Si hablamos del grupo cómico más sobrevalorado de la historia, estamos hablando de los Monty Python. Simples, ridículos, sarta de gags sin sentido, tonterías al cuadrado, todas encima de la mesa y a tragar como si huevos duros fuesen, humor para todos los públicos y para todas las generaciones, por tanto, sin resultar ofensivo, humor vulgar.
Al nivel de las de Scary Movie, Epic Movie, Date Movie, todas las de Agárralo como puedas o incluso las de los Monty son peores. Todo es un globo creado alrededor de los Python para que los que van de intelectuales, los gafapastas, se mezclen con el vulgo y rían al unísono las sandeces del personal. Hay gente que les gusta, como también les gusta Camera Café, Matrimonio con hijos (versión española), pero los intelectualoides nunca reconocerán que estas series le hacen gracia, a ver si van a perder su status de elite intelectual.

Sí, señores, puede que hayan influenciado a mucha gente, dándoles la idea de cómo explotar cierto humor, pero en España tenemos ejemplos mucho mejores, con más gracia y sobre todo sin ser ingleses (la sociedad más aburrida del planeta, sin lugar a dudas), desde Martes y trece hasta Los Morancos, pasando por los cachondos de Cruz y Raya.

Ya he terminado, podéis darle al “No”, después de que pulséis dicha techa, unas risas enlatadas sonarán, tomadlas como mi humilde opinión sobre vuestra valoración.