Película sincera, llana y muy realista. Nos retrotrae a esa edad en la que nos enamorábamos de un compañero o compañera de clase y sobre todo donde la aceptación de los demás era fundamental para sentirnos bien con nosotros mismos. Ofrece una imagen realista de la adolescencia y de las aulas y es imposible no empatizar con el protagonista.
¿He dicho que es realista? Cine hecho con corazón del que se echa de menos que se hiciera también en nuestro país.

Película deslumbrante, mágica, de planos furtivos, acompañados de una hermosa melodía que retumba cual ladito del corazón en los fragmentos en que el tiempo parece detenerse y cambiar su ritmo habitual. La fotografía es impecable, pareciendo cada plano una pequeña acuarela. La historia entre los protagonistas resulta totalmente creíble y está contada con una sensibilidad tal que parece que un "haiku" se ha materializado en una película.

Película cuya producción se desarrolló al mismo tiempo que la de "Pocahontas" pero con menos recursos dado que se pensaba que tendrían más éxito las peripecias de nuestra india favorita pero que en cambio fue un sonoro golpe de efecto sobre lo que ocurre cuando se mezcla una trama shakesperiana con una producción Disney. Película gloriosa, sublime, donde no sobra ni falta nada y cuya primera parte, hasta el consabido giro argumental, es de una profundidad realmente sorprendente en un clásico Disney. Emocionalmente impactante, la aparición de Timón y Pumba ayuda a equilibrar el guion hasta un final donde se nos muestra que el ciclo de la vida es eterno.

Película con una factura técnica excelente y de la cual he obtenido más de lo que esperaba. Las interpretaciones no es que rayen a un nivel excelente pero la historia tiene buen ritmo y avanza con fluidez hacia su inevitable final. No me ha gustado la vida tan idealizada que se muestra de los traficantes, en comparación resultaba mucho más atrayente que la de los agentes del orden.

Me aproximé a esta película sin ninguna expectativa. El corto inicial, "Frozen fever", me pareció simpática pero sin nada que destacar. Sin embargo, la película me sorprendió gratamente. Las actuaciones poseen un nivel muy alto, especialmente una Cate Blanchett magnífica en el papel de Mrs. Tremaine. El resto de personajes también resultan muy creíbles, lo cual ayuda a darle cohesión al relato como cuento de hadas.
Los efectos especiales están empleados en su justa manera, ayudando al relato pero sin hacer que nos distraemos. Debo decir que en algún momento me parecieron algo "amateurs", para lo que se espera de una súper producción de Disney.
La película avanza sin decaer en su ritmo y llega a un final que resulta satisfactorio. Eso sí, eché de menos alguna canción en la película, acostumbrado a las que existen en la versión animada.
En conclusión, una película que no desmerece al original aunque sin llegar al nivel de excelencia técnica de aquella. Eché en falta que se ciñeran algo más al relato original en cuanto a lo que ocurre a aquellas que se prueban el zapato de cristal sin conseguir calzarlo pero, ¿podíamos esperar algo diferente de Disney?