Si, todo esto ya lo habíamos visto antes. No es el argumento mas original de la década. De eso podemos estar seguros. Pero la forma en la que está contada la historia tiene algo que nos mantiene pegados a los asientos. Y todos los acontecimientos narrados son aceptados como novedosos sin ninguna incomodidad para el espectador.
Esta es una de esas muestras de que con bajo presupuesto se pueden lograr verdaderas obras dignas de los 8€ que cuesta una entrada.
Sebastián Cordero está dejando un rastro de buenas sorpresas cinematográficas a medida que avanza su carrera.

Uff. No es solo que se parezca al club de la lucha, es que se revuelca en los charcos de sudor de aquel sótano de bar hasta apestar a club de la lucha. Hasta la música del comienzo parece una copia de aquella maravillosa "Stealing fat" que sonaba al comienzo de la película de Fincher. Aún que esta historia no gira en torno a la violencia, las peleas ni al "proyecto Mayhem" todo lo demas huele demasiado a jabón. Se deja ver si le perdonas el plagio.

Excelente relato contado de una forma perfecta. Una historia de terror a la antigua usanza bañada con una atmósfera fría, inquietante y a veces claustrofóbica y salpicada con unas dosis de humor. Lástima que al igual que otros tantos grandes trabajos nacionales haya caído en el olvido. Esperemos que el tiempo haga su trabajo y ponga a esta película en el lugar que le corresponde como uno de los mejores largometrajes de animación de la década, si no de la historia, dentro del cine español.

Plúmbica. Es el único adjetivo que se me ocurre para describir esta película. Es de esas que cansan y dan ganas de salir del cine y meterse en cualquier bar. No hay absolutamente ninguna emoción creíble. En ningún momento empatizamos con ninguna de sus situaciones ni personajes.
Y eso es todo, amigos.

Oculus ha conseguido asustarme, si señores. Si bien la película empieza de forma algo torpe y le cuesta despertar va cogiendo ritmo a medida que avanza. Aún que le cuesta un poco a la historia mantener la coherencia y sus protagonistas parecen mas bien perdidos en sus propias realidades personales pronto apartamos estos hechos a un lado para dejarnos llevar por la trama que aún siendo algo confusa y "saltarina" va despertando nuestro interés a medida que corren los minutos y vamos hilando los acontecimientos que se entrelazan entre pasado y presente. Se tarda en cogerle el ritmo y nos pasamos la primera media hora sin saber muy bien que clase de historia se nos pretende contar pero ese espejo nos inquieta desde su primera aparición en pantalla. Y si, empiezan aquí, ya bien avanzada la historia, a sucederse situaciones incómodas que consiguen ponernos algún pelillo de punta en la nuca. Y por si fuera poco la música multiplica por tres la sensación de desasosiego e inquietud. Y tras la primera mitad el ritmo acelera de forma precipitada para no darnos un respiro hasta el final.
El reparto correcto destacando quizás la actuación de Katee Sackhoff. El montaje, algo embarullado, consigue atar todos los cabos de la trama de forma bastante notable. Pero si tuviera que escoger me quedaría con la banda sonora, verdaderamente escalofriante.