Cuinant/Cocinando
Cocinando es como Marc Fabregas , en los 93 minutos de espera de otra pareja para cenar, exhibe un catalogo de traumas, dudas, malentendidos, frases nunca dichas, secretos no revelados, mentiras reparadoras que subyacen en una convivencia de una año. Director de 6 cortometrajes, sostiene la película en el mas puro estilo indie, con dos conmovedoras y cómicas interpretaciones de Chus Pereiro, actriz afincada en Madrid y Miquel Sitjar, reconocido valor catalán. Habiendose conocido solo una semana antes, desarrollan una química irresistible que nos hace asistir a una complicada relación de amor inmaduro. Comparten piso y cocina, - importantisima la fotografía de Cristobal Franco-,pero no ideas, sexualidad, ni lenguaje o sinceridad. Un film que inicia otra secuela, la de la cena, que nos lleva al centro del modo NuevaYork. Sin profundizar en ningún tema, si que trasladan su problema personal al momento global, sean los celos, relaciones con los ex, o quien debe cocinar o hacer que. Unos diálogos en libertad para el actor mantienen la tristeza, la risa o la ternura y el deseo sexual en lo mas alto del ritmo alleniano. Cenarías una ensalada de tomate y queso? Compartirias con tu desasosiego una orada al horno? Te arriesgarias a ponerte tierno con una piña al chocolate? El vino blanco disipa todas las previsiones y convierte la cocina en un taller de reparaciones de almas aturdidas que buscan salvaguardar su linea cerebro, corazón, sexo. Un film que llama a nuestra puerta desde abajo.

Una apuesta sentimental arriesgada este film de Roberto Caston que consigue hacernos mirar en el espejo de nuestra cotidianeidad. Muchas de sus historias son mentiras, fingir e interpretación frente a la vida de los otros.Para el director lo mas importante para llegar es emoción y credibilidad para lograr la empatia. Cine dentro del cine de un equipo que a las ordenes del director-interprete Roberto Alamo, han de leer un guión. Los engaños y la confusión con la realidad es constante en manos también de Cuca Escribano, Aitor Beltran, Vicky Peña y Nausica Bonnin. La primera película en euskera del director gallego (Ander) de temática gay le abrió muchos festivales. Con esta propuesta, sube el listón y por tanto, también los elogios y las criticas.

También podría ser los momentos en la vida del actor Ellar Contrane, tan preciso como la mecánica del narración en las que se intuyen las decenas de horas de grabacion. Richard Linklater, el de antes y despues de atardeceres y anocheceres, no muestra el album de la vida de un niño, de 6 a 18 años, en la que la alegría y magia de la edad, sobrevive a todos los cambios familiares, escolares y estructurales que en su caso son muchos. A su lado evolucionan no sin dificultades su aterrorizada madre, Patricia Arquette y su ausente padre Ethan Hawke. El film que se rodó a 2 semanas cada año, no sufre ninguna rotura de cohesión y corre por el tiempo transcurrido con una fluidez liquida. 40 días de rodajes desde el 2002. La cámara como el tiempo discurren al lado del presunto guión para atraparnos a todos en una historia común. Y con ellos su hermana, la hija del director Lorelei Linklater. En su lucha constante con el tiempo y la naturaleza, nos muestra el trazo cambiante de la existencia humana. Y por primera vez en la historia del cine comercial, podemos verlo. Gran Linklater.

En la linea de The Wonders de Hanks. Clint Eastwood deja su pesado Magnum 44 y se las compone con suaves canciones y pop edulcorado. Además de músicos y managers hay mafia y los interpretan John Lloyd Young, Vincent Piazza, Erich Bergen, Michael LOmenda, Christopher Walken, Joey Russuo Jeremy Luke y Sean Whalen entre otros persiguiendo el sueño americano.Todo un mercado musical abierto en canal, para que Eastwood analice una vez mas la situación social y lo efímero de la fama. La suerte del film es el fallo en la producción prevista previamente con Beyonce, un remake de Ha nacido una estrella. Ha quedado un notable resultado alrededor de Frank Valli y los Four Seasons de los 60, sin coreografías al uso sino con grabaciones de estudio, directo, en la linea de Bird o El aventurero de medianoche. Cine de calidad de un director parco en palabras, músico adolescente que aun ayer le decía al buscador de oro que le presta ayuda no querida en Pale Rider;"Has caminado mucho" cerrando el film. Con 84 tacos, sin dejar entrar al viejo Clint en casa, dice que cuando no pueda rodar, practicara bailes de salón.

Si hace pocos días la family era happy, hoy la de Liliana Torres es tour. O sea vulgar, cotidiana, imprevisible, nada comprometida, natural y corriente.La cineasta recoge a personales reales de su familia, ella misma es el reflejo de uno y le da un tono autobiográfico. La vuelta a casa por Navidad, como en un documental, después de algunos años, transcurre en unas vacaciones a cargo de una joven que vive y trabaja en México. La familia tour , visita a la abuela y tias incluidas, son Nuria Gago, Joana Serrat, Manuel y Noemi Torres, Manuela Jimenez y Antonia Exposito.