*Es fácil de ver

Sangre de Zeus engancha desde el principio, por su estupenda trama y su trepidante acción; más de la que se ve en Castlevania. Quizás no recomendada para los más peques, por su explicita violencia, pero sin duda muy atractiva y emocionante para adultos.

Sus ocho capítulos se ven en una tarde sin problemas, y con mucho gusto. Cada capítulo guarda alguna sorpresita nueva, escenas impactantes, revelaciones, etc; es fácil caer en la tentación y querer ver más.

*No es solo el héroe lo que importa

En Sangre de Zeus no solo podremos conocer a fondo a Herón, ya que también se molestan en acercarnos al resto de personajes principales lo suficiente para poder odiarlos o quererlos; y lo más importante de todo: Comprender los motivos que mueven a cada uno.

*Una gran experiencia que te acerca al Olimpo

Sangre de Zeus ofrece otra visión nueva sobre los dioses olímpicos y las muchas historias que ya conocemos. El enfoque que toma sobre esta conocida mitología, y los diseños, tanto de los personajes, como de los escenarios, son sublimes y muy acertados.

Después de tantas versiones distintas en tantas películas y series, siempre es de agradecer contar con unas pocas que sobresalgan tanto por su lograda y única estética, como por su atractivo argumento. Entre estas joyas tenemos por ejemplo el videojuego God Of War, por ejemplo.

Sangre de Zeus logra destacar entre otras producciones, y ofrece al público un espectáculo muy vistoso y sin cortes; y son muy numerosas las referencias a estos grandes mitos y leyendas. Un visionado obligatorio para todos los fans de la animación y/o de la mitología, que además cuenta con una genial banda sonora, muy adecuada para la ocasión; la guinda del pastel.

*Conclusión

Sangre de Zeus es una de esas series que hay que ver una vez al menos, sobre todo los aficionados a la animación y/o a la mitología griega. Una historia emocionante y muy fácil de ver, que nos acerca a las leyendas que tanto conocemos, y nos ofrece su propia visión.

Una banda sonora que combina de maravilla con su abundante acción; aunque quizás no apta para los más pequeños de la casa, por su explícita violencia. Los diseños tanto de los personajes como de los escenarios son simplemente sublimes y muy acertados. Engancha de principio a fin y no te deja indiferente, altamente recomendada.

Escrito por Javi Sardi

*Hora de aventuras y sus mundos fantásticos

Durante diez temporadas pudimos vivir toda suerte de aventuras de la mano de un niño (Finn) y un perro (Jake); aventuras que tenían lugar en mundos de fantasía repletos de princesas, brujas y todo suerte de seres.

Hora de aventuras se hizo un lugar entre los más pequeños (la presentación de personajes no podía ser más colorida y llamativa) e incluso entre un público más adulto, encantado con lo absurdo de sus tramas y cierta profundidad que estaba ahí, para quien la quisiese descubrir.

*Hora de aventuras, serie de culto

También destacaba su mezcla de aventuras, acción, comedia e incluso drama y romance. Además, sus historias, un tanto autoconclusivas (y aparentemente sencillas) al inicio, fueron desembocando en algo mucho más ambicioso.

El hueco dejado por dicha serie de animación fue inmenso y todos (al menos los fans) nos preguntábamos qué seria capaz de ofrecernos Pendleton Ward, su creador, tras ella, ya que había dejado el listón por las nubes (por las nubes de esos mundos mágicos tan presentes en su famosa obra).

*The Midnight Gospel tiene mucho que contar

El primer capítulo de The Midnight Gospel, en el cual nuestro protagonista, Clancy, viaja a un planeta sumido en un apocalipsis zombi, puede recordarnos un poco al primer capítulo de la serie de Finn. Si bien, el devenir/resultado de uno y otro es bien distinto.

Y es que lo digo desde ya: quienes esperen encontrar en The Midnight Gospel una nueva (o una continuación de) Hora de aventuras van a sentirse francamente decepcionados.

*The Midnight Gospel, contenido y continente

The Midnight Gospel, para empezar, no es una serie de animación para todos los públicos (Netflix la tiene catalogada para mayores de 16).

En The Midnight Gospel tienen cabida la religión, la violencia e incluso el sexo. Y las escenas absurdas de acción quedan en un segundo plano, eclipsadas por diálogos extensísimos (los que mantiene Clancy con alguno de los habitantes del planeta de turno al que viaja) sobre cuestiones terrenales y/o incluso espirituales.

Vale, sí, sigue siendo de lo más colorida (y psicodélica) y, sí, sigue contando con un diseño de personajes de lo más peculiar (los de esta serie son más excéntricos y, en líneas generales, también más feístas), pero en ella priman (lo repito para que no haya la más mínima duda) las conversaciones; conversaciones profundas, extensas, existencialistas…

Curiosamente, dichas conversaciones siempre tienen lugar en medio de un entorno de lo más caótico (sic).

*Conclusión

Filosófica como pocas (series de animación o no), The Midnight Gospel nos habla de la vida y la muerte; de la autoconsciencia; del autodescubrimiento. Y lo hace envuelta en un papel multicolor marca de la casa.

Si Hora de aventuras era un canto a la amistad, The Midnight Gospel es un canto a la vida. O, mejor dicho, a vivir el presente; a averiguar tu lugar en el mundo. Curioso que nos llegue en plena pandemia mundial.

Lo mejor: Sus posibilidades son prácticamente infinitas. El último capítulo es una auténtica joyita.

Lo peor: Que sea tan discursiva (y densa, muy densa) puede echar para atrás a más de uno. Lo mismo sucederá con los que esperen una especie de continuación de Hora de aventuras.

Escrito por Javier Mazo

*La piscina bizarra

Cuando lees el argumento de The Pool y ves que gira en torno a una pareja de novios que se queda atrapada en una piscina vacía de 6 metros de profundidad, junto a un cocodrilo, ya deberías saber a qué tipo de película te enfrentas. No esperes un estudio arquitectónico sobre el diseño y construcción de piscinas, ni tampoco un documental de reptiles de la National Geographic. Esto se trata de pura diversión.

Y la película la ofrece a raudales. La situación inicial es suficientemente delirante para tomarte esta película de terror bastante a cachondeo. Y a medida que avanza te aseguro que las decisiones de guion son aún más bizarras y absurdas. La credibilidad de todo lo que sucede en pantalla es nula, ni falta que hace.

*Un survival de serie B

The Pool es carne de maratón golfa y festivalera. Una de esas películas que se disfruta más con un grupo de gente, con palomitas y una buena predisposición a pasarlo bien. Si te acercas a ella con el ceño fruncido y esperando sacarle defectos al CGI o a sus giros de guion, te has equivocado de película y casi de mundo. ¡Estamos hablando de un tío metido en una piscina luchando con un cocodrilo! Sería como pedirle coherencia a los tiburones voladores de Sharknado (Anthony C. Ferrante, 2013) como fenómeno atmosférico.

Este survival imposible se enfoca al público consumidor de bizarradas de Serie B o Serie Z. Films de bajo presupuesto y de carácter festivo sin ninguna otra pretensión que entretener al personal. Se podría discutir si el director se toma totalmente en serio o no su película y si en realidad es una especie de Ed Wood tailandés. No lo creo, aunque sí me sobra un poco la subtrama melodramática sobre la paternidad y el discurso anti abortista. Creo que lo utiliza como simple truco para que conseguir que el público empatice más con la pareja.

El director se muestra muy efectivo en su puesta en escena y le saca todo el partido posible a una situación tan limitada al espacio. Acción, risas, suspense y un poquito de sangre, son los ingredientes de este suculento plato tailandés. No siempre apetece consumir productos gourmets, el fast food también alimenta el alma cinéfila.

*Conclusión

The Pool es una divertida película de terror tailandesa escrita y dirigida por Ping Lumpraploeng. Trata sobre una pareja que se queda atrapada en una piscina junto a un hambriento cocodrilo, bajo la atenta mirada de un perro. Es un cachondo survival de serie B con un ritmo frenético e ideas tan descabelladas que te hace pasar un buen rato palomitero.

En un símil musical, se podría decir que el cantante Elton John tiene canciones mejores, pero ninguna tan divertida como su Crocodile rock. Pues bien, ver The Pool sería como entonar el estribillo de esa canción en un karaoke «La lalalala la lalalala la lalalala la». Es una mera invitación al despiporre y la fiesta. Así que se la recomiendo a los fans del terror festivalero y productos de entretenimiento sin otras pretensiones.

Escrito por Daniel Farriol

Puntuación: 7,5

Areta: los orígenes del detective

El mítico personaje de las anteriores entregas de El Crack era un hombre enigmático con un perspicaz olfato para la investigación privada. Sin embargo, la introversión era una de sus definiciones. Pero esta característica era algo que había permanecido oculto en el personaje hasta El Crack Cero. En esta nueva película, Germán Areta no aparece como una persona tan fría y distante. El caso que investiga y sus consecuencias hará que su personalidad cambie hacia el Areta que Garci daba a conocer en los ochenta.

El personaje de Don Ricardo, también llamado Abuelo, da también las pistas para entender quién es Germán Areta y cómo evoluciona en un periodo corto, pero en el que España se ve enfrentada a un periodo de cambio. Sin duda, el caso del sastre Benavides será el que cambie el destino del detective.

*Todos los cabos atados

Se puede afirmar sin duda alguna que lo de dirigir películas para Garci es como montar en bici: por mucho tiempo que pase, no se olvida. A pesar de que han pasado más de veinte años de diferencia entre las primeras partes de la trilogía y esta tercera, la continuidad en el guion, la fotografía y el montaje dice mucho de las dotes cinematográficas del director.

Por un lado, muchos detalles de los diálogos entre los personajes vienen hilados a través de las anteriores entregas, lo que ha debido significar un trabajo más que meticuloso por parte de Garci y Muñoz, los guionistas. Prueba de ello es la escena en la que Areta y Conchita se conocen y debaten entre ellos si llamar a la policía o no tras su encuentro, pero finalmente acuerdan que se verán en un futuro.

Por parte de la fotografía y el montaje, El Crack Cero toma el monócromo como si de la televisión de los 70 se tratase, a diferencia de las siguientes entregas. Se trata de un homenaje claro al cine negro más clásico. A su vez, el montaje da continuidad a la trilogía a partir de los planos recurso del Madrid de los 80 y con la banda sonora de Jesús Glück de fondo. Si uno viera las tres películas del tirón no encontraría ni un fallo raccord.

*En los bajos fondos del Madrid setentero

La película transcurre en el momento en que el detective Areta contrata a el Moro, un ex criminal, para que le ayude a bucear en los bajos fondos del Madrid de los setenta, en un momento en el que Franco se encuentra muy enfermo y la dictadura está a punto de caer.

El director José Luis Garci no tuvo la posibilidad de contar con su asiduo Alfredo Landa en esta nueva edición. Sin embargo, su reemplazo lo cubre el actor Carlos Santos, que da vida a un Germán Areta mucho más joven. No deja nada que desear, pues se adapta perfectamente al papel. Por parte del personaje de Moro, Miguel Ángel Silvestre cubre la ausencia de Miguel Rellán y lo hace con honores. Ambos hacen un dúo que refleja la juventud de los personajes.

*Conclusión

En resumen, lo que Garci ha sabido hacer a la perfección es hilar las películas anteriores con esta nueva edición de El Crack. La continuidad es la mayor experiencia que la sala va a poder disfrutar. Como si no hubieran pasado más de veinte años entre la segunda y esta tercera parte, la Gran Vía de Madrid sigue siendo aquella gran avenida llena de cines y teatros recorrida por cientos de coches cada día y Germán Areta sigue siendo el mismo investigador perspicaz que se presentaba en los ochenta.

Escrito por Lucia Blazquez

No eres tú, bueno, sí

A pesar de todo ha tenido la suerte de ser la película que une a cuatro de las actrices más reconocidas en los últimos años en la industria española. Un cuarteto protagonista capitaneado por Blanca Suárez, junto a Amaia Salamanca, Belén Cuesta y Macarena García. Desgraciadamente, el resultado final ha sido desastroso y una mancha negra para las cuatro actrices. El guion hace aguas por todos lados y no se sostiene en ningún momento. La trama de enredos familiares no es ninguna novedad, pero la manera en la que se aborda narrativamente es nefasta y previsible. Una madre con vida alegre, obliga a sus cuatro hijas a buscar a su padre biológico. El problema surge en la manera en la que suceden los hechos, no llegando a conectar con el público en ningún momento. El desarrollo parece sacado de una serie cómica española de los 90 de serie B.

Desengranando el nudo de la historia se puede comprobar que hay una falta de ideas notoria. Esa manera de narrar las aventuras del personaje de Marisa Paredes, parece una copia de mal gusto de ‘Mamma Mia!’, salvando las distancias. La presentación de cada pretendiente a padre se hace de manera abrupta y rápida, el espectador no llega a quedarse con ningún personaje. No hay emotividad, no hay sensibilidad… Hay una unión de escenas sin un hilo en conjunto, una coherencia profunda. Una sucesión de intento de comedia moderna, que termina por verse sus costuras y no hay demasiadas secuencias salvable. No hay nada peor que se vea la intencionalidad de un film desde el primer minuto y no haya ninguna sorpresa. Ni siquiera cumple la función de ser una cinta feel-good ligera. Es una espinilla en el buen hacer del cine español de los últimos años.

Tirón feminista

Uno de los grandes inconvenientes que se percibe en A pesar de todo es el oportunismo cinematográfico al contexto social que se está viviendo en la actualidad. La lucha feminista y la liberación femenina ha desencadenado la producción de películas con protagonistas femeninas con mucha fuerza y se agradece, pero así no. Este film cae en el cliché de hacer personajes femeninos estereotipados a más no poder: la hermana perfecta y obsesionada con el trabajo, la hermana lesbiana y masculina liberal, la hermana casada y alcohólica que vive en Madrid y la hermana malasañera total… Una creación de cuatro mujeres que no va más allá del tópico, no hay profundidad, no hay humanidad. No tienen personalidad y es una pena por desaprovechar una oportunidad de reivindicar la imagen femenina. Quedan en un plano superficial que no busca mayor sentido que la exposición social.

Por lo cual, se puede percibir el olor a oportunismo que al ser mal planteado. Por suerte, se han podido ver grandes filmes que ensalzan a las mujeres como ‘Wonder Woman’ o pequeñas producciones como ‘Carmen y Lola‘, pero aquí no hay ninguna intención de mostrar mujeres reales. Ni heroínas de cuento, ni trágicas luchadoras, sino que no hay ni un ápice de homenaje a la cotidianidad femenina. Además, el film se ha vendido en Netflix como una producción de “mujeres reales”, que lo único que hace es jugar en contra hasta el último minuto. Sin embargo, puede decirse que la estrategia de marketing es uno de los puntos positivos: muchas personas la verán por el elenco que forma parte del film, pero después intentarán borrarla de sus memorias lo antes posible. Sorprende la decisión de los actores de realizar este proyecto.

Crisis creativa

Netflix ha pinchado con A pesar de todo. Podría ser síntoma de la sobre-explotación de producciones propias de la plataforma. Se nota la apresurada estrategia para combatir la inminente salida de otros medios. Pero cantidad no es calidad y este film es ejemplo de ello.

Otra falla es la intención de hacer de Madrid el escenario destacado de la película, pero el espectador no puede nadar entre sus calles, enamorarse de su ambiente y mucho menos tratarlo como importancia. El escenario, pese al juego que podría dar, se queda en un mero atrezzo de la acción, aunque la planificación de los planos y de la dirección fotográfica indique otro mensaje. Una convergencia de factores que subrayan sus flaquezas.

Por último, a nivel interpretativo, cabe decir que acostumbrados a otros resultados de sus actrices, aquí se ve cierta flojez en algunas de ellas. Macarena García falla en su intento de dar personalidad a Lucía y hace recordar su papel de adolescente alocada de ‘La llamada’, ya se sabe donde acaba María Casado. Blanca Suárez no puede apoyarse en sus compañeras, por lo que queda desnuda con su dramatismo folclórico y queda patente en su manera de afrontar su trama con Maxi Iglesia. ¿Puede ser más de película? Edulcorado no, exceso de azúcar. Ambos muy impostados. Amaia Salamanca se puede resumir su actuación en compararla con la realizada en la olvidable TV Movie de ‘Felipe y Letizia’ y la única actuación salvable: Belén Cuesta. La actriz ha sabido defender su personaje y darle cierta verdad. Tiene una magia natural que consigue transmitirla en pantalla.

El resto del reparto al no calar entre el público, pasa sin pena ni gloria y son actuaciones descuidadas y olvidables. Una pena tener a Emilio Gutiérrez Caba o Rossy de Palma y no beneficiarse de su arte.

Conclusión

A pesar de todo es una película fallida en todos los aspectos: en el guion, las actuaciones, la planificación técnica… Podría haber sido una gran oportunidad, pero es una trampa para el espectador. El elenco principal y secundario, la idea original y la intención pueden provocar el enfado del público al sentirse defraudado. No se puede hablar de mejoras al no haber profundidad, verdad, un argumento que se sostenga y un desarrollo interesante. El oportunismo de utilizar el movimiento feminista es un error, al no haber ni un ápice de sororidad en el film. No es un homenaje a mujeres reales, sino al contrario, al estereotipo. Una pena de película. Prescindible.

Escrito por Diego Da Costa