Ray Donovan (Serie de TV)

Hacía tiempo que no encontraba una serie inteligente, con tantas capas y lecturas, sutil hasta en su brutalidad y con un reparto tan bien elegido... tienes aromas a clásicos del cine de la mafia, recuerda en algunos momentos a los soprano, tiene ritmo y lo mejor de todo es creible... Resulta difícil ver series norteamericanas que no sean una sucesión de excesos, clichés y frases hechas. Ray Donovan, es una buena película por entregas.

Excelente serie con un protagonista que se come la pantalla cada vez que sale, arropado por unos excelentes secundarios, éntre los que destacaría al gran Jon Voigth.Un tipo que aparentemente lo tiene todo para ser feliz, una bonita casa, un buen trabajo, una hermosa mujer, pero siempre le surgen problema principalmente debido a su familia, dos hermanos, uno enfermo de parkinson y otro traumatizado por los abusos de un cura cuando era niño,y no digamos su padre un tipo recién salido dela cárcel, bocazas, liante y manipulador.Esta muy bien reflejado el ambiente delos Angeles, tanto el de los ricos y famosos como el de la delincuencia mas cutre, las maniobras y requiebros del protagonista para sacar de mil lios a sus clientes y en los que a veces, voluntaria o involuntariamente se mete el mismo, un hombre que intenta ser integro con su familia en un mundo corrupto y sórdido come el que se mueve el, también su pasado de chico de barrio pobre en el sur de Boston a veces le pasa factura, después de tres temporadas la serie y los personajes siguen creciendo, que siga asi.

Lleva dos temporadas y por el momento va a más pero de una manera notable. Si en la primera ya era decente, la segunda tiene algunas de las mejores escenas que he visto nunca en una serie que ya es decir. En unos años si la consiguen llevar a este ritmo; será recordada y puesta en su sitio como merece. Es una serie que tarda en arrancar pero una vez dentro ya no te despegarás de ella.

Una de las pocas series que ha sabido mantenerse fiel a si misma durante estos años, sin cometer excesos y sin traicionar su espíritu original. no verás fallos importantes de guión, ni incoherencias en el comportamiento de los personajes.
Ray Donovan, el hombre impasible al que no verás sonreír, es el típico antihéroe que ha dado la tv americana recientemente. Una especie de Tony Soprano, Whalter White o Nucky Thomson.
Ray es un asesino, adúltero, chantajista, encubridor y todo lo malo que se te ocurra. A eso añade que tiene una familia disfuncional que le mete en mil líos: una mujer que responde a sus infidelidades con la misma moneda, una hija que siempre se enamora de quien no debe, un hermano con la mente de un niño, y otro, ex boxeador con Parkinson. Y por supuesto está su padre (espectacular Jon Voight) al que Ray odia porque se ve en él como en un espejo.
Mickey Donovan merecería una precuela para él solo con sus años de juventud. No deja de meterse en problemas, arrastrando a sus hijos en sus delitos. Pero claro, siempre aparece Ray para que las aguas vuelvan a su cauce.
No destaca por su originalidad, pero es una serie con una producción cuidada y un buen reparto. Hasta los secundarios que aparecen cada temporada, son actores de cierto reconocimiento que mantienen el nivel.

100% recomendable. Te lo pasarás pipa viendo a Ray Donovan apagando fuegos, tantos, que a veces parece que va a terminar consumido por ellos

Engancha desde el minuto uno. La chulería del protagonista, las localizaciones hollywoodenses y las diferentes historias que cuentan en cada capítulo hacen que te metas muy rápido en la serie y no puedas dejar de verla. La figura del protagonista es muy interesante, sacar de apuros a famosos y gente adinerada de las maneras más curiosas. Además entra en escena su padre (John Voight) que le da a la serie otro toque muy importante y nos mostrara las debilidades del duro protagonista.