Recibir cuerpos maltratados, sin identificación y darles sepultura se convirtió para tres hombres en el peor trabajo de sus vidas en plena dictadura militar. Una historia que nos trae el documental “El Patio”, de la directora Elvira Díaz, hija de un exiliado chileno en Francia.
Por estos días justo cuando han salido excarcelados algunos miembros de las FF.AA involucrados en delitos de lesa humanidad en la dictadura chilena, se estrena este documental acerca de una de las aristas del duro golpe militar donde se persiguió a muchos compatriotas que fueron torturados y desaparecidos. Muchos de estos cadáveres fueron tirados al mar, ríos, quebradas o enterrados en desierto. El panorama que aborda este documental chileno es el ingreso anónimo de muchos cadáveres que fueron sepultados sin identidad en el denominado patio 29 del cementerio general.
El relato de este documental se centra en tres longevos sepultureros y un joven desenterrador de tumbas, donde los experimentados camaradas frente a la cámara, con sus ojos vidriosos y piel gastada que denotan el pasar de los años, van dando a conocer en forma honesta y genuina contando los duros recuerdos, intercalados con anécdotas que remarcan el exterminio sistematizado de chilenos que era una amenaza para el régimen donde fueron salvajemente torturados y asesinados para depositar sus restos en dicho espacio.
No cabe duda que existe un extenso material fílmico de historias post 1973, pero también aparecen con frecuencia nuevas aristas o miradas con respecto a este tema de la historia reciente, para ir armando este terrible puzle de persecución y asesinato que no debe olvidarse, es aquí donde radica la importancia de este trabajo cinematográfico, que le debe su génesis a un rodaje previo de otro documental de Víctor Jara donde la realizadora conoció el patio 29 que está justo al frente de la humilde tumba del malogrado cantante .
El trabajo de Elvira Díaz, tiene su fortaleza en decirnos que la historia sigue en movimiento, que nunca estarán demás los testimonios y que los pueblos deben recordar cada cierto tiempo por respeto a los caídos y porque son temas que no pueden volver ocurrir. Los protagonistas se emocionan con el repaso de esta etapa de sus vidas y los persigue el sentimiento de haber tenido que callar por miedo a las amenazas, no pudiendo entregarles un consuelo a las familias que sufrían y que querían encontrar a sus seres queridos. Ese silencio y las imágenes de esos cuerpos mutilados marco a fuego sus vidas.
Este trabajo se exhibirá en cine extensión de la UCM en el ciclo Miradoc este jueves 16 de agosto a las 20.00 horas y contará con la presencia de la directora del documental Elvira Díaz en un conversatorio con los asistentes al cual están invitados cordialmente.

Mucho se ha hablado y escrito de Colonia Dignidad situada en la comuna de Parral y que hoy esta convertida en un sitió turístico muy visitado. La historia nos dice que fue centro de tortura, se abuso de niños y familias que dependían de una secta liderada por Paul Schäfer que fundó en 1961 como Sociedad Benefactora libre de impuestos aca en Chile y que su líder traía consigo un sinnúmero abusos de menores desde su Alemania natal. La Colonia está protagonizada por Emma Watson, la heroína de Harry Potter y Daniel Brühl, recordado por la excelente cinta alemana “Good Bye Lenin”, encabezan la película basada en hechos reales ocurridos en Chile después del golpe de estado de 1973.

Precisamente es allí donde se sitúa esta pareja de enamorados, ella una azafata extranjera y el un activista defensor del gobierno de Allende que al momento del estallido se encuentran en plena calle y el comete el error de fotografiar maltratos de militares en plena calle cayendo preso y llevado a destinos desconocido donde es torturado, su amada a sabiendas que ha sido llevado a un lugar de la región del Maule, y al no tener respuestas, parte a enlistarse a esa colonia alemana donde encontrará con una política de terror dirigida por Schäfer, donde los hombres y las mujeres viven separados unos de otros, en celibato, trabajan el campo de sol a sol y sufren de abuso físico, emocional y psicológico sujeto a la menor infracción. Y en funcionamiento toda la estructura de Paul Schäfer , encarnado por el recordado por la trilogía Milleniun Michael Nyqvist, que gobierna con una implacable mano que en concordancia con los intereses del gobierno de turno que no son explorados mayormente por el film.

La película, dirigida por Florian Gallenberger, usa hechos ocurrido en la colonia solo para montar una película de suspenso parecida a esas de Hollywood y funciona como entretenimiento pero erra a veces en su afán de ser fiel a la historia y profundizarla en temáticas de su relación de la colonia con la dictadura o servicios secretos alemanes podrían haberla robustecido. Muy cercana a un ambiente de campo de concentración Nazi por momentos no se muestra cercana a la historia que vivieron los colonos que es su gran pecado como film y algunas locaciones como el estadio nacional están lejos de ganar credibilidad local. La trama como suspenso funciona y sigue hasta el final soportado en los buenos actores que están presentes en el film pero no pasa a ser más que otro film entretenido teniendo a su haber una intrigante historia que pudo ser mejor desarrollada. Creo que la principal falencia de la trama es el giro hacia lo inverosímil cuando, disfrazándose de una mujer dedicada al Señor, Lena(Watson) parte hacia Colonia Dignidad, y se une sin ningún problema a eta organización de un día para otro.El gran actor Nyqvist como Schäfer, que murió en 2010, es destacado dentro del filme y Emma Watson, que fue vista en algún restaurante maulino cuando rodaba escenas para este film, sigue escalando paso a paso a consolidar una carrera prometedora. Al ver el rodaje es imposible no acordarse de aquella cinta llamada Missing dirigida por Costa-Gavras y protagonizada por Jack Lemmon, con la desaparición de un periodista norteamericano en plena dictadura donde la nula existencia de su paradero era la interrogante permanente, a diferencia de La Colonia que centra su mirada en el amor de una pareja con el trasfondo del horror que vivían colonos. Entretenida y bien actuada por su elenco europeo.

“Lady Macbeth” sitúa a una jóven esposa en el siglo XIX en un entorno opresivo y machista, que emprende un viaje revelador desde la inocencia a la perversión para revelarse ante su abusivo esposo.

Cuando vi por primera vez el afiche de la película Lady Macbeth se apreciaba un angelical rostro de una joven mujer con un vestido de época que a priori te llevaban a pensar que perfectamente se podría tratar de un film emparentado con los mejores culebrones de Jane Austen como “Orgullo y prejuicio” o “Sensatez y Sentimientos”. Al correr los minutos, vemos que está muy lejano a esa premisa inicial, este un cuento sombrío, macabro y es una demostración de un tema histórico que es la lucha de una mujer entre hombres misóginos que prácticamente esta sin ninguna libertad y donde es subyugada a ser un mero objeto encerrada en una casa con su sirvienta.
El personaje principal es Katherine (Florence Pugh), una adolescente victoriana que se casó con un hombre adinerado y mayor (Paul Hilton) una vez consumado el matrimonio se instala en una remota y fría casona donde prácticamente fue parte de los tratos de intercambio de tierras y deberá permanecer sola al interior de la casa hasta que quede embarazada. Su esposo parte en un largo viaje y esta inquieta mujer de a poco comienza con sus paseos por los hermosos parajes hasta que conoce a unos de sus sirvientes que provoca un punto de inflexión a su aburrida vida desatando de paso también el despertar más oscuro de una mujer que quiere empoderarse y tomar las riendas de su vida y no de la mejor manera. Su vitalidad sexual la lleva a sobreponerse al rechazo de su esposo que vive en el mundo de la rigidez tal como su suegro, el deseo de no vivir bajo las reglas impuestas, rechazo al instituto maternal constituyen una evolución psicológica del personaje que te lleva a sumergirse a esa complejidad femenina.
El film se basa en una novela de Nikolai Leskov que trasplantó elementos de la obra a 1865 donde el machismo de esa época trataba a la mujer como un objeto que estaba dentro de la casa, sin actividad , manteniéndose guapa y un muy mal trato en líneas generales, con este argumento inicial que va evolucionando con un gran guión y trabajo de ambientes opresivos, a pesar de la belleza de la filmación. El film prácticamente carece de banda sonora donde predomina el sonido al natural de las acciones de los personajes que con la experiencia teatral de su director debutante en el cine William Oldroyd
El argumento que evoluciona constantemente, así como la posición de sus protagonista en relación a los hombres la hace muy llevadera e incierta, no hace falta muchos diálogos, las miradas sugieren, el rechazo es brutal no necesita decirse, se palpa en el movimiento de los actores que están formidables en esta lección de cine minimalista.
La dirección de arte y el sonido constituyen un soporte importante al desarrollo de la historia, acá lo masculino y lo femenino entran mas en conflicto que nunca, Lady Macbeth, que ha llegado tarde a cines chilenos, pero sin duda es un acierto traerla y verla en cualquiera de las plataformas y poner en discusión la evolución de la mujer en los últimos dos siglos. Por último, hay que destacar el descubrimiento de este diamante en bruto llamado Florence Pugh, nacida en Oxford, Inglaterra y con solo 22 años, obtuvo un premio en el festival de cine de Dublin por este destacado rol, es una actriz para seguir teniendo presente.

Con “Desobediencia”, Sebastian Lelio, después de Ganar el Oscar con “La Mujer Fantástica”, desarrolla su primera experiencia rodando en inglés con un controversial film que narra la historia de amor secreto entre dos mujeres dentro de los muros del estricto mudo judío
Antecedido del enorme éxito después de obtener el Oscar por “La Mujer Fantástica”, el director chileno Sebastián Lelio, dirige su primer film en inglés con “Desobediencia” y lo hace con un excelente trío de protagonistas encabezado por Rachel Weiz(El Jardinero Fiel) que también las oficia como productora del film, Rachel McAdams(Diario de una Pasión) y Alessandro Nivola, que bajo las ordenes del chileno nos entregan una cinta con tintes dramáticos sobre un particular triángulo amoroso ambientado dentro de los estrictos muros del mundo judío en USA.
La muerte abre una ventana que estaba cerrada para Ronit(Weiz), que debe volver a su ciudad natal para el funeral de su padre, un Rabino. En dicho periplo se encontrará don dos ex compañeros de infancia que ahora son esposos. La señora del nuevo líder religioso y amigo de infancia fue su amante en la juventud y la comunidad se siente amenazada con el regreso de Ronit la cual no se siente bien recibida por una comunidad religiosa ortodoxa que prohíbe cualquier contacto físico fuera del matrimonio entre un hombre y una mujer, y las relaciones del mismo sexo son cultivo para el escándalo mayor.
Lelio toma de la novela de 2006 de Naomi Alderman un material para armar un triángulo amoroso muy particular y lo hace desarrollando un puzzle donde destaca la lealtad, el amor y el deber en una comunidad judía muy estricta, que se rehúsa a que trastoquen sus tranquilidad y tradiciones. Acá los misterios del amor van moviéndose entre las líneas donde la aceptación y la discriminación del amor homosexual que está lejos de resolverse aun. Aquí es donde prevalece el oficio y sensibilidad de Lelio en poner siempre a uno de los personajes en el encuadre lo que es notable, funcionan solos y por separado en pantalla pero la invitación es sumergirse en sus mundos interiores y lo logra con creces al verlos siempre en pantalla y con muchos primeros planos.
El film esta muy lejano de entretenimiento de palomitas o de secuelas eternas, es un film honesto, maduro que deja masticando temas contingentes no resueltos en la cultura occidental acerca de la tolerancia, los prejucios y la aceptación. Todas temáticas ya características de la filmografía de Lelio donde las mujeres tienen un protagonismo más que evidente en cada unos de los cuadros que desarrolla y que es este en particular conmueve sin exagerar, con sutileza que requería la obra y por sobre todo respetando el soporte de la religión judía sin caricaturizarla. Hay una escena que podría para algunos resultar incómoda o para otros simplemente encantadora y es un momento donde Ronit enciende una radio en la casa de su padre y comienza a escuchar se "Lovesong" de The Cure. Ella sutilmente se balancea y comienza a cantar la excelente canción junto con Esti(McAdams), es un momento donde ambas se ven arrastradas a un viaje en el tiempo donde sus sentimientos confusos que tienen la una del otra pero que parecen por un momento quedar de lado y eso lo logra la magia de la música que es como el tráiler de tu vida que te transporta.
Para cerrar debo decir que para mi el film entrega potentes reflexiones acerca de la fé de masas, las libertades individuales y se hincha el pecho de orgullo al ver los créditos finales con el nombre de un director chileno que sigue en ascenso.

“Il Siciliano”, es un documental chileno cargado de excentricidades en el cual entran y salen personajes, dobles de artistas en este particular mundo creado por el patriarca de la empresa de pelucas Avatte, que prestó servicios desde señoras de presidentes, militares, artistas y delincuentes.

Ver en pantalla al doble de Camilo Sexto, Tom Jones. J Lo, The Beatles, Julio Iglesias, Sandroy vedettes, en una misma fiesta, resulta algo más que extravagante y onírico. Es la realidad que se deja ver en pantalla en el documental chileno “Il Siciliano”, que registra por tres años la extravagante vida de Juan Carlos Avatte, heredero de una fábrica de pelucas que según el mismo dice prestó servicios desde señoras de presidentes, militares, artistas, extremistas y delincuentes.
El documental tiene tres directores, Carolina Adiazola, José Luis Sepúlveda y Claudio Pizarro, ellos logran capturar los espacios más íntimos del empresario que encabezó pelucas Avatte por varias décadas con el desarrollo de su particular vida que se mostraba como una fiesta interminable, registrando acertadamente esos espacios festivos y con personajes muy transversales entre los que se encuentras vedettes, cantantes y farándula menor que circulaban como verdaderos bufones en la corte del rey al cual le gustaba que lo denominaran como El Padrino.
El robo de 250 pelucas cotizadas en más de 70 millones de pesos, hecho que fue muy mediatizado, y la búsqueda de una nueva musa, parecen ser las principales preocupaciones para el setentón empresario que vive armado hasta los dientes, incluso disparando frente a la cámara. El trabajo fílmico de este trío de directores se adentra en la decadencia de un personaje que quería validarse como macho y que esta frente a un clan que pulula por este particular mundo del camuflaje que otorgan las pelucas, bigotes y extensiones que vemos por todos los cajones dispersas.
En el documental vemos a un Juan Carlos Avatte gozando que lo siga una cámara, jactándose de la película que filman para él, tratando de cumplir su anhelo es que lo filmen desnudo con una mujer. El protagonista se expone y goza frente a la cámara como sabiendo que se acerca el final de este largo periplo del rey de la pelucas. “Il siciliano” puede chocar a algunas personas que no podrían soportar lo que quiere mostrar este padrino inclinado hacia la sordidez pero los que lo conocieron seguramente se emocionarán al verlo tal cual era, un buen amigo, muy trabajador y vividor.