La belleza del entorno y lo cuidado del paisaje contrastan con la falta de intensidad de la película. Es una historia interesante muy mal contada. La idea de la isla como mujer (hermosa, volcánica, fértil...) El libro de Arozarena sigue siendo superior al film. Sus hermosas descripciones y la capacidad de delinear las personalidades de los personajes parecen sólo pinceladas superficiales en la película.

Bailar en la oscuridad reúne, a priori, todos los requisitos para ser una de esas películas que pospones hasta que oyes o lees sobre ella con tanta frecuencia que su visionado resulta casi inevitable. Me explico. Nunca he sido muy entusiasta de los musicales, Björk causa un extraño efecto en mí (No sé si bueno o malo. Simplemente me turba) y siento una especie de amor-odio por la filmografía de Lars Von Trier. Pero decidí ver el film. Al principio, me dejé llevar. Luego me sedujo el personaje de Shelma. De una gran dignidad y sentido de la determinación. En cierto modo, me recordó a Grace, personaje protagonista de Dogville interpretado por Nicole kidman. Nunca pude entenderlas. Hasta llegué a sentirme molesta con ambos personajes, pero siempre admiré la determinación con la que se desenvolvían ante las vicisitudes. Aunque Grace, finalmente, sucumbe a las incontables embestidas. Pero Shelma... Shelma es conmovedora. Así que me acabé rindiendo. Bailar en la oscuridad es uno de los motivos por los que me gusta el cine. Combina magistralmente el musical con el drama y acaba con un final tan cargado de poesía como de moralidad. Un final agónico que, personalmente, me costó asimilar. Una película imprescindible.

Me vendieron Entre copas como una comedia con un diálogo inteligente y eficaz. Después de verla, pensé que no se habían equivocado, pero es algo más que eso. Tampoco diría que es un drama. Simplemente es una historia que habla de personas normales y corrientes, que no son ni buenos ni malos, que viven con los mismos problemas que cualquiera y que aspiran a lo mismo con lo que todos soñamos. Habla de intimidad. Sin artificios y sin procurar ningún efecto. La trama se desarrolla con una deslumbrante naturalidad. En definitiva, es un film agridulce con grandes dósis de ironía que enfrenta a dos personajes totalmente contrapuestos, pero que se complementan a la perfección.

Creo que junto a "Historias mínimas" es una de las películas más hermosas que he visto. Es lenta, honesta e íntima y está llena de silencios acertados.

Es como un pequeño poema que habla de cómo sobreponerse ante las vicisitudes de la vida y cómo enfrentar el dolor. Lleno de luces, colores, fundidos en negro y una espectacular música que consigue dar sentido al conjunto y arrastrar consigo al espectador. Además, el trabajo de Juliette Binoche es más que notable.

No es una película fácil. Creo que no me atrevería a recomendarla entre la mayoría de mis conocidos. Quizás ese sea uno de los motivos por los que me guste tanto. Pero el que se atreva a hacerlo, no creo que consiga arrepentirse.

Increíble, pero cierto... Por fin, he visto una película en la que aparece Sandra Bullock que no me ha horrorizado. La historia es tan simple que te quedas con la sensación de no haber visto nada nuevo. Como si todo lo visionado durante las dos horas que dura el film lo conocieras de antemano. The Blind Side es una película poco ambiciosa. Sin grandes aspiraciones... Quizás ése sea el quid. No pretende aparentar algo que no es. Como otros dramas sociales que abusan de la sensiblería o incluso se permiten manipular al espectador. En definitiva, es una película floja con una muy buena interpretación por parte de la Bullock... que no llega a ser brillante ni mucho menos.... pero sí muy superior a lo que nos tiene acostumbrados.