CSI: Miami (Serie de TV)

Horatio no se agacha a coger una prueba, no investiga nada, no toca un ordenador, no estudia un bicho, no saca una huella, no extrae ADN, se limita a mirarte de lado y a soltarte una frase lapidaria que te convierte no sólo en sospechoso, te convierte en culpable.

CSI Miami se convirtió hace tiempo en una caricatura de sí mismo sus personajes gastan bromas sobre cadáveres (lo del personaje de la forense hablando con los cadáveres es de coña), toda la serie se queda en sucesión de imágenes con hermosos colores y frases lapidarias de esas que nadie dice a no ser que se las lleve escritas de casa y la tiene que soltar ese día para demostrar sus "conocimientos".

No sé que personaje me parece más absurdo, la forense, la rubíta, Horatio ... esta serie es ya prescindible.

En el 2003 se estrenó en España CSI Las Vegas, la serie original sobre investigación científica para resolver crímenes. Ante el rotundo éxito que supuso, se estrenaron posteriormente sus hermanas menores (Miami y Nueva York). Ésta es sin lugar a dudas la peor de la franquicia; la razón es muy simple: pierde la esencia de la original, dejando a un lado la investigación de los crímenes para mostrarnos el lucimiento continuo de un personaje tan chulesco y en las últimas temporadas repulsivo y repetitivo: el Teniente Horatio Caine.

La serie debería llamarse "Teniente H" o algo similar. Las cualidades de este personaje pasan a ser en algunos momentos, mejor dicho en casi todos los capítulos, dones sobrehumanos. A saber:

1) Posee el don de la omnipresencia: que hay un crimen en cualquier lugar de Miami; en 10 minutos Horatio está allí. Da igual que sea un asesinato, un robo a un furgón o una simple disputa de pareja que Horatio está allí. Está en todos sitios (recuerdo un capítulo de la quinta temporada en el que un matrimonio entabla una discusión por la propiedad de un barco y a los 5 minutos aparece H en escena).
Nunca llega tarde, nunca se retrasa (en la vida de Horatio no existen los atascos, no hay imprevistos o impedimentos que le hagan retrasarse).
Observar como siempre es el primero del laboratorio en llegar a la escena.

2) LLeva el riesgo en la sangre: ¿para qué cuerpos especiales, Swats y demás equipos de élite si en las redadas y en primera línea de fuego va Horatio pistola en mano y apuntando a saber donde?.

3) Una productividad innata: resolver el crimen sin coger una sola muestra, procesar una huella o un escenario o analizar una bala.

4) El don de la predicción: Uno es culpable a no ser que Horatio diga lo contrario. Dan igual las pruebas; si al principio del capítulo Horatio cree que eres culpable, el resto del capítulo sobra, eres culpable.

5) Habla contigo sin tu saberlo: mira a cualquier parte menos a la persona con la que habla.

6) Una visión extraordinaria: de día, de tarde o de noche, con un sol asfixiante, niebla espesa o lluvia intensa........................nunca le sobran las gafas de sol.

7) Poder de convención absoluto: Si Horatio dice "Frank, por la posición del cuerpo debe haber muerto hace 10 años"; Frank responde: "H, llevas razón".

¿Cómo con tales habilidades se conforma con dirigir un laboratorio?
H debería presentarse a presidente de EEUU, seguro disminuiría el índice de criminalidad del país

Con un superpolicía de esta categoría, y unos secundarios de impacto (casi todos los personajes y extras de la serie parecen sacados del concurso de Supermodelos), Miami es un verdadero paraiso para vivir.

Horatio es un tipo rudo (Rude Boy) que trabaja en la policía científica de Miami (Miami Police). Cada mañana cuando se levanta para ir a trabajar, entra en su oficina y se encuentra con sus super ayudantes (Super Ayudants), que son listos, rectos, justos y sobre todo guapos (Beautiful) y que además han hecho los deberes para que cada episodio sea perfecto, él esboza una sonrisa y sabe (He Knowns) que detendrá a un criminal, sea cual sea su fechoría (Fechoreission).

Ha nacido con el don de la precognosciencia. Ya sabe si el vendedor de perritos (Dog Saler) de la esquina es un pederasta, o por el contrario si el taxista que aguarda leyendo el periódico (Mr. Cab Driver) es un sucio tratante de blancas. Da igual, para Horatio ya es algo personal... y esos tipos darán con sus huesos en la cárcel (County Jail o Trullo).

Luego retorcerá el cuello como un búho (moucho) se pondrá sus gafas de sol que resisten los rayos láser de Darth Vader (Star Wars Villian) y mirará de soslayo un sol Vulcaniano y la realidad y espacio tiempo serán pasto de extraños efectos foto cromáticos y montajes verbeneros (Fiesta´s party´s) que harán que la acción del episodio llegue más rápida a su clímax (Cooper Climax) y el delincuente del capitulo caiga detenido o muerto.

Entre medias Horatio (Horeixio) habrá soltado unas seiscientas sentencias de culpabilidad absoluta y serán todas ciertas, faltaría más, nunca se equivoca y el amenazado sabrá (Him Knowns) qué está acabado y que sus pantalones están manchados con la caca de su culpabilidad y porque el rostro pétreo y conciso de Horatio hace que te cagues encima, los criminales tienen que pagar.

Os preguntareis el por que de los paréntesis y esas demostraciones de supremo conocimiento supremo, las redundancias tienen que servir para algo. Quiero que Horatio me descubra en un supuesto crimen perfecto, ya se que estoy sentenciado como terrible analfabeto y por suponer que Horeisssshio va a fallar en su dictamen criminal, si es que me merezco ser culpable (guilty pleasure), ea!!

Teniendo en cuenta de que los criminales cada vez lo tienen más difícil con las virguerías informáticas que utilizan las mentes criminólogas de Miami, yo me lo pensaría un par de veces antes de portarme mal si sé que el supercarismático Horatio Caine me perseguirá sin cesar, me soltará una de sus geniales frases intimidatorias y después me meterá en el talego.

- ¿Qué tenemos, Alex?
- La batalla puede ser ficticia, pero el crimen es real.
- Dime algo que no sepa.
- Ponte el traje, que vas a bucear.
- Cometiste dos errores: el primero, asesinar a esa niña; el segundo, no tener en cuenta de que nosotros nos ocuparíamos del caso.
- Algunos accidentes no son accidentes del todo.
- Si vuelves a tocarla, Johnny, el que darás fin a tus días bajo el sol serás tú.
- Y nosotros, Señor Wolf, no te abandonaremos.
- No pasará un día de tu vida, Largo, en que no sientas mi aliento en tu espalda.
- Un cadáver no te puede acusar.
- Nunca se gasta uno 10000 dólares en ropa que no te pondrás nunca.
- Esto es lo que pasa cuando los mundos colisionan.
- No sé si el asesino quiso llamar nuestra atención, pero ha llamado la mía.

Sin duda por las superfrases de H la serie supera el aprobado: hace falta gente con agallas como él en España para gobernar nuestro amado país. Mención aparte merecen los arreglos de fotografía. No sé si los productores de la serie se han olvidado de que se rueda en la Tierra y no en Marte...

Para terminar, creo que la mejor sinopsis que se puede hacer de esta serie de televisión es la siguiente, que he encontrado en el blog "Mirando la tele":

"Al principio de cada episodio, Horatio se enfrenta al delincuente, le mira fijamente y le explica que le va a atrapar. Al final del episodio, Horatio se enfrenta al delincuente, le mira fijamente y le explica que ya le ha atrapado."

Genial resumen.

La serie en si es interesante, pero hay algo que me mosquea.
Si en CSI Las Vegas podemos ver unas vistas realmente espectaculares a través de las ventanas, los creadores siguen sorprendiéndonos con un sol que entra por las ventanas como si fuese la paloma anunciando a la Virgen que está embarazada.
Además el cielo está siempre anaranjado