La única razón por la que no le pongo un uno es la máscara de latex de Freddie que me mantuvo acojonadísimo durante toda mi infancia. El resto, un cago de risa. La serie B le queda grande. Y es que es tan, tan mala, que ni siquiera atrajo mi atención al completo durante la escasa hora y media que dura. La manera que tiene el amigo Freddie de moverse, es secillamente descojonante. Los diálogos son absurdos, las actuciones, pésimas, y la trama, bueno, la trama es que es absolutamente incoherente, sobretodo el final, que queda abruptamente abierto para, comercialmente, continuar con la saga. A fin de cuentas, que el género de terror rara vez asusta, y cuando lo hace, casi siempre es a los niños.

Lo bueno, que me partí el culo durante una hora y media con mi amigo.