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España España · el boalo
Voto de Miki:
5
Drama Polonia, 1960. Anna (Agata Trzebuchowska), una novicia huérfana que está a punto de hacerse monja, descubre que tiene un pariente vivo: una hermana de su madre que no quiso hacerse cargo de ella de niña. La madre superiora obliga a Anna a visitarla antes de tomar los hábitos. La tía, una juez desencantada y alcohólica, cuenta a su sobrina que su verdadero nombre es Ida Lebenstein, que es judía y que el trágico destino de su familia se ... [+]
9 de abril de 2015
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No sé los motivos por los que un día cualquiera de una semana más de poca actividad laboral y encontrándome en la zona de Plaza de España me animé a entrar en el cine a ver una de esas películas "denominadas" el nuevo cine europeo. Con poca información pero buenas críticas me lancé a los bajos de Princesa a la búsqueda de esta joven "descarriada". El argumento siendo simple deja muchísimas dudas y aspectos que no acabo de comprender. ¿Quién es la tía de Ida?. En un primer momento todo parece indicar que se trata de una prostituta, idea descabellada si en la secuencia siguiente la vemos en un juicio. Más tarde le llega a decir a su sobrina que fue fiscal del estado pero le dice a la policía que tiene inmunidad, es más, estos le piden perdón por haberla retenido una noche en el calabozo. ¿Porqué una familia que guarda, protege y cuida a otra en la guerra mundial acabada esta se la carga?. ¿Porqué no quitárselos de en medio antes y sin remordimientos de conciencia?. ¿Que quería Ida antes de casarse con el señor? ¿una despedida de soltera sin amigas? ¿qué explicación hay al suicidio de la tía cuando su vida empieza a tener un sentido con la llegada de su sobrina? Dudas argumentales que en una película tan lenta y con poco que contar no deja de ser preocupante para un guionista. Tampoco es que la historia sea especialmente interesante, lo normal tras una guerra mundial en un país centro europeo donde cada sobreviviente tiene una película para llevar a la gran pantalla. Pero sorprende que contada con esa, a veces , insoportable cadencia uno no acabe de entender algunas cosas. La película la salva la fotografía, fantástica, la banda sonora, la ambientación de la gris Polonia de los años 60 y porque no, los actores. Pero siempre tengo la sensación que algo va a suceder, que en cualquier momento arranca la historia verdadera, que esos coches que se cruzan con Ida encenderán las luces de freno y ahí empezará la verdadera historia de una chica que no pertenece a ese mundo de dios, pero no, sólo nos quedamos esperando sin que nada pase.
Miki
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