Es la palabra que se me viene a la mente al acabar de ver esta bazofia. No hay humor, por ningún lado, ni siquiera ese anunciado negro al que tan aficionado soy. Tampoco hay gore, no se crean que mi estómago es blandito y se revuelve con facilidad (a "A serbian film" le clavé un 7). No hay tampoco comedia romántica por ninguna parte, de manera que se me han acabado los géneros que supuestamente toca este engendro.

Lo único que es cierto es que por suerte es corto, y aún así se me han hecho 6 minutos muy largos entre sopor, aburrimiento y la cara oscilante entre asco e incredulidad mirando los supuestos chistes sin gracia que las dos figuras llevan a cabo. Eso sí, muy recomendable para cualquier secta religiosa que pretenda realizar una campaña contra las relaciones sexuales antes, durante y después del , noviazgo, matrimonio, divorcio y muerte. Porque lo que es cualquier tipo de líbido la elimina absolutamente desde el segundo, digamos 4.

De manera que el sr Plympton se une con su magna obra a un selecto club al que doy como calificación un 1 tras casi 2000 votos, y en el que acompañará a grandes de esto como el sin par Uwe Boll o nuestra campechana bióloga Anita Obregón. La creme de la creme, como pueden observar. Y es que suelo votar de 2 a 9: el 10 queda reservado a peliculones que, además de serlo me transmitan algo; y el 1, como es el caso, para insultos personales, es decir que además de una mierda superlativa sea un insulto a mi, tu, su, nuestra inteligencia como espectadores en particular y seres humanos en general.

Así que lo dicho, una basura con todas sus letras, de la que lo mejor que puedo decir, está en el título: Asco.