La segunda parte de 28 días después, la genial película inglesa sobre infectados que revivió el género de zombies (más rápidos, más violentos, más peligrosos) vuelve otra vez a trasladarnos a Londres, cuando la infección ha sido controlada por el ejército de USA, un padre y sus hijos vuelven a la ciudad, a una zona bajo el control yankee en la que ya no hay peligro de nuevas infecciones. O eso creen ellos.

28 semanas después es una más que digna continuación de su predecesora, aunque no logra alcanzar su nivel ni tiene "puntazos" tan fuertes como la anterior. No obstante, lo más remarcable de la película son los 10 minutos iniciales: brutales, magníficos, salvajes... el mejor inicio de una película de terror-zombies que haya visto. Posteriormente se suceden escenas un tanto típicas* aunque muy cuidadas y bien rodadas. Los protagonistas son bastante creíbles** y actúan decentemente. Efectos especiales realmente buenos y sangrientos.

En resumen, muy recomendable película, para pasar un buen rato y con un final realista.

28 dias después no es la típica película yankee de zombis (en la que, por supuesto, abunda la sangre, los super-héroes americanos que se salvan al final y todos los estereotipos habidos y por haber), para empezar, no hay zombis sino infectados. Todo empieza cuando unos activistas sueltan a unos monos con los que experimentaban científicamente en unos laboratorios de Gran Bretaña, a los pobres bichos les habían inyectado el "virus de la ira", que rápidamente se extiende por toda la isla. Pero la historia de nuestro protagonista comienza en un hospital, donde se despierta totalmente solo tras haber sufrido un accidente y sin recordar nada. Tras salir a las calles ( unas impresionantes imágenes de Londres totalmente deshabitado) tiene su primer contacto con los infectados en una Iglesia (brutal escena por cierto). Dos misteriosos supervivientes le rescatan y allí empieza su aventura. No contaré nada más de la película porque merece mucho la pena verla. Por cierto, pese a su "aparentemente" simplona historia, la cosa mejora mucho en la segunda parte de la película, cuando cierto personaje dice cierta frase ( yo pausé la peli para poder asimilarlo) que da un giro de 360 grados al film. La historia es realmente buena, las escenas de acción están muy logradas ( no se esperen tampoco super-efectos especiales al estilo Hollywood porque se decepcionarán) y el final (que aunque no sea de los que ami me gustan) es bastante aceptable. La última parte de la película junto con la música dan un toque opresivo muy logrado.

Recomendable.

Gran Americanada. Empezando por ahí, tenemos otra peli de Vietnam; el 7º de caballería (aérea, ojo) es enviado al "valle de la muerte" o un sitio así, donde los muy campeones (solo eran 300 o 400) se enfrentarán a toda una división del ejército norvietnamita. Supongo que a estas alturas de la función se imaginarán el final.

Que la película sea una gran americanada no significa que no justifique los 6 € de la entrada, porque, dejando de lado su ya muy visto argumento, los efectos especiales y las escenas de acción son simple y llanamente brutales/salvajes. Las actuaciones, pues sin más, no van muy allá, Mel Gibson como siempre, eficiente y el resto se portan. Lo que ya no me gusta tanto son algunas cosillas que van al Spoiler. Lo mejor sin duda los primeros 3 minutos, la masacre francesa durante la Guerra de Indochina. Muy impactante.

Cuando éramos soldados es una película para ver con los colegas, un día tonto, sin muchas ganas de pensar y con muchas ganas de ver espectáculo, que es lo que esta película ofrece.

Si les gustó Salvar al Soldado Ryan no se lo pierdan. Y si no tampoco. Hermanos de sangre es lo que yo calificaría de Obra Maestra. Esta basado en el libro de Stephen Ambrose y nos cuenta la historia de la compañía Easy, desde sus instrucción hasta el fin de la 2º Guerra Mundial. Esta compañía formaba parte de la 101 división aerotransportada y tomó parte en el día D ( eran paracaidistas y los lanzaron el día de antes en Francia), la operación Market Garden en Holanda, la Batalla de las Ardenas y la toma del Nido del Águila. Puestos a contar una gran historia, que se a lo grande: a través de 10 capítulos viajaremos con estos soldados por media Europa mientras luchan contra los alemanes en diversos lugares y situaciones. Todo esto con unos actores ejemplares, unos efectos especiales y unas escenas de batalla que a más de una película le gustaría tener y una fidelidad al libro impecable.

Perderselo sería un pecado, no lo duden.

Resulta que este año el cine español está de suerte: REC2, Agora y... Celda 211. Con diferencia la mejor película española del 2009. Con un planteamiento original, nos trasladamos a una carcel española, el primer día de trabajo de un funcionario de prisiones en la carcel se estrena con un motín. Y el funcionario en cuestión se queda atrapado en la celda 211. A partir de ahí tendrá que buscarse la vida y sobrevivir mientras fuera los funcionarios de prisiones intentan tapar la situación, los GEO tienen el dedo en el gatillo y todo el mundo miente.

Celda 211 nos muestra mucho más de lo que aparenta, además de la difícil situación de los presos (palizas, droga etc) vemos el funcionamiento de un sistema podrido e hipócrita: mentiras, cuestiones políticas que se ponen de por medio...

A destacar el personaje de Malamadre (genialmente interpretado por Luis Tosar), un preso de vuelta de todo capaz de cualquier cosa. Duro como el acero y sin ningún escrúpulo, pero fiel a sus compañeros y a sí mismo. Me encantó.

Funcionario: ¿por qué tengo que quitarme la ropa?
Malamadre: Pues mayormente porque a mí me sale de los huevos.

En resume: im-presionante.