'Abre los Ojos' es para mí, una de las mejores películas de la historia. Sé que puede ser exagerado y sé que no soy objetivo, pero la importancia que tuvo para mí esta película fue capital en mi relación con el cine. La vi muy joven y aunque siempre había visto muchas películas cuando 'Abre los ojos' llegó a mí fortuitamente en aquel pase de 'Versión Española' me dije: «¿de verdad se pueden contar historias como estas?». Cuando la vi dejé un poco eso de «ver lo que echan» y empecé a buscar cine, a perseguir experiencias. Sentí que había visto algo único y desde entonces busqué repetir esa sensación especial que sientes cuando esa película te habla y te descubre algo nuevo e inesperado. Es algo que consiguen sólo unas pocas obras y a veces sólo para algunas personas. Otro ejemplo que se me viene ahora a la cabeza es el relato corto de Asimov 'La Última Pregunta'. Sabes que tardarás mucho tiempo en encontrar experiencias así y sabes que no se van a poder repetir simplemente volviendo a verla y una parte de ti querría borrarlas de la memoria unos minutos antes de volver a verla para repetir esa primera vez.

Eso no implica que no le vea problemas, de hecho en general las interpretaciones de Eduardo Noriega y Penélope Cruz no suelen estar entre mis preferidas en otras películas (algo en ellos me suele resultar siempre falso). Pero precisamente en esta película la historia y su desarrollo me hacen olvidarme de ello con los dos, aún siendo protagonistas. El conjunto encaja tan bien que consigue anular todos los detalles negativos.

No soy objetivo e incluso si pudiera serlo en este caso prefiero no hacerlo. La sensación y en el montón de emociones que despierta esta obra en mí no se pueden explicar con la típica crítica que haría a otros títulos. Sólo pensar que esta película puede desarrollar una pasión por el cine en alguien tiene que significar algo. Como mínimo que igual merece la pena probar y darle una oportunidad si aún no la has visto.

Empieza bien, parece una buena idea, interesante, curioso. Pero finalmente no deja de ser una aburrida película sin ninguna emoción, predecible, poco creíble, que pretende ganarse a la gente seguramente por una moral subyacente (piensa por ti mismo, que no te controlen, no hagas de la vida/muerte de los demás un negocio...) pero tan mal hecha que no se merece una buena puntuación ni por haber tenido la idea. Ni para pasar la tarde vale...