"Las películas de cine independiente resultan ser aquellas en las que el realizador intenta, por todos los medios posibles, crear una atmósfera suficientemente interesante como para que el espectador se de cuenta de que se ha hecho un trabajo digno con cuatro perras". Esta frase se la oí decir a un célebre y por aquel entonces reputado crítico de cine que pasó por Cáceres al principio de la década de los 90, hace ya casi 25 años. Si tiene o no razón depende de como se mire. El cine independiente siempre me ha parecido el más interesante, ya que creo que es en este tipo de largometrajes donde los realizadores de turno ponen los cinco sentidos para desarrollar una historia donde, por regla general, nos cuentan casi siempre las alegrías/decepciones del ser humano. Linklater no es una excepción, ya que salvo por uno o dos títulos en su carrera siempre se ha movido en este terreno. Pero no siempre el cine independiente tiene que ser bueno, y en el caso de esta película, no tiene por que ser excelente...

El film está bien planteado, fenomenalmente interpretado y magnificamente dirigido, pero se nota sobremanera que el realizador lo ha hinchado de tal forma que el resultado final me parece de notable bajo. Me parece bien que se elija a los mismos intérpretes en los 37 días de rodaje que se utilizaron a lo largo de 12 años para contar esta historia que narra las vicisitudes varias de un chaval en un ambiente enrarecido por culpa de la separación matrimonial de la madre, pero su tercio final es demasiado cansino, aburrido y un pelín cursi...

Eso sí, fui solo al cine ese día y había allí tres o cuatro gatos más en la sala, por lo cual disfruté como un enano los 165 minutos de metraje, ya que nadie estaba con los tlf móviles mandando mensajes, nadie hablaba con el de al lado, nadie crujía en su boca palomitas, nadie se levantaba bruscamente de los asientos, nadie molestaba al de delante, nadie hacía viajecitos al ambigú, nadie roncaba, (curioso, en el cine independiente la gente permanece atento sin pestañear y en las comerciales hay quien se duerme...).

Pues eso, vida es vida y nada más, y como solo tenemos una... pues a disfrutar con este tipo de cine, que dicho sea de paso es el mejor para ver en salas comerciales, sin que nada ni nadie te moleste demasiado... para el otro tipo de cine, el comercial puro y duro, mejor la pantalla ULTRA-LED en alta definición de casa con el Dolby Digital 5.1, al fin y al cabo, tampoco te molesta nadie.

Saludos.

Y no me refiero a lo que cuenta la película, sino a sus productores y realizadores. Sí, de acuerdo, es rigurosamente cierto que la premisa argumental no es del todo original, (todos hemos visto esto ya muchas veces, en especial en el cine de Amenábar, Spielberg, Shyamalan y, en mayor o menor medida, en la teleserie "URGENCIAS", y me da igual en que versión, -española o norteamericana-), pero no es menos cierto que la factura técnica es de una solvencia impresionante, a veces superior a films españoles de mayor presupuesto, lo que da un atractivo añadido a la película. El guión está francamente bien, pero las diferentes subtramas que hay le hacen ser un lastre en el metraje. que afortunadamente no es muy extenso. Hay otros realizadores, mucho más famosos que este Santos, que tienen trabajos muchísimos peores, pero claro, el poder es el poder y para bajar a esos de la nube en la que viven...

LO MEJOR: La impresionante banda sonora y algunas secuencias con una impecable fotografía.

LO PEOR: Sigo pensando que Belén Rueda no es buena actriz, y aquí su personaje sobra por completo. La 1ª escena de la película, calcada de la secuencia inicial de "GORDOS", (no olvidemos que Sánchez Arévalo fue el realizador de ella y escritor en esta).

Mi abuelo, que lo reclutaron para la causa en el frente cuando todavía no era mayor de edad, es decir, que casi era un niño, me ha contado mil historias sobre la Guerra Civil Española. Tener un abuelo que haya luchado en el frente y haya vivido los horrores bélicos y la posterior postguerra, te puede servir de mucho, ya que queda contundentemente claro que el bando no se elige, vas a luchar por la zona donde te ha tocado y punto. Mi abuelo no era ni de izquierdas ni de derechas, tampoco demasiado religioso, (al igual que yo), más bien todo lo contrario, (es decir, que al igual que yo pasaba un poco de los líderes políticos). Le tocó el frente Nacional igual que pudo haberle tocado el Republicano... y mi abuelo nunca habló bien ni de unos ni de otros. Siempre dijo que ambos bandos habían tenido la culpa de todo lo que estaba pasando. No sé si mi abuelo tendría razón o no, pero lo que está claro es que si la tenía no se ajusta en nada a la película que dirige Emilio Aragón. En aquella época no había demasiadas risas, (algo que trasladó al cine magníficamente Fernando Fernán Gómez en la imprescindible "EL VIAJE A NINGUNA PARTE"), por lo cual, creo que sobra cualquier tipo de comentario sobre el film.

PD: Ya estamos un poco hartos de películas sobre la Guerra Civil Española, y además con errores históricos de bulto, como en "EL LABERINTO DEL FAUNO", donde se perseguían a los maquis a través de la Policía Nacional en vez de la Guardia Civil. el "ESPECTADOR INGENUO" en esta misma página web tiene más razón que un santo. Amén.

Soledad, esa es la sensación que se te queda al finalizar esta película, repleta de buenas intenciones y excelentes interpretaciones... pero que no llega a resultar del todo coherente.

Seamos un poco sinceros, la verdad es que no me parecen demasiado creíbles ciertos personajes, o mejor aún, ciertas interpretaciones que no están a la altura de las restantes. Si por un lado tenemos actuaciones de altura de la pareja protagonista, (Petra Martínez y Adriana Ozores), por otro tenemos papeles que no están del todo desarrollados por Albaladejo. Rápidamente, asistes atónito a todo un recital de colaboradores y amigos del director que, aunque no lo hacen mal, no aportan nada a la película, (claro ejemplo de Mariola fuentes y Antonio Gamero, que falleció poco después del estreno del film), y eso no suele gustar mucho a los que siguen muy de cerca el trabajo del director.

No es de lo mejor de Albaladejo, eso sin lugar a dudas, pero tampoco es un producto de "usar y tirar". Lo peor, sin duda alguna, es que la olvidas rápidamente, y cuando eso sucede en una película...

En fín, que me quedo con las interpretaciones de Ozores y Martínez y poco más.

La verdad, ya no hay nada que merezca la pena que venga de Hollywood. Se cuentan con los dedos de una mano las grandes superproducciones norteamericanas que llegan a nuestra cartelera a lo largo de todo un año. La película que acabo de ver, producida por dos grandes estudios californianos, (Universal y Paramount), y por otra que llevan tres grandes magnates de la industria, (Dreamworks, cuyas siglas SKG son los apellidos de Spielberg, Katzemberg y Geffen), es un bodrio de padre y muy señor mío. Lo primero, los actores. Habrán cobrado mucho por este trabajo, pero alguien debería decirle al señor Craig que siga haciendo cine europeo que es donde mejor se desenvuelve y que deje de participar en estos truños norteamericanos. Al señor Ford decirle que no por estar producida por su gran amigo Spielberg tenía que escoger este papel. Mejor haberte decantado por otra cosa más valiosa y sin efectos especiales, que todos sabemos que no eres mal actor, pero es que aquí te luces por los C..., amigo. Lo segundo, el trasfondo de la historia. Se ve claramente que el presupuesto se acabó muy pronto y que en la sala de montaje se ha quedado mucho material sin incluir. Me juego el cuello y no lo pierdo, que cuando en las próximas navidades salga en DVD y/o BLU-RAY, viene con metraje extendido. Y lo tercero, la banda sonora musical, execrable donde las haya...

En fín, un royo patatero que espero que pase al olvido muy, pero que muy pronto.