Billy Elliot

Es un peliculón que parte de una historia sencilla. Superación personal? Comedia? En absoluto. En todo caso, la única superación que aparece en el film -la huelga minera- termina en fracaso, y de comedia tiene lo mismo que El guateque, es decir, nada de nada. Nos muestra una de las zonas más deprimidas del Reino Unido que me hace recordar el esquetch de los Monty Pyton en El sentido de la vida, con todas aquellas casas adosadas, un montón de parados por las calles y una legión de niños equivalentes a bocas que alimentar.

Jamie Bell realiza una de las mejores interpretaciones que he podido disfrutar para un chico de esa edad. Lo cierto es que si yo tuviera que elegir entre boxeo y danza, también hubiese elegido la danza. El final no sobra, es precioso. Tiene un ritmo alegre que consigue que el espectador no se deprima demasiado con la situación de fondo, lo que siempre es de agradecer. El baile principal de Elliot lo mejor del film. Muy buena.

Emotivo y duro drama (porque de comedia tiene más bien poco, no sé si compartirán mi opinión) que nos habla del aplastante peso de las presiones socioculturales, las cuales a menudo van en contra de los sueños individuales de algunas personas.
Es la historia de Billy Elliot, un niño que reside en un pueblo minero, que es hijo y hermano de mineros y en cuya familia la tradición minera probablemente venga desde generaciones atrás. En el entorno rudo en el que se ha criado, parece que su única alternativa es acabar siendo minero o boxeador (cosas que él en el fondo detesta). Pero comienza a hacer realidad sus plegarias secretas cuando asiste a escondidas a unas clases de ballet en las que él es el único varón. Billy ha descubierto que lo único que lo hace sentirse feliz y realizado es el baile, disciplina para la cual él está excepcionalmente dotado.
Por supuesto, sus deseos chocarán frontalmente con los prejuicios de su padre y de su entorno. Su padre es un modesto minero viudo que atraviesa por graves problemas, ya que la mina está en huelga y hay riesgo de muchos despidos. Ante tal panorama amenazador, el ballet se perfila como algo imposible y vergonzoso, algo impensable para el hijo de un rudo y machote minero que considera (como casi todo el mundo) que el ballet sólo es una afición para chicas, impropia de hombres.
Pero Billy no concibe otro futuro que no sea el ballet, que ama como a su propia sangre. ¿Cómo podrá perseguir su sueño ante tanta oposición? Sólo cuenta con dos bazas: su obstinación y su excepcional talento.
Verdaderamente bello drama sobre la persecución de un sueño que casi todos condenan por imposible.

Billy Elliot es una película buena para todas aquellas personas que sepan apreciar el buen cine pero para algunas personas como para mí es una película muy especial cuando se ha vivido prácticamente la misma experiencia pero en el mundo de la música.
Hablando de la película tiene un guión muy bueno y muy bien llevado, con un ritmo alegre, entretenido, ligero y tantas otras cosas que se pueden decir.
La interpretaciones son fabulosas, todas, desde Billy hasta su padre pasando por su hermano e incluso la abuela.
La película muestra dos realidades, la huelga de los mineros la cual tiene influencia en la vida de la familia de Billy y la vida de este joven chico el cual tiene que luchar en contra de sus entorno más cercano e incluso de su familia para poder llevar a cabo esa pasión, aquello en lo que se siente bien y sabe que es su profesión.
Una película con valores humanos allí donde se mire, la amistad de Billy con su amigo independientemente de las tendencias sexuales de su amigo, la lucha del padre y de su familia por sacar a su hijo adelante a pesar de los pocos medios, se ve a un padre luchando por su hijo, creyendo en el e intentando aprender de su hijo para poder seguir su trayectoria, un padre, simplemente.
Con momentos emocionantes se ve la vida real de una de las zonas más grises del Reino Unido y de la dificultad que es salir a flote en un medio como este.
Para las personas que hemos vividos experiencias prácticamente parecidas esta película es casi nuestra biografía, por eso nos emocionamos tantos cuando la vemos y rara es la vez que no me salen las lágrimas cuando el padre acepta el talento de su hijo y prefiere rebajarse para que a su hijo no le falte de nada para que pueda seguir hacia delante con su carrera.
En la película no interesa mostrar el Billy de Londres aprendiendo a bailar, eso ya es fácil, la película quiere mostrar la dificultad de ser aceptado en un ambiente rudo y severo, donde el arte y las emociones no tienen cabida, solamente el trabajo, la rutina y más trabajo y cuando un talento nace en medio de todo esto es difícil ser reconocido, de esto trata la película, de un talento en medio de un ambiente rudo y árido.
Una película emocionante y con tantos recuerdos….ayaya.

Muy buena obra cinematográfica, capta de principio a fin el interés y la pasión por seguirla de quien se ponga a verla. Cine de apertura a lo innato, mostrando el choque del talento con el medio inapropiado y la capacidad de flexibilidad o no de ese mismo entorno para aceptarlo y potenciarlo en lugar de anularlo y hundirlo.

Hermosísima historia del inicio de una vocación extraordinaria en medio de un círculo ordinario, apuntando al esfuezo, al sacrificio, al entrenamiento, a las dificultades y a la voluntad por salir del óvulo de los primeros calores y ternuras, para volar alto con el potencial propio de ser uno mismo.

Una película de mucha sensibilidad y espléndida narración que nos abraza emocionadamente el alma.

Fej Delvahe

Creo que es de las pocas películas que en filmaffinity, a día de hoy, no tiene una sola crítica negativa, así que poco mas tengo que decir excepto... ¿¿¿¿cómo que el final no sobra???.

No sobra ABSOLUTAMENTE NADA de esta película, esta película transmite transmite y transmite... ¡¡¡¡transmite!!!!... y de eso trata el cine, de que te haga sentir emociones y sensaciones, y esta película lo consigue, con sus fallos, con sus cosas mejorables, con lo que sea y lo que queráis... ¿pero que leches decís que sobra el final?.