A la gente joven se la cuelan fácil, pero a los que somos mayores, no nos la dan con queso.

Pues resulta que en 1977 se estrenó "Abismo", con Nick Nolte y Jacqueline Bisset como protagonistas (y por cierto donde esté Jacqueline Bisset en los años 70, que se quiten Jessicas Albas y similares). La película estaba basada en una novela de Peter Finch (el mismo que escribió "Tiburón", la que llevó al cine Spielberg) y se desarrollaba en Jamaica, con los mismos elementos que se dan en ésta (Narcotraficantes, submarinismo, barco hundido, peces voraces, drogas y tesoro), solo que mejor hecha y con intérpretes de mas enjundia.

O sea que es un "remake" con variantes, pero mucho, mucho peor.

No se si será por mi edad (64 tacos) pero la historia que cuenta Fesser, es tan similar a la que sucedió con un compañero de mi colegio en los años 50 y mucho, que no dejo, después de ver la película de Camino las extraordinarias coincidencias, como la de los curas en la habitación, los rezos, las estampitas, la idea del sacrificio que pide Dios a los padres, como es la muerte de un hijo, para poner a prueba su capacidad de sufrimiento que solo puede transformarse en acatamiento a una voluntad superior, la alegría por su "encuentro" con la Virgen,. ..todo eso es real, porque lo he vivido y a los años que se supone que tiene la niña.

Respecto a la película es dura de ver por dos motivos, el de la enfermedad que es contada con toda la crudeza que supone una enfermedad como el cáncer, sin ahorrar detalle, y la mas fuerte, como son enfocados los principios religiosos de la familia (o de la madre) que la hacen esforzarse por sublimar las penalidades como una exigencia que te impone un Dios, sin saber por que o para que, como si éste Ser Superior no tuviera cosas mejor que hacer que andar jodiendo a la gente por puro divertimento.

Las interpretaciones muy buenas, como se demostró en los premios recibidos, y coincido con otros foreros en que algunos de los sueños no aportan nada esencial al contenido del film

Despues de tantos comentarios no se puede decir nada nuevo, pero diré que si tienes claro lo que esperabas de esa película, te lo da y multiplicado por cien. El tiempo clasificará Avatar como el avance cinematográfico mas importante en el año 2009, al igual que en su tiempo lo fué el cine sonoro, el color, el cinemascope. La maravilla de pensar que los na-vi son criaturas diseñadas, cuando te parecen tan reales que esperas encontrárterlos a la salida del cine, es un aporte visual como yo no había visto nunca en ninguna película que hubiera utilizado efectos especiales de tan sofisticada tecnología.

Siendo el cine sobre todo un espectáculo para ser visto, me parece secundario acudir a flaquezas de guión. Los aficionados a literatura de ciencia ficción saben que la serie de Fundación, de Isaac Asimov, parte de la coincidencia de que el autor estaba leyendo una historia sobre el Imperio Bizantino, y trasladó a su trilogía de literatura de anticipación los hechos de la historia real.

Por cierto, yo encontré en Avatar algunos elementos de "La selva esmeralda" y "Jugando en los campos del señor", películas de evidente fondo ecológico.

Una película que te hace pensar es merecedora de una especial atención por parte del espectador, y aunque haya que diseccionar sus diferentes componentes, cada uno puede ver o sentir la parte que mas le conmueva o le afecte. Pero la pareja protagonista transmite muchas cosas, y bastantes de ellas a través de las miradas, los gestos, las posturas, las sonrisas, los enfados, para lo que hace falta un muy buena actriz como Kate Winslet, si bien yo creo que Nicole Kidman también podría haberlo hecho igual de bien.

Pero lo esencial, para mí, es el secreto de la protagonista, como lo guarda y como lo mantiene, pese a que la ocultación del mismo le resulte tremendamente perjudicial. Y la reflexión de que todos, o casi todos, hemos mantenido secretos durante mucho tiempo, a veces durante toda la vida, sin confesarlos absolutamente a nadie.

Y el resto va en spoiler, por si acaso.

La película está llena de referencias a las películas clásicas de terror, protagonizadas por jovenzuelos, de las que hay unas cuantas, y todas cortadas por el mismo patrón. Incluso en el principio de la película, cuando llegan a la gasolinera, te parece que vas a ver otra vez la matanza de Texas en su versión doscientas.

La originalidad es que, bajo ese pretexto, se presenta una película con dos lecturas, la primera, la clásica de toda la vida, y la segunda, la que le da la vuelta, que es la que se exhibe en los laboratorios del sótano. De la mezcla de las dos sale un corte de mangas multidireccional,que el espectador avezado puede entender perfectamente.

Y que para mí está claro:

- Los esquemas de las pélículas de terror están tan trillados, que el guión previsto exige un ritual casi invariable, con opciones mínimas, como que sobreviva alguien o no.

- Los del laboratorio son los factores y responsables de todo este anquilosamiento. Productores, cámaras, efectos especiales, directores.

- Los "ancestros" somos los espectadores; queremos ver sangre, dolor, angustia, miedo, un poco de sexo, un par de tetas.

La reflexión final: Que les den por el saco ya a estas películas de jovencitos que mueren uno a uno entre gritos.

QUEREMOS otra cosa ya !!!! Por favor.