Antes de la tan floreada -y muy aburrida- Te doy mis ojos, hubo una pequeña joya desconocida y escondida que trataba los malos tratos tan bien como la anteriormente mencionada, y encima entretenía.

Esa película es Sólo mía, el aceptable debut de Javier Balaguer. La película empieza como si fuera una historia que sigue el día a día de una pareja. Pero después del primer maltrato, la historia pasa, y el por lo tanto el peso del film cae inevitablemente en Paz Vega. A partir de ahí, la película nos contará los esfuerzos que hace su personaje para intentar borrar de su mente su horroroso pasado e intentar criar a su hija lo más a lejada posible de su padre. Pero como era de esperar en este tipo de casos el padre, interpretado por un bueno pero irregular Sergi López, interfiere en la vida de su mujer. La visión que propone en todo el momento el director me parece excelente: al final la protagonista se ve totalmente sola y asustada porque ni la ley actúa ni se le van de la cabeza sus recuedos.

Pero si algo hay excelente e inmejorable en esta película es la impecable actuación de Paz Vega. De verdad, se me puso el pelo de punta cuando hablaba, cuando gritaba o cuando se estremecía. La mejor actuación femenina en una película española de lo que llevamos de siglo XXI. Recuerdo especialmente la escena en la cual está dentro de la casa creo que de su hermana, y su marido intenta entrar sin conseguirlo porque el marido de la otra mujer esta ahí. La impotencia con la que Paz Vega reflaja esos sentimientos en la película traspasa la pantalla y llega al corazón. De verdad, felicitaciones Paz.

En definitiva, buena película que se deja ver en las dos horas que dura y con la cual Paz Vega se hizo actriz de verdad y no con la boñiga Lucía y el sexo.
Valoración: 7.2

Y tantas críticas favorables no ayudan cuando has visto la serie. Como han dicho por ahí otros usuarios, Como conocí a vuestra madre no es más que otra sitcom de las que rellenan las poco exigentes pantallas estadounidenses pero que no son más que una serie de bobadas o paridas con gracia o sin ella, y, en este caso, no tienen apenas gracia. Y quizás la culpa no la tenga la propia serie (ya me entienden) sino los tiempos en los que vivimos. Es decir, que hoy en día ha habido tantas sitcoms y de tanto nivel que otra más que aparezca no va a ser más de los mismo, pero con posible resultado diferente.

Y es que Como conocí a vuestra madre tiene todos los ingredientes para "triunfar": personajes caracterizados y estereotipados al máximo, situaciones mil veces vistas y que más o menos funcionan y unos personajes con los que sentir cariño o unión. Esta serie tiene todo esto a la mitad, y se queda sin gas. Se queda sin gas porque un capítulo te puede hacer gracia, pero otros tres no. Se queda sin gas porque Barney hace gracia una vez, pero la segunda vez que lo ves sabes lo que va a decir. Se queda sin gas porque sus chistes son demasiados sosos y porque las risas enlatadas estorban más que provocan risa.

Así pues es casi imposible para mí aguantar una temporada entera de la serie por lo poco nuevo que aporta a las sitcoms repito, por lo avanzado de la tv en la actualidad. Y eso se paga. Como conocí a vuestra madre lo ha pagado y bien. No es una buena serie, quizás lo hubiese sido diez años atrás, pero no ahora. Serie bastante cutrilla. Valoración: 4.3

PD: ¿Friends? ¿En serio? ¿Os atreveis a compararlas?

Y no me gusta llevar siempre la contraria, más que nada porque yo también fui al estreno con las mismas ganas que vosotros. Pero a mí me pareció una bobada. No, mejor, una topicada del tres al cuarto. Y no tópico por la tématica, sino por las acciones, los diálogos y las resoluciones. Y entonces veo que el padre de este engendro es uno de los guionistas de 7 vidas. Ahora lo entiendo todo.

Javier Cámara siempre me ha parecido un buen actor, pero aquí se pierde entre menús, bebidas, entremeses y postres. Su papel de homosexual le queda un poquito grande y eso conlleva a la sobreactuación. La decepción fue la de Lola Dueñas, buena actriz, que aquí cae en picado. Del resto del reparto no destaco a nadie: Tejero es un actor pésimo, Luis Varela está más o menos aceptable y la sra Lampreave ya se podía ir fijando en sus antiguos (y geniales) papeles de antaño.

En definitiva que estoy harta del cine patrio. Que si Almodovar, que si León de Aranoa... que si Torrente, que si tal... el 90% de "nuestro" cine es basura repetitiva y aburrida. Como este caso. La peli tiene sus puntos, pero no compensa un argumento como el que tiene, el guión que posee y las "actuaciones" tan "magníficas" de su reparto. Comento. Valoración: 3.1

Ni McLaine, ni Nicholson (dos grandes actores) levantan lo mínimo esta castaña rodada y encima, premiada con 5 premios Oscar. La trama es tan tópica que incluso a principios de los 80 se podía haber desechado por cansina, a pesar de ser una adaptación. El director Brooks pone toda su influencia de la televisión en una película que se acerca más a las telenovelas actuales que a un buen drama familiar, a pesar de que aquí el presupuesto daba para más y los actores eran de calidad.

El final es uno de los más conocidos entre los dramas babosos. Y es horroroso. No se me caen las lágrimas de pena, sino de dolor. El pasaje de la playa tiene su punto por el gran Jack, por nada más. Los oscars acertaron de lleno si querían premiar un bodrio: no se merecía ninguno. Aunque claro, ese año no había apenas pelis buenas (El retorno del jedi como mucho) y decidieron premiar lo facilón como hicieron años atrás con películas como Gente corriente o Kramer contra Kramer, obviando otros largos realmente buenos.

La sensiblería es fácil de conseguir; el drama, no. Valoración: 0.2

Absoluta sandez epiléptica que va de modernilla y por esa misma razón, se queda en una de las mayores bazofias de la Historia y la peor película del 2001 con diferencia. No encuentro adjetivos suficientes para expresar mi cólera ante la tremenda decepción que me produjo este film. Los musicales por regla general me suelen gustar, pero por Dios, esto... ¿cómo puede gustar a alguien? El principio de la caca esta ya empieza mareando, mucho efectismo, mucha casualidad, poco talento. McGregor (muy guapo él) escribiendo su historia con Satine en el Moulin Rouge y con la fauna que por ahí desfila: enanos, golfas, subnormales... y a los 20 minutos de metraje las luces y la música discotequera inundan la pantalla. Los bailes, la música con temas conocidísimos (Can-Can, Lady Marmalade) se entrecruzan y uno no entiende muy bien que se había tomado ese día el director para mostrar tal tortura a los espectadores.

Y la peli sigue, y el numerito de los diamantes de Kidman-Satine está muy bien, pero pronto se acaba y da paso a una escenas casposa-cómica en el gran elefante, donde gemidos, poesias, bailes y "How wonderful life is now you're in the world" crean uno de los momentos más vergonzosos que recuerdo. Y la historia de amor entre tres está servida. La guapa tiene que elegir entre el pobre y el duque, el primero de gran corazón y el segundo maligno, pero es él que pone la pasta. También a partir de ese momento ensayan teatro lo que da lugar a infumables números musicales y a diálogos estúpidos a más no poder. Al final todo es de color rosa hetero y muy bonito todo.

Las actuaciones podrían haber sido buenas (Kidman, McGregor y Broadbent) si el guión no les hubiera deformado de esa manera y les hubiera hecho hacer gilipolleces que no pasan por el filtro de lo permitido ya que no cuentan nada de nada. La dirección es de las 10 peores que he visto, que me recuerda a un mix entre culebrón y video de despedida de soltera. La fotografía es mareante, la música buena fuera de la película pero que se deforma dentro de ella, los efectos excesivos, el montaje hace que la película sea aburrida y el vestuario y los decorados son buenos en torno a las expectativas. En fin: infumable.
Valoración: 0.1