Cuando me enteré de la existencia de este proyecto me ilusionó poder ver esta historia, como oyente que fui de 'El larguero' de De la Morena durante varios años, allá por los 90-2000s, en el momento del máximo apogeo de su popularidad y liderato radiofónico.

Una vez vista, tengo que decir que si bien es innegablemente entretenida, e interesante lo que cuenta, me ha sorprendido negativamente lo poco seria y lo exagerada que es, además de su cierta vulgaridad general en el tratamiento de personajes, diálogos y tramas.

Sabía que era una comedia, con toques dramáticos, pero por eso no tenía que ser tan burda y exagerada en el retrato que hace de aquella famosa rivalidad deportiva. Hay momentos de vergüenza ajena por parte de actores secundarios (en especial el patético Jesús Gil) y en bastantes situaciones.

El siempre estupendo actor que es Javier Gutiérrez suma puntos, no tantos como el más limitado Miki Esparbé. El resto del elenco actoral o simplemente cumple... o hace el ridículo.

En fin, que me parece bien haberla visto, y me interesa lo que retrata, siendo sin duda entretenida, pero el conjunto es muy mejorable y está lejos de la calidad de otras producciones de Movistar+, como la excelente 'Antidisturbios', o el buen thriller 'Hierro'.

Aun partiendo de un atractivo punto de partida (un hombre tiene la oportunidad de desaparecer y abandonar su vida tras ser dado por muerto en un incendio), esta película no consigue mantener el interés debido al “autismo narrativo“ y a la anodina interpretación del actor principal, además de a un estiramiento excesivo de la historia.

Desde la Seminci 2006:

Como de todo hay en la viña de los festivales de cine, dos engendros se han colado incomprensiblemente en el concurso de este año, y ambas relatan (es un decir), historias en torno a “corredores”; si en la filipina Kubrador la protagonista es una corredora de apuestas ilegales en las callejuelas de Manila (no se ve otra cosa), en la alemana, El corredor de seguros, padecemos la imbecilidad de un tipo que al parecer se dedica a la venta de seguros. Tan impresentable la una como la otra.

Entre los numerosos documentales que ha seleccionado en esta presente edición el Atlántida Film Fest, se encuentra este interesante "The European", que hace referencia al vicepresidente de la Comisión Europa, el holandés Frans Timmermans, al cual sigue con su cámara a pocos centíemtros el documentalista responsable de esta película, mientras habla con él y le graba durante sus numerosas reuniones, actos, visitas, comisiones, conferencias e intervenciones en el Parlamento Europeo.

Pero también hay espacio para que veamos a Timmermans en instantes de su vida privada y familiar, ya sea cocinando, en el fútbol con su hijo, o con amigotes en un concierto de su ídolo musical, Bruce Springsteen, en una clara intención del autor de humanizar a la clase política europea, y presentarla como gente "normal" con una responsabilidad fuera de lo común; y que aunque tengan que lidiar con movidas gordas como la crisis de los refugiados sirios, los nacionalismos (en esa especie de "Estados Unidos de Europa" q es la UE), o el Brexit, a la hora de la verdad estos mandatarios se comportan de manera parecida a la de cualquier "european".

Ah, a Rajoy se le ve un par de veces de fondo...

'El color de las palabras' es una bienintencionada, aunque finalmente fallida película en torno a la disfasia, enfermedad que impide la total comprensión del lenguaje y el habla de las personas que la padecen. Se centra en una mujer disfásica que pretende recuperar a su hijo pequeño.

Aburre en líneas generales, pero al menos tiene la decencia de no dejar asomar en ningún momento la sensiblería y mojigatería con la que Hollywood abordaría una película con el mismo material. Es decir, esto no es 'Yo soy Sam', ni su protagonista tiene que hacer absurdas muecas ni llorar tanto como Sean Penn.