Se aleja de lo común y convencional, con gran sentido de crítica al cliché. Un excelente trabajo que demostró que no hace falta una- purruchada de dinero- para hacer una buena película. Es la presentación de una familia en decadencia, con múltiples problemas al borde del precipicio, pero ala vez preparad para unificarse en el momento oportuno. Es la película clave para la juvenil Abigail Breslin. El papel de Greg Kinnear -el padre de Abigail- es excelente; también el trabajo de Steve Carell, como el tío homosexual es fascinante. Una familia difuncional que emprende un camino a un concurso de belleza, que aunque saben que la niña posiblemente no cuenta con los atributos de una reina de belleza; la apoyan y utilizan el viaje como un pretexto para olvidar sus situaciones particulares.

Interesante relato del Marques de Sade, que transita entre la locura y la realidad; con pizcas de lujuria y fantasías más allá de lo imaginable. La actuación de Geoffrey Rush -quien fue nominado al Oscar por éste trabajo- supera su actuación premiada por 'Shine' 1996. Es un banquete de dos horas disfrutando de Rush, junto a Joaquin Phoenix y Michael Caine, que como siempre también se crecen. Una buena historia contada, por un excelente guión que cuenta con el trabajo sensual y maduro de Kate Winslet, que se aleja enormemente de su fiasco actoral en el 'Titanic'.

Una película tratada de una manera inteligente por parte de Fernando León de Aranoa, que aborda con elegancia el tema. Claro, tiene como protagonista a Candela Peña y Micaela Nevárez que son bellas y sensuales al mismo tiempo. A quién no le gustaría un encuentro con Candela o Micaela, lo que hace creíble sus historias. Además de narrar las aventuras de cada una, se presenta el lado humano de ambas, la interacción y sus sueños.

Una película en donde las actuaciones y el guión juegan un papel importante. Hacía tiempo no veía a Meryl Streep tan genial como en antaño. La ambientación y la movilidad de los personajes mantienen la atención de la misma. Un encuentro entre la fe, lo que está bien y no lo está. Entre lo divino y lo carnal. Muy buena.

Aunque cumplió con la expectativa de entretenerme un buen rato, pienso que tenía los elementos para ser una mejor película. Cuenta con unos aceptables efectos especiales
que conjuran al 'El Exorcista', la obra maestra de éste género. La película la salva la presencia de Gary Oldman (Dracula/Batman) que se deja notar no empece a su poca exposición en la misma.