrófico que pone en peligro su carrera. La trama se centra en su relación con Jodie, otra profesional del set, mientras lucha por recuperar su carrera y su vínculo con ella.

La dirección de David Leitch es digna de elogios, especialmente por su habilidad en las escenas de acción, donde demuestra ser un excelente coreógrafo y director. Sin embargo, ciertos gags se extienden más de lo necesario, perdiendo la gracia y restándole ritmo al film.

Ryan Gosling y Emily Blunt realizan grandes interpretaciones. Ambos actores destacan por su carisma y la química palpable que comparten en pantalla.

La película logra honrar el trabajo de los dobles de acción al reflejar su realidad y las dificultades que enfrentan en su labor. El aspecto técnico resalta la importancia de estos profesionales en la industria cinematográfica.

Esta película es una comedia brillante que combina elementos de comedia romántica con el cine de acción de los años 90. Además, se destaca su valor al mostrar el trabajo de los dobles de acción y su contribución al mundo del cine.