Steve McQueen interpreta de maravilla al millonario Thomas Crown en este fabuloso film al que hay poco que reprocharle. Se adapta muy bien a su papel la actriz Faye Dunaway la cual le da un toque de sensualidad excelente a la película que hace que el espectador disfrute en alguna que otra escena.

Para los fieles seguidores de Steve McQueen es una película que no deben perderse ya que no tiene nada que ver con el remake de El secreto de Thomas Crown (1999).

Magnifica ambientación y realización de algunos detalles y situaciones como una vez realizado todo el robo del banco Thomas Crown se empieza a reír de satisfacción por lo conseguido. O cuando están jugando la intensa y sensual partida de ajedrez Steve McQueen y Faye Dunaway.

No tengo ni idea de si el efecto “Crepúsculo” ha podido afectar a esta película para bien o para mal, respecto a si va a conseguir tener el mismo éxito que la saga vampírica o el mismo taquillazo. Lo que sí puedo decir, es que “The Host” no me ha parecido una mala cinta de ciencia ficción.

Lo que sí sé, es que a Andrew Niccol no le tiembla el pulso a la hora de dirigir una solvente cinta que quizás no hubiera sido igual si la hubiera realizado otra persona. A mí me entretuvo porque la historia que cuenta, aunque no me parezca del todo original, me ha enganchado y es curiosa.

Estaría interesante saber cómo le surgió a Stephenie Meyer la idea de “The Host” y saber en qué se basó para la confección de la novela. Yo lo que sí puedo decir es que me ha recordado bastante a la serie “First Wave” (1998) y a la cinta “The Hidden” (1987). Y nombro a estas dos, en concreto la primera, porque la temática de alienígenas (en este caso su conciencia) metiéndose en cuerpos humanos es algo que ya vi en dicha serie, la cual estaba producida por Francis Ford Coppola.

No obstante, a favor de “The Host” juega a su favor una lanza innovadora: el doble personaje en uno, es decir, experimentar lo que el invasor (Werender) y el invadido (Melanie) sienten en un mismo cuerpo. Werender es la huésped que se aloja en el cuerpo de Melanie tras ser capturada por la raza alienígena que ha colonizado el planeta al completo, siendo los humanos una especie en extinción. Melanie, se resiste a abandonar la posesión de su mente y luchará por seguir existiendo aunque sea en un reducto de su conciencia, ya que Werender es quien tiene el control de su cuerpo y funciones motrices.

La doble interpretación corre a cargo de Saoirse Ronan (“Hanna”, 2011). La actriz es capaz de mostrar su lado más luchador y resistente como Melanie, incapaz de rendirse y hacer lo que sea por sobrevivir y a su vez como Werender, es un ser que se cuestiona si debe ser fiel a su raza porque duda de si lo que se le está haciendo a la raza humana es correcto. Esa dualidad moral me ha gustado bastante. Del resto de actores, los únicos rescatables son William Hurt (“Dark City“, 1998) y Diane Kruger (“Las vidas posibles de Mr.Nobody“, 2009). Ambos actores de peso, logran que la cinta no se convierta al completo en una monotonía amorosa que sobraba por momentos debido a su exceso.

Como he mencionado, a la cinta se le hace un flaco favor añadiéndole dosis excesivas de romanticismo, limitando quizás la película a un público más específico. En este aspecto, se nota que prefiere dar el “taquillazo” prescindiendo a su favor de calidad argumental, campo en el que falla. Y más aún cuando descaradamente en esta supuesta invasión (de la que se obvia por completo como ha sucedido, sin mostrar ni si quiera un simple recuerdo del pasado sobre cómo surgió), todos los protagonistas son físicamente atractivos.

Por último destaco una semejanza que he visto con el último film de Niccol, “In Time” (2011), en la que el villano ejerce el mismo rol de perseguidor incansable hasta que logra atrapar (o no) al protagonista de la cinta. Si Cillian Murphy perseguia hasta la saciedad a Justin Timberlake, aquí Diane Kruger hace lo mismo con Saoirse Ronan.

El director británico Clive Barker nos presentó por aquel año de 1987 un nuevo concepto del terror, que se adentra en los temas del sadomasoquismo compenetrados con el dolor y el placer.

Basada en la novela del mismo director llamada “The hellbound Heart” y con un presupuesto de 1 millón de dólares de los cuales recaudó 20 (en taquilla), se logra realizar una película que para muchos es considerada como cine de culto.

Grandes realizaciones de maquillaje y efectos especiales elaborados con maquetas (esqueleto humano con un esbozo de músculos y órganos) que logran complacer a la perfección durante los casi 95 minutos que dura. Entre esas curiosidades, cabe añadir que para maquillar al famoso “Pinhead” (Doug Bradley) se tardaba alrededor de 6 horas.

Película en la que algunas escenas fueron censuradas en algunos países como: Australia, Finlandia, Francia, Holanda, Noruega, Suecia, Inglaterra, Islandia (antes prohibido), Corea del Sur, Dinamarca, Alemania, EEUU y Corea del Sur.

La historia empieza cuando un hombre llamado Frank (Sean Chapman) adquiere en un bazar oriental un extraño cubo en el cual tiene misteriosos simbolos dorados en sus caras. Frank descubrira que esa caja es en realidad un puzzle que te abre puertas, y trae los Cenobitas (seres que para unos son demonios y para otros angeles) con los cuales Frank sobrepasará los límites placer de la carne y del dolor. Muriendo despedazado por cadenas, anzuelos y garfios.

Años después, se transladan el hermano Larry (Andrew Robinson) y su hija de un anterior matrimonio Kirsty (Ashley Laurence) junto con su modélica esposa Julia (Clare Higgins) a la casa de Frank pensando que este ha desaparecido, si saber lo horribles acontecimientos que allí sucedieron [..] todo este sueño idílico acabara con el regreso de Frank y el encuentro de la caja por parte de Kirsty, que accidentalmente abrirá una puerta que jamás debería haber abierto...

¿Estás preparado para traspasar las puertas de los placeres del Cielo o del lnfierno?.

Existen miles de héroes no reconocidos que durante la SGM salvaron a cientos de miles de judíos de una muerte segura en campos de concentración. Personas como Oskar Schindler o los hermanos Bielsky arriesgaron sus vidas para intentar combatir contra un enemigo demasiado poderoso y cruel: los nazis.

Cuando el ejército alemán invadió Polonia, los hermanos Bielsky huyeron hacia los bosques de Bielorrusia. Allí, empezaron a formar con la ayuda de conocidos y familiares una unidad partisana liderada por Tuvia Bieslky (Daniel Craig). Una vez adentrados en los bosques, empezaron a salvar judíos de una muerte segura. Pese a que en principio solo querían salvarse a sí mismos, lograron crear una gran comunidad judía.

Daniel Craig (Casino Royale, Quantum of Solace) es el protagonista principal encarnando a Tuvia Bieslky, el mayor de los hermanos. Se caracteriza por ser un líder fuerte y capaz de reorganizar a todo el grupo. Liev Schreiber (X-Men Origenes: Lobezno) interpreta a Zus, otro de los hermanos que en principio no está de acuerdo con las decisiones que toma su hermano Tuvia. Jamie Bell (Billy Eliot) y George MacKay se meten en la piel de Asael y Aron Bielsky respectivamente. Por último, la actuación de Mia Wasikoswska (Alicia en el país de las maravillas) interpretando a Chaya Dziencielsky, una atractiva chica que será rescatada y que sentirá cierta atracción por Asael. Destacar que la actuación de Wasikoswska, pese a que su importancia en la película es mínima, me gusta bastante.

La BSO está a cargo de James Newton Howard, quien compone para la ocasión 15 temas elegantes, suaves y delicados. Los más destacados son: Your Wife, Exodus, The Wedding y Nothing is Impossible.

Para la filmación de los exteriores se pensó en Lituania, un país que poseía grandes similitudes con los bosques de Bielorrusia.

Pese a tener un principio algo flojo, a medida que transcurre el tiempo, que es cuando van llegando judíos poco a poco, veremos cómo la película va cobrando vida viendo por ejemplo el desarrollo de las relaciones que se van manteniendo en el bosque, la cultura hebrea y los diversos posicionamientos que habrán por ejemplo entre hermanos soviéticos y judíos. Pero aún así, son las escenas dramáticas y de valentía las que predominan y hacen de Resistencia, una buena película al lograr meter al espectador en la piel de los personajes.

James Cameron nos presenta la segunda parte de esta larga saga de acción y ciencia ficción en la que volveremos a encontrarnos como protagonista principal a Arnold Schwarzenegger esta vez, en su momento cumbre como actor.

La historia sucede once años después de “Terminator” donde nos encontramos que ahora el objetivo de Skynet* es eliminar al hijo de Shara Connor. Volvemos a ver como las maquinas, en este caso un modelo T-800 CSM-101 (Arnold Schwarzenegger) que es capturado por la resistencia es enviado al pasado, concretamente al año 1995. A su vez, Skynet envía un modelo más sofisticado y mejor, llamado T-1000 (Robert Patrick) que tendrá como objetivo asesinar tanto a Shara Connor como a su hijo John. El T-1000 jugará con relativa ventaja al ser un modelo más evolucionado ya que está formado por una base de metal líquido capaz de adoptar cualquier forma que analiza por contacto físico exceptuando armas químicas como bombas o dinamita. Mientras que el T-800 es organismo cibernético con tejido vivo sobre exoesqueleto de metal, casi exactamente igual que su modelo antecesor (Un Terminator modelo Cyber Dyne 101).

A medida que veamos el film veremos cómo transcurre la vida de John Connor como un adolescente algo rebelde al no tener el soporte de su madre ya que se encuentra en el hospital psiquiátrico. Entre tanto, las dos máquinas irán tras la búsqueda de John Connor. Para ello lo buscarán por las proximidades hasta lograr encontrarlo. Con la ayuda del T-800, les explicará detalladamente sus objetivos, los del T-1000 y lo que supone actualmente la existencia de Skynet.

En cuanto al reparto, destacar que las interpretaciones de Schwarzenegger y Patrick son magistrales ya que se enfundan en el papel de máquinas de una manera totalmente real. Es por ello que si Schwarzenegger es recordado alguna vez, sea principalmente por la saga Terminator. Robert Patrick encarna al villano de esta película de un excelente modo siendo un asesino silencioso y meticuloso en la búsqueda de sus principales objetivos (Shara Connor y John Connor) que no tendrá escrúpulos si ha de matar a alguien para obtener información o conseguir algo.

Notables efectos especiales con un gran despliegue técnico y película pionera en utilizar imágenes generadas por ordenador integradas a gran escala en un escenario real con actores reales. Mayoritariamente, para la realización del T-1000 cuando se transforma en cualquier cosa o cuando recibe varios disparos. Destacar también la gran capacidad física de Robert Patrick ya que requiere en varias escenas tener una buena forma atlética para realizar en varias ocasiones alguna que otra persecución corriendo de una manera bastante peculiar y extraordinaria a su vez.

(Sigue en el SPOILER sin desvelar detalles del argumento por falta de espacio)