Dentro de las últimas películas irlandesas sobre religión, tenemos a esta cinta dirigida por John Michael McDonagh y que sin duda resulta una sorpresa en el panorama de estrenos de las últimas semanas. El protagonista es Brendan Gleeson uno de los actores más prolíficos en su país de origen Irlanda y también conocido por sus papeles en grandes producciones como Troya o Braveheart entre otras.


La historia se trata de un cura que es amenazado de muerte por un feligrés sin que sepamos hasta el final quien es el personaje que pretende acabar con su vida. El desconocido feligrés ha tenido una vida muy traumática por un hecho de índole sexual de hace muchos años que no ha conseguido olvidar. La película transcurre de domingo a domingo en toda la semana que le he dejado para que ponga sus cosas en orden y esté en paz con Dios.
Se trata de una ácida comedia negra más cerca del drama humano que de la comedia por los hechos que cuenta. La historia sucede en un pueblecito de la vieja Irlanda y nos va describiendo todos los personajes un tanto especiales y exóticos en un mundo rural y de tradiciones muy arraigadas.
Es una crítica feroz al mundo en que vivimos que nos hace permanecer impasibles ante las noticias más crueles por estar "acostumbrados a ello" y que como en este caso las consecuencias indirectas de este hecho son un mundo terrible lleno de abusos,maldades,odio y desamor .
El ritmo de la película es lento lo que la perjudica bastante. Los diálogos son bastante buenos lo que permite mantener un poco el interés. Pero sin duda la cinta es un ejemplo de la inmisericordia del ser humano y el resultado más que adoctrinar deprime al espectador y se hace un tanto pesada y poco digerible.
A destacar la maravillosa y adorable interpretación de Gleeson que nunca defrauda.

A mí la película me ha inquietado e interesado, me había aportado cosas nuevas a un género tan usado, me había impresionado la interpretación desgarradora de una Sandra Bullock diferente pero el final es incoherente con la línea argumental que parece plantear la película y te deja como diciendo: "no me lo puedo creer..." con una sensación de haber perdido el tiempo total. Espero que salga el dvd y tenga un final alternativo.

Una película tierna y simpática que rinde homenaje a los grandes autores de la comedia americana y a las películas del realismo mágico como "Amelie". A ratos tierna, divertida y a ratos fantástica y sombría, no es la octava maravilla del mundo pero para ser española y moderna es muy digna y agradable de ver. No son necesarios los tacos ni las escenas de cama ni los fetichismos almodovarianos. Este film vence y convence.

Es un film que respira dinero por los cuatro costados. Los actores están fantásticos y la historia contiene elementos suficientes para atrapar al espectador, hay romance, intriga, hasta un juicio y magia, mucha magia pero... la sensación es de frialdad y sobre todo de que ha enfocado todo hacia el odio entre sus protagonistas lo que genera una sensación de decepción en el espectador.

Lo cierto es que fuí a verla conociendo la acidez, el mal gusto y la osadía irreverente del humor de los hermanos Farrelly pero la presencia de Ben Stiller y una trama que prometía otra clase de desarrollo y final me animó. Ben está tan divertido como siempre, las situaciones que se presentan aunque dantescas resultan en ocasiones hilarantes pero....
Cuando se va preparando el final, ya van chirriando algunas cosas que además para más inri no tienen ningún sentido para el desenlace que es cuanto menos sorprendente y sumamente decepcionante.

Al fin y al cabo se nota quien está detrás de la cámara...