Un sábado por la noche, domingo tarde, que te apetece ciencia ficción, en clave de thriller, toques de acción, un reparto de primeras espadas, con algunos de los mejores secundarios que hay ahora mismo, con un par de escenas realmente brillantes ( como bola extra, porque sin ellas sigue funcionando), diálogos por encima de la media y un aire indie rollo ex machina, esta es tu peli.

No hagas caso de las malas críticas, filmaffinity se está llenando de haters. Como estaba flipando con la inquina desmedida hacia esta cinta que obvio no es sobresaliente pero sí bastante digna, he curioseado las críticas de alguno de esos para contrastarlo. Efectivamente, el 80% de sus reseñas...¡por debajo de 4! ¡ Guau! O sea, haters.
Un respeto, que hacer una peli cuesta, ¡cómo se pone la peña! En fin, domingo en casita, peli de género...lo dicho, cumple. Fíate.

Sí, también soy como uno de los compañeros que le ha puesto un 3 y que se frota las manos cuando una peli de terror tiene más de un 5 en el promedio, sección oficial de Sitges, críticas profesionales buenas y una sinopsis sugerente ¿Perfecto plan no? (y encima con secta de por medio, subidón) Pues ni de coña.

Ese término de "cocinado a fuego lento" (que pongo en cuarentena ya junto a "zona de confort, empatía, músculo, mimbres" y otras mierdas de moda ) debería corregirse por a baja temperatura. A la media hora, no te importa nada porque no te importan los personajes y en el punto medio de la peli coge un poco de calor pero se vuelve a apagar a los cinco minutos.

De verdad, si te mola La Invitación, La Bruja, Hereditary, Silent House o Kill List por decir algunas, no pierdas el tiempo con esta, a poco que tuviera un 50% de lo que tienen las otras te la recomendaría pero está demasiado demasiado lejos, de veras. Solo un ejemplo: normalmente las sectas dan juego ¿no? fanatismo, relaciones de poder, deseo de pertenencia, obediencia, despertar....pues nada, cero pero CERO de todo esto. Flipo qué le pasa a la crítica profesional.

Hay clichés del amor romántico con los que podemos disfrutar tanto en el cine como en la realidad. En la ficción, si tienen cierta gracia y ternura, disfrutan todas, feminazis (entre los que me incluyo), incluidas. Suele ser más fácil que funcionen en la comedia y más complejo en el drama, necesitan de mayor habilidad e inteligencia (y quizá cierta militancia) para que cuelen bien y no huelan a viejo. Además el romanticismo, que no su interpretación conservadora, es poderoso, intenso, es pura vida. Y creo que casi todo el mundo, al menos yo, es lo que busca en las películas: vivir. Pero claro, para que te salga bien, tienes que haberte planteado estas cuestiones, aunque sea un poco, antes de escribir el guión. O al menos que te suene de qué coño hablo.

Da igual que la dirección de esta peli sea solvente, incluso a veces brillante, porque el guión no solo carece de esa fuerza romántica clásica (porque a la pareja le falta el hervor y la sensibilidad de los protas de "Las ventajas de ser un marginado", por ejemplo) sino que es un cúmulo de los peores clichés del amor romántico más peligroso que te puedas echar a la cara. Encima con un tono indi y naif que los hace más lamentables. Sobre todo en la construcción de los personajes, en quién siente la culpa y quién siente la ira. Y a pesar de ese desprecio, hay alguien que en lugar de poner las cosas en su lugar, va y pide perdón. Y vuelve a querer. ¿Os suena? Estoy seguro que no hay maldad, claro que no, es el clásico desconocimiento masculino, el clásico desinterés masculino porque lo que, afortunadamente, desde hace años se viene escribiendo y filmando sobre los roles de género. No muchos años, ahora sí por desgracia, porque esta es una revolución reciente, pero sí los suficientes para que esta película haya nacido vieja: búscate una asesora de gafas moradas la próxima vez.

Entiendo la firmeza de la crítica antes los blockbusters como regla, hay que ser peleón con Hollywood, claro que sí. Aunque yo sería más cabrón con pelis que, a parte de saber que se han hecho para llenar las salas, además, esconden ideología llena de testosterona y estupidez. Y a veces los críticos son mucho más indulgentes con estos éxitos, sorprendentemente, que cuando de repente, una peli está igual de bien hecha en cuanto a los mínimos (actores, guión, puesta en escena, ambientación) y además tiene ideas detrás interesantes, por muy simplificadas y a veces rozando el cliché que estén (es un fakin blockbuster, qué quieres).

Qué tíos. Si cada vez que alguien hace un thriller vamos a sacar a relucir a David Fincher pues entonces no la veáis, porque como ya sabemos que Fincher es el puto amo, veros otra vez Seven, The Game o Perdida.

Y muchos de ellos luego haciendo la ola a auténticas cacas que encima huelen a Trump.

Este no es el caso. Perfecta peli para un domingo. Y no saldría mosqueado pagando una entrada aunque me guste más un cine con otras miras. Me la puse porque estaba cansado, de esto que incluso te apetece que sea un poco, solo un poco, mala. Y para nada.

Dejen de joder que el cine es un arte complicadísimo. Si esta peli la firmase un director español, sería la cinta del año.

De las críticas profesionales. Como dice un compañero, es totalmente inaudito lo que escribe la prensa. Tiene un arranque con cierto rollo pese a que le ves el aire de telefilme pero pasados veinte minutos, un lugar común tras otro, situaciones ridículas y una puesta en escena cada vez más torpe. Escribo esto mosqueado por haberme tragado este truño tras leer sus excelentes críticas. Un thriller psicológico, buenas reseñas, perfecto plan, ¿no? Pues ni de coña. Malísima.