“Clear History” es una película para la televisión por cable HBO que por su desarrollo parece una suerte de spin off de “Curb Your Enthusiasm” (también de la HBO) donde Larry David nos sigue ofreciendo sus mismas neuras e improvisada actuación, ahora al servicio de una divertida historia de perdedores y venganzas que desencadena en una especie de inspirada comedia de enredos. Podríamos pensar que una película para televisión y que se parezca demasiado a una serie de televisión sería algo malo pero no es así, “Clear History” es divertida, un humor agradable que esconde un guión correcto lleno de magnificas conversaciones que empujan poco a poco la película para hacerla más entretenida de lo que parece a primera vista. “Clear History” está llena de actores famosos y cameos (Michael Keaton y Liev Schreiber están impagables) es agradable y la historia es sencilla pero discurre de manera inteligente. No es una obra maestra, no puede escapar a su condición de producto televisivo que la hace parecer un capitulo de hora y media de “Curb Your Enthusiasm” pero eso da igual porque es una película que cumple su condición de divertir. Recomendable a seguidores de Larry David y a espectadores amantes de la comedia ligera. A mi, personalmente, me ha hecho pasar hora y media de distracción inteligente...

"Shangai Fortress" contiene lo mejor, aunque también lo peor, del cine de ciencia-ficción asiático. Lo mejor son unas escenas de acción vibrantes, unos buenos efectos especiales y cierta habilidad para captar la atención del espectador occidental. En la parte negativa hay que decir que la historia es un batiburrillo de otras historias (desde "Independence Day" a "El juego de Ender", pasando por "Starship troppers"), que los actores parecen estar en la pausa para el café de una serie de televisión y que las historias románticas son monótonas, tomando demasiado peso en el conjunto y desequilibrándolo.

Coges dos películas: una razonablemente buena de ciencia-ficción y otra razonablemente comercial de amores adolescentes, las unes dándoles quince minutos de metraje a cada una consecutivamente y ya tienes este batiburrillo que funciona a medias y que permanecerá en tu memoria tanto tiempo como una hoja de árbol en una noche de tormenta.

Como película de ciencia-ficción para adolescentes puede que funcione, pero se nota demasiado que está enfocada a un público no solamente asiático y esta mezcla de mil cosas (que pretende contentar a todos) nunca acaba de funcionar. Quizás por eso la haya comprado Nextflix para su catálogo: el típico producto gris que pretende contentar a todos los suscriptores.

Las películas asiáticas acostumbran a durar más de dos horas y (casi nunca) se hacen pesadas. En cambio, este "Shangai Fortress" dura 107 minutos y se hace eterno, además de contener un anticlímax final que convierte toda la película en un absurdo y deja al espectador con un extraño regusto en la boca. ¿Y si al final lo único que he visto es una película romántica para adolescentes disfrazada de sci-fi? Pues va a ser que sí.

Si no sois demasiado exigentes, echadle un vistazo. Para un sábado por la tarde entre cabezadas, pues que os funcione.

¿Qué se puede decir de "Niebla" que no se haya escrito ya? "Niebla" es un drama insoportablemente tenso y hermoso. Una historia de supervivencia (de naturaleza diferente) luchando contra todo y contra todos en el marco de un viejo barco pesquero. No es una película fácil de ver porque la violencia, aunque sin ser explicita, existe en forma de una creciente tensión que coge al espectador por la garganta y comienza a apretar poco a poco hasta dejarlo sin respiración. Uno puede enfrentarse a "Niebla" como si fuese un drama sobre la inmigración, o verla como una hermosa película de amor, o disfrutarla como aventuras en alta mar. Pero a pesar de ser todo eso, es diferente porque los tres géneros están engarzados hasta el punto que es imposible diferenciar donde acaba uno y comienza el otro. Puede que alguno sea innecesario (como la historia de amor) pero tampoco es un inconveniente porque todo acaba encajando. No es una película fácil de ver, primero por ese ritmo e interpretaciones propias del cine asiático tan diferentes del cine europeo o americano al que estamos acostumbrados. A esa dificulta se añade esa gravedad y tensión que llegan a hacerse insoportables. Pero eso, en un entorno increíblemente hermoso y bien rodado, se convierte en una experiencia que te impide desviar la vista de la pantalla. Puede que no os guste o incluso que os violente, pero dadle una oportunidad porque si conectáis con ella os daréis de bruces contra una auténtica maravilla.

Película que aprovecha las posibilidades del genero de metraje encontrado para ofrecernos una perturbadora y magnifica historia a medio camino entre el drama, el horror y la comedia, servido con tan solo dos personajes y mucho que contar. Mark Duplass está magnifico (con ese tipo de interpretación tan natural que siempre tiene) y ya desde el comienzo compone un complejo personaje sobre el cual bascula toda la película (no en vano es el sujeto activo de la filmación en su primera mitad) para después sorprendernos con esa aparente bonhomia que esconde el auténtico germen de la historia. Una historia envenenada de humor negro y con un desenlace magnifico. ¿Somos capaces de juzgar de manera correcta a un desconocido? Lo mas terrorífico de Creep no es su planteamiento de película cercana al terror sino su capacidad para darnos a entender que hasta el mas cuerdo y amable de nuestros vecinos, pueda ser un desequilibrado si sabe fingir bien. Y explica la historia desde una especie de humor de bajo perfil que funciona maravillosamente bien porque consigue desconcertar al espectador y sacarlo de su zona de confort para hacer que lo que cree que es algo suave y bienintencionado... no lo sea. Una película donde no pasan demasiadas cosas, que basa su encanto en los diálogos y el desconcierto y que es una de esas joyas que no deberían pasar inadvertidas.

Discreto thriller de espías a medio camino entre “El caso bourne” y una película de serie B que recupera a un otoñal James Bond (Pierce Brosnan sigue demostrando ser uno de los peores actores de la historia) y pone a nuestro geriátrico espía en la calle haciéndole ir de un lado a otro en una historia tan delirantemente mal construida que asusta. También asusta que el director de este despropósito sea nada más y nada menos que el siempre solvente Roger Donaldson). Es como si todos, directores, actores, equipo técnico, quisieran mantener el pulso de la película pero la película se hunde irremediablemente por un inexplicablemente complejo guión que no ayuda al espectador a sentir simpatía por estos solitarios asesinos a sueldo. Desconozco si es un problema de guión o la novela en que se basa ya era compleja en si misma pero el guión no resuelve el problema. Al final lo único que importa es el pim pam pum y poco más. Pirotecnia de segunda con alguna buena escena de acción (no muchas) y ya está. Un thriller para ver sin demasiada atención y olvidar a los cinco minutos.