He leído en fuentes fidedignas que sobre la popular novela de Dickens se han hecho para la pequeña y gran pantalla 1001 versiones, de las cuales la mejor fue la filmada por David Lean en 1948, con Alec Guiness como actor principal.
Mas de medio siglo después y tras ganar un oscar por su anterior trabajo nos llega la versión definitiva, obra de uno de los mayores director de las últimas décadas, de apellido Polanski.
Las relaciones que hay entre la historia de Twist y el director son evidentes y fueron comentadas por el cineasta en numerosas ocasiones, muerte de su madre a pequeña edad, vida de bohemia en la segunda guerra mundial... Por todo ello, quiso embarcarse en el proyecto contando como único actor conocido a Ben Kingsley (que ya había trabajado con él en "La muerte y la doncella") y como Twist al pequeño Barney Clark, que tuvo que pasar una prueba de selección entre miles de candidatos, pero su labor resulta en ocasiones demasiado grande, por lo que no siempre está a la altura del personaje.
Tras confirmarse la producción de la película, el guionista Ronald Harwood comentó que tanto él como Polanski se pusieron a ver el film de Dean en casa de éste y tras acabar la proyección, Harwood le comentó a Polanski: << Está bien, pero podemos mejorarla>>.
Lo cierto es que no le faltaba razón al "modesto" adaptador, debido a que el film resulta ser perfecto en todos los sentidos. La música compuesta por Rachel Portman es magnífica, los decorados excelentes y Ben Kingsley es digno de estar entre los candidatos al oscar a mejor actor secundario en febrero.
Desafortunadamente y con un coste de 60 millones de dólares, sólo ha recaudado hasta la fecha 1,9 millones en USA. Espero que el mercado internacional haga justicia al gran largometraje de este extraordinario director, que resulta ser Roman Polanski.

Entretenida película, que vuelve a contar con Antonio Banderas y Catherine Zeta-Jones siete años después de que se rodara la primera entrega.
En esta ocasión, aunque la trama es más inverosímil y menos correcta y pulida que la del primer film, sí se puede considerar correcta.
La ausencia de Anthony Hopkins se nota mucho, y la música es idéntica a la del primer largometraje, por lo que se hace repetitiva.
Resumiendo, nos encontramos ante un film correcto, bien elaborado y entretenido. Poco más.

Divertidísma comedia a cargo de uno de los integrantes del grupo Monty Python, Eric Idle, que también hace labores de guionista. El argumento es original y las situaciones divertidas se suceden sin parar.
El público no lo entendió así y el film fue un fracaso. Atención a la aparición de Zeta-Jones, uno de sus primeros films.
Muy recomendable

Sin lugar a dudas nos encontramos ante la peor película de la comañía Pixar. Y no es que la animación esté mal; al contrario, es perfecta. Sin embargo, y pese a contar con un tema muy original y un comienzo esperanzador la película poco a poco se va desgastando llegando por momentos a aburrir y a ser monótona. La trama se desinfla cual globo a los 8 días.
Sin embargo, el peso de la excelente realización, que se apreciable en cualquier fotograma y el diseño de los personajes dejan huella y son básicamente los pilares en los que se apoya la película.
No existe esa chispa que estaba presente en largometrajes como "Ice Age 1&2" o "Shrek 1&2". Aquí, el intento de hacer del filme un tanto adulto ha infuído considerablemente en que éste pierda gracia, chispa, nota y sobre todo, calidad.
De todos modos sigue siendo una peli Pixar y quieras que no, eso se nota.

Y yo sé que habrá muchos que pensarán esto. Voy ver una de piratas para entretenerme, pasarlo bien y dejar correr dos horitas de mi vida. Pues no. En la película presente se trata más el drama que cualquier otra cosa. Eso sí, con algún que otro toque cómico.
El largometraje está muy bien llevado y la historia es bastante buena y recrea muy bien aquellos tiempos gloriosos para el imperio español. Matthau hace una actuación destacable y la música va acorde a las escenas.
Momentos memorables con aquellos en los que se ven obligados los protagonistas a comerse una rata o cuando se quedan atrapados en una larga cadena con el trono al lado.
Una película que falló en su estreno y de la que vale la pena recordar. Recomendable, aunque no hay acción. Es más una historia de personajes. Dicho queda.