En 1996, Tom Cruise protagonizó una película que se terminaría convirtiendo en una rentable franquicia cinematográfica que ya va por la cuarta entrega. "Misión Imposible" es espectacularidad, es acción, es intriga, es misterio y es obra de un maestro del cine como es Brian de Palma.

El director nos mete en una atmósfera muy conseguida, oscura y llena de tensión. La película cuenta una historia de espías como ninguna otra, con un joven Tom Cruise y un excelente Jon Voight. El guión puede pecar de algo farragoso, pero tampoco se puede dudar de su calidad por eso.

En definitiva, "Misión imposible" conjuga muchos elementos en un metraje que puede ofuscar un poco al espectador, pero que no le dejerá indiferente, sino perplejo.

En medio de mi vena ecchi, me decidí a ver "Freezing". Aunque al principio estaba un poco asustado por si me encontraba con una serie sin sustancia y con muchas tetas, finalmente no. No es que esta serie de Watanabe vaya a ser la revolución del anime, pero sí que sus doce episodios se dejan ver gustosamente.

"Freezing" cuenta la historia de Kazuya Aoi, quien ingresa en una escuela de Pandora, las únicas guerreras que pueden hacer frente a una amenaza alienígena conocida como los Nova. Cada Pandora cuenta con un Limiter que le ayuda en los combates.

El planteamiento es interesante, al igual que su desarrollo, acabando con un final predecible pero satisfactorio. Watanabe ha sabido hacerlo bien para no convertir "Freezing" en una película hentai de colegialas, lo cual no quita que más de una vez levantemos una ceja al ver pechos sin mucho sentido, pero es lo que tiene el ecchi.

Yo que iba con toda mi ilusión a ver este anime que todo el mundo habla maravillas de él y me encuentro con un sopor constante. Cada capítulo parecía que me encontraba una Dicronius que quería acabar con mi vida lentamente.

La idea de la que empieza no está del todo mal, unas raza superior, unas asesinas impresionantes y a la vez unas niñas. Lo malo viene cuando los personajes despiertan un interés nulo en mí, que todo parece más bien un juego de niños que pretenden ser adultos que una historia madura y emotiva.

Todo sea dicho, tiene sus momentos buenos, pero que una serie tan corta sea haga tan aburrida no es nada bueno.

Una película en la que la protagonista es Pamela Anderson Lee obviamente no puede ser buena, a no ser que sea porno. El caso de "Barb Wire" no es una excepción. Sería más fácil decir las cosas buenas de la película y acabaríamos antes, pero para darle un poco más de sustancia a la crítica, lo haré al contrario.

La ambientación de "Barb Wire" es patética y llega a dar miedo. Una ciudad con un estilo retrofuturista de lo más extraño, con una política totalitaria y un control tota. También tiene algo de steampunk, pero del feo, que no he visto vestuario más horroroso en mucho tiempo. Los escenarios son de lo más cutre, la historia es de libro, pero lo peor no es todo lo dicho anteriormente. Lo peor es que la película se toma en serio, no es una de éstas de serie B que te atrapan por lo cutre que es.

Ya dejo de escribir, que tampoco se merece más y con sólo ver el tráiler ya se ve de qué pie cojea.

No sé a qué vienen esas notas tan bajas, porque a mí la película me ha gustado bastante. No es que sea una revolución, pero es una obra de acción sólida y coherente.

El protagonista es Paul Cutler (Gabriel Macht), un policía de Los Angeles que tiene que entrenar a un equipo de SWAT de Detroit para pasar un examen. Cutler, en medio de una operación en la que muere un rehén, se convierte en el objetivo de un psicópata bipolar muy bien preparado. No es que se vaya a llevar el Oscar al mejor guión, pero consigue mantenerte interesado y entretenido durante los 90 minutos.

El elenco de actores encaja a la perfección, y aunque no actúen de forma magistral, sí que lo hacen bien. Tiran de los tópicos personajes, pero tampoco se nota mucho, porque apenas se profundiza en los compañeros, sólo en el protagonista.

En definitiva, "S.W.A.T. Operación especial" es una película que gustará a los amantes de la acción, en la que se ve muy bien cómo trabajan los SWAT y cuenta una historia entretenida.