The Fisher King o llamado por mis lugares como Pescador de ilusiones es una de las cintas de comienzo de los noventas que paso en mis lugares sin pena y gloria. Ahora 26 años después me la eh vuelto a encontrar y ha resultado para mi una ventana al pasado bastante interesante. Pues era el cine de transición entre los 80s y 90s la moda música y actitud de los personajes mas esos colores chillantes se reflejan notoriamente, el trabajo fotográfica adorna la cinta. Esta película no a envejecido mal.

Me ha parecido muy bueno el argumento inicial. Un locutor de radio de Nueva York con una actitud bastante intrépida, entra en una desgracia emocional por sentirse directo responsable de alentar a un radio escucha a tomar las riendas de su vida, ocasionando que este haga un atentado que cuesta vidas humanas. Años después sin empleo y con ganas de suicidarse conoce a un loco vagabundo que resulta ser expareja de unas de las victimas de dicho atentado. La búsqueda de un santo grial imaginario y acomodar la vida sentimental del hombre ara que Jack Lucas (Jeff Bridges) recupere su carrera y vea la vida de mejor manera.

Partiendo de eso la trama va acomodando los nexos en un calmado y ordenado orden, mas las improvisaciones de Robin Williams y su comedia van sosteniendo la cinta. El problema tal ves sea el protagonismo de Jeff Bridges que nunca se lea distinguido por ser un actor de tipo De Niro, pero caramba es muy seco en casi todas la escenas me rompe la fantasía por momentos. Además por la conclusión de recuperar el grial para que se recuperara su amigo, que había entrado en un terrible shock emocional y una extrema fijación en ayudarlo en conquistar a una mujer extraña con un tono no tan profundo, hacen que la película pierda seriedad y baja mucho su perfil.

Pero bueno el castin funciona bien para tener un pequeño reparto. Además de otorgar escenas brillantes que suceden en momentos claves, como por ejemplo la escena del baile en la estación del metro, el desnudo nocturno de Robin en el parque, la presencia de su demonio rojo que refleja el fatal trauma. etc. Es bastante interesante el nudo y la temática de catarsis que enseña la película y el rondar en el final, que nunca debemos abandonarnos ni perder la felicidad.

The Fisher King un pequeño regalo de los años noventas, es un paseo como ver un álbum de fotos, Recomendada para recordar un rato los principios noventeros y notar una de las actuaciones mas especiales que logro en su vida el buen Robin Willams.