Revisión del cuento clásico de Jacobs, La pata de mono, esta es una de las novelas más problemáticas y espinosas de King, y la película respeta en cierta medida el nível de crudeza y oscuridad que puebla la novela, quizás porque está basada en un guión del propio King.
No hay un gran trabajo por parte de los actores, aunque todos están correctos, y quizá tenga un look demasiado ochentero para los gustos de hoy día, pero lo cierto es que es una película que se disfruta de principio a fín, y que conjuga muy bien sus elementos de guión para, de forma prgresiva, estallar en uno de los finales más terroríficos de King.
Sin pretensiones (Mary Lambert no es Kubrick) pero efectiva.

Misery es, probablemente, la mejor novela de Stephen King, y ya por eso merece la pena ver esta adaptación de Rob Reiner. Aunque es bastante fiel al libro, el guionista obvia las toneladas de sangre empleadas por King en la novela, y además elimina lo que quizá sea el mejor recurso del libro: la imaginación del escritor y como esta le sirve de escape ante el horror que está viviendo en casa de Wilkes.
Sin embargo, la actuación de Kathy Bates es soberbia y la película cuenta con algunas escenas horripilantes y una tensión insuperable.
En definitiva una buena película, pero no la adaptación que, tal vez, la novela merecía.

Sí, es un calco, y por supuesto no supera a la obra de Hitchcock (¿cómo iba a hacerlo si como mucho podría ser igual en calidad?) y sin embargo hay dos cosas, dos al menos que hacen de este film una película interesante.
Primero, y parece mentira que nadie se lo explique, Mr Van Sant ha tenido la decencia de no tocar el original en ningún sentido, y eso ya hace que esta revisíón me parezca simpática. Conociendo el estilo de ciertos remakes, Norman Bates podría haber acabado siendo un surfero regentando un chiringuito en California y su madre una antigua estrella de la canción venida a menos. Vale, quizás no entendamos para que tocar algo y dejarlo igual, pero a veces es mejor respetar las obras maestras hasta el extremo.
Segundo, a mí "Psycho" me permitió la oportunidad de ver una vieja y querida historia que hasta ese momento sólo había podido disfrutar en televisión o video, en la pantalla grande, y sólo por ver los títulos de crédito en ese formato y escuchar la banda sonora en dolby, ya le tengo cariño.
En definitiva, no todas las virtudes de una película son cinematográficas.
Las hay sentimentales también.
WMUNNY