Locamente millonarios

Jon M. Chu no nos trae una historia completamente original ya que varias situaciones, elementos y hasta algún que otro personaje, ya los hemos visto en bastantes películas y series y también resultan ser un poco predecibles. Pero eso no la hace una mala película, está muy bien contada y es muy entretenida de principio a fin.

El drama presente en el largometraje está bien manejado y bien planteado al momento en el que tiene que suceder, además de eso tenemos tanto diálogos como situaciones que van a ir agravando esa situación llegando a un momento bastante dramático bien logrado. Lo mismo sucede con la comedia, en el 95% de los casos funciona muy bien y hacen muy divertida a la película.

Con los personajes tampoco hay grandes problemas, la gran mayoría son bastante divertidos y resultan ser bastante simpáticos durante toda la trama. Más allá de eso, luego tenemos los típicos personajes ya sean protagonistas o secundarios que cumplen con esos parámetros en este tipo de cintas: el rico guapo enamorado de la chica clase media baja, la mejor amiga de la chica de clase media baja que es super divertida y se roba gran parte de la película y así con casi todos.

Y ni hablar de todos los escenarios con sus planos generales dándonos postales impresionantes, toda la ambientación y el vestuario en diversos momentos es fantástico. La banda sonora también es muy bonita, muy hermosa de escuchar y acompaña de perfecta manera a los momentos emotivos que presenta el largometraje.

En resumen, "Locamente Millonarios" es diversión asegurada, con mucha emotividad y una hermosa película en rasgos de aspectos técnicos pero que no llega a ser completamente original.

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No soy una persona amante de las comedias románticas así que no tenía pensado ver esta película. Sin embargo al marcarla la plataforma Prime como una de las que retiraban este mes, decidí echarle un ojo por curiosidad y por Michelle Yeoh y, al ver que se desarrollaba en Singapur, me pareció una buena forma de disipar mi nostalgia viajera (nunca te lo perdonaré, coronavirus, nunca).

Pues resultó una grata sorpresa. No es que sea nada del otro mundo en cuanto a guión, argumento o actuaciones, pero la cuidadísima estética lo compensa de sobra. No deja de ser la enésima versión del cuento de una moderna Cenicienta, pero no por ello desmerece. No sé cuánto se puede ajustar a la realidad de las adineradas familias asiáticas, pero por lo menos es divertido imaginar que se comportan así. La película es ligera y sin pretensiones, entretenida, sin abusar del histrionismo o de una fingida acción. Creo que es exactamente lo que uno espera ver en un film de estas características.

Comedia romántica gringa con actores y locaciones asiáticas. Un contraste cultural y una vuelta novedosa a las clásicas historias en New York, está vez mostrando toda la opulencia y hermosos escenarios de Singapur. Bien actuada, simpática, divertida y con un final poco usual pero muy satisfactorio. El personaje secundario interpretado por Awkwafina es verdaderamente jocoso. Están presentes los estereotipos, los intentos de separación de la pareja protagónica y demás pero pasa la prueba como entretenimiento sin pretensiones mostrando otro lado de las tradiciones familiares asiáticas. Bastante efectiva.

Festejando a las nuevas sociedades consumistas del Asia, el filme también hace un retrato ameno de las diferencias de clases en dichas sociedades.
El encuentro del tradicionalismo asiático con la modernidad son expuesto de una manera altamente gracioso. Con tintes de telenovela, el filme se desempeña bien y da un buen momento al espectador.