Haz click aquí para copiar la URL
Francia Francia · París
Críticas de keimus
<< 1 2 3 4 5 7 >>
Críticas 34
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
3
18 de octubre de 2014
7 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Qu'est-ce qu'on a fait au Bon Dieu? no me parece una buena película, simplemente es otra comedia francesa, que toca un tema tan delicado como la inmigración y el mestizaje, pero con una chabacanería y un humor simplón, que la hacía parecerse en muchas ocasiones a una comedia gringa (sin el tono escatológico de las “movies”). Un apólogo que nos quiere decir que todos somos iguales, sin importar si nuestro origen es chino, africano o judío; pero con un tono tan simplón que me hizo preguntarme si debí haber pagado la entrada para ver el film o no.

Y sí, es cierto que aquí en Francia sigue en cartelera después de 20 semanas y la gente sigue yéndola a ver. Sin embargo, me parece que sea una buena película, ya que las hipérboles de la cinta, en lugar de servir como una vía para tocar bien un tema tan complicado como el de la globalización y la inmigración, termina es ofreciéndonos una comedia clichésuda, en el que los protagonistas terminan bailando zumba luego de todas las “peripecias” (que no cuento para no “dañarles” una historia realmente predecible) por las que atraviesan para llegar al desenlace final.

Los actores principales me parecieron flojos y en ocasiones sobreactuados (en parte por las exageraciones del guión). Los secundarios, estaban más por rellenar que por tener una papel dentro del film. Lo único destacable es la belleza de las chicas que llevan el papel de las hijas del Monsieur de la película (cuyo nombre ni me acuerdo). De resto, pienso que es una comedia para olvidar, de esas que en un par de meses ya olvidaremos.
keimus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4
27 de mayo de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uno de los puntos más oscuros del Festival de Cannes fue la apertura del festival con Grace de Mónaco, semibiopic sobre la legendaria actriz Grace Kelly, quien luego de obtener un Oscar, dejó las cámaras y los flashes para convertirse en su Alteza Serenísima Princesa Gracia de Mónaco.

Pero la película, al contrario del nombre no tenía nada de serena. Desde los días previos a su presentación, el film generó polémica luego de que los Grimaldi (la familia real) lo tacharan de inexacto, literario (en el peor sentido de la palabra) y comercial. Sin embargo, lo anterior lo que hizo fue aumentar la curiosidad por una cinta que finalmente en su estreno, según los cronistas, generó un silencio absoluto, una ambiente desasosegador. En las horas subsiguientes a la presentación, salieron las críticas de la película, en la que se le tachaba como un “filme biográfico de la realeza peor que Diana” (The Guardian, en una de las mejores críticas que recomiendo), “un melodrama increíblemente idiota” (The Telegraph), entre otros.

Y creo que tienen algo de razón porque este film es una de esas suertes de prevalencia del estilo sobre la sustancia. O en otras palabras, una de esas cintas con fotografía atrapante llena de imágenes bellísimas y paisajes magistrales que se acompañan de una buena banda sonora, a la que le falta historia que acompañar. Porque la película aunque pareciese tener una historia, lo cierto es que no la tiene o si la tiene no la cuenta, o la cuenta mal. El guion es torpe, aburrido, cursi e inverosímil (no voy a mencionar que para el director, el presidente de Francia y el príncipe de Mónaco se comunican en inglés). Si bien la premisa era buena la premisa era buena (las historias de hadas no son como las pintan y ser princesa conlleva una gran responsabilidad), la ejecución es algo catastrófica. El derrotero que toma la película nos hace pensar que estamos viendo más de lo mismo sin originalidad o algo que la destaque. No ayuda tampoco la mala construcción de los personajes que nos hacen ver a tipos tan interesantes como el príncipe Raniero III o Charles de Gaulle como pobres tontos, caprichosos, crédulos, que no saben una pizca de diplomacia o tan siquiera administrar un puesto de limonada. Y todo ello para darle protagonismo a una Grace, que a pesar del buen trabajo de Nicole Kidman, no termina de colar o de ser creíble. O qué sé yo, de gustar.

En la crítica que escribí aquí sobre la vie en rose dije que aquella me había parecido una buena historia mal contada. En esta ocasión tengo que ser un poco más severo y decir que estamos frente a una buena premisa mal ejecutada, cuyo visionado no recomiendo en cines sino en Netflix. No pierdan el tiempo y su dinero en cine.
keimus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
10 de mayo de 2014
2 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace un par de días fui al cine para ver esta película (a.k.a. The baby en Francia, por alguna razón) y debo confesar que no salí decepcionado porque entré a la sala de cine sin expectativas y sin saber de qué iba el film y pues bueno, qué les digo…Para empezar me dormí recién entrado a la sala de cine, porque arrastraba la pereza del día festivo y sólo hasta cinco o diez minutos después de iniciada la película me desperté (razón por la cual no me tragué de aquel spoiler que le daña a uno la “sorpresa” del final, del que sabría más adelante por las críticas). Luego me quise meter de lleno en la película y por un momento lo estaba logrando, porque la pareja, con todo y clichés, empezaron a pintarnos una bonita relación, algo creíble…hasta que al tipo le da por salir con aquel rollo de filmar los mejores momentos de su vida. Hasta ahí llega la señora credibilidad o mejor, empieza la señora predictibilidad. No sé cuánto tiempo pasó antes de eso, si dos, tres, cinco o siete minutos. El caso es que con aquella intervención pensé que la película iba en rollo actividad paranormal, REC o alguno de esos exorcismos baratos.

Pero no, los guionistas me sorprendieron con una escena (luego del matrimonio y ya en la luna de miel en Santo Domingo) que para mí es la verdadera película de terror en la película de terror: ya sabemos cómo son los gringos, llegan a tierras extranjeras imitando de forma graciosa el lenguaje de los locales y tomando unos riesgos que ni los que viven en la ciudad se atreverían a tomar. Esto los hace meterse en chascarrillos como entrar en una casita lejos del tumulto donde hay una de esas brujas embaucadoras o peor aún, tomar un taxi y no bajarse en el momento en que el conductor les dice que no van para su destino, sino para otro al que él “invita”. No sé ustedes, pero una vez el tipo dijo eso, inmediatamente empezaron a ponérseme los pelos de punta, porque recordé varias de esas historias de pasajeros que fueron robados, secuestrados, violados por haber tomado un taxi equivocado. No ayudó mucho que el conductor hablara mal inglés y el turista pésimo español, puesto que esa situación nos puede pasar a cualquiera de nosotros y no sé ustedes, pero yo sufrí con la pareja, yo intentaba mirar a todas partes (bueno lo que permitía el plano) con el miedo de que en algún momento pudiesen salir unos tipos armados hasta los dientes en plan Far Cry 3, con el ánimo de meter a las personas en jaulas donde éstos tendrían que alimentarse de ratones y culebras…pero no, sólo llegaron a una fiestecita donde se emborracharon, se abrazaron y luego, cayeron en una de las escenas más inverosímiles que pudieron haber imaginado (en donde por alguna razón la cámara se prende de la nada, quien sabe si por obra de Satanás o de algún defecto de cámara, qué sé yo, los que vieron la película saben a qué me refiero).

Luego de ello y ya de vuelta en los “States”, comienza una serie de eventos poco creíbles, que en lugar de dar suspenso y miedo a la película terminan acribillándonos de risa (para no ir tan lejos, en el teatro en el que estaba, todas las personas se rieron con la escena del supermercado). La entrada de las diferentes cámaras que aparecieron en el film, fueron arbitrarias e inverosímiles, por lo que me hace pensar que el guion fue hecho en una tarde de nachos y cerveza y pues bueno. La reflexión sobre que este género ya está agotado, la han dado en este espacio otros comentaristas, por lo que no me extenderé sobre ella. Sin embargo, sí creo pertinente decirle a todos aquellos que estén pensando en si ir o no al cine, que mejor esperen a que esta película salga de cartelera, la pongan en dvd y éste baje de precio para comprarla y verla en una noche de domingo con algunos amigos. No se amerita pagar una entrada al teatro (que bien cara sí es), para observar algo ya muchas veces visto y cuyos sustos son tan limitados y chapuceros, que ni siquiera permiten aprovechar el momento de agarrarle la mano (o algo más) a la novia.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
keimus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2
16 de septiembre de 2013
22 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
Debo empezar diciéndolo: lo siento queridos fans de Dragon Ball, pero esta película en mi opinión es horrible y sólo está un peldaño por encima del bodrio total que fue DB Evolution. La sensación de estar haciendo el ridículo y de sentirme patético, estuvo latente durante toda la película. Debo aclarar que al igual que muchos de ustedes crecí con DB y DBZ, viviendo con fruición las aventuras de Son Goku enfrentándose a un sinnúmero de enemigos dentro de un universo y una mitología fantástica. Disfruté desde las peleas en contra de Piccoro Daimaku y sus grotescas creaciones hasta la fantástica saga de Freezer. Incluso me atrevo a decir que a pesar de los comentarios negativos y el bajonazo en la historia, también me regocijé con las sagas de Cell y Bu.

Sin embargo, no sentí el mismo espíritu en la película que nos convoca y es más, la tuve que terminar de ver adelantándola con sendos disgustos por el exacerbado fanservice que metieron en detrimento de una historia (¿una historia?) que nunca arranca y en pro de vaciarle los bolsillos a los nostálgicos de los años 90 (y digo esto de la forma más eufemísticamente posible, para no decir que me produjo vergüenza ajena y propia, por estar viéndola).

Para entender el vacío enorme de la historia remontémonos a la serie. ¿Se acuerdan por qué Goku se enfrentó a Raditz, Vegeta y Freezer? Sí, porque amenazaban con destruir la tierra o conquistar el universo, según sus intereses personales. Este pequeño escenario que sirvió de leitmotiv en todas las sagas fue verosímil (incluso en las de Cell y Bu), razón por la cual, la persuasión a los televidentes para que siguieran con atención las peripecias de los guerreros z enfrentando a los villanos de turno era fuerte y creo que ello era porque los actos destructivos y los móviles de los villanos de turno eran creíbles. Sin embargo en esta película, el único móvil que lleva a Bill (el dios enemigo) a luchar contra Goku y los guerreros Z es que se despertó y quiere hacer algo para pasar el tiempo (en la película se habla de una profecía, tan metida con calzador, que da lo mismo que nada).

Si bien de ahí se parte mal, esto no es lo peor. La mayoría de la película es un compendio de chistes flojos japoneses, bailes estúpidos, Gokú y Vegeta haciendo el ridículo y escenas de relleno que le quitan protagonismo a las luchas de la película. Sobre estas últimas (punto que esperaba fuera por lo menos rescatable), tampoco hay escenas memorables de las que se pueda hablar. La mayoría de peleas pasan rápidamente y sin nada memorable. Incluso la “esperada” batalla final se queda en promesas o mejor, en una escena muchas veces ya vista en la serie, pero que acá deja la sensación de un insatisfactorio déjà vu que pudo ser mejor, si los creadores en verdad lo hubiesen querido.

Ya sé que las películas de Dragon Ball son malas por antonomasia (salvo contadas excepciones) y que entre tanta basura, ésta por lo menos tiene dibujos bonitos. Sin embargo, ver a todos los protagonistas de parte de mi infancia haciendo el ridículo (sobretodo Vegeta), todos esos chistes flojos en los que incluyen canciones y bailes tipo Disney y en general, una película que no se toma en serio, de la misma forma en que tampoco lo hace Date Movie o cualquier Epic Movie, me hace sentir desasosegado.

En fin. Siento que esta ridiculez (i.e. película) fue creada con un ánimo mercantilista de explotar la gallina de los huevos de oro, sin importar la reducción de la calidad de una serie que alguna vez nos hizo estar pegados durante semanas al televisor.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
keimus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1
23 de agosto de 2013
31 de 45 usuarios han encontrado esta crítica útil
El otro día, luego de una estresante jornada laboral, fui con una amiga del trabajo al cine más cercano a ver qué películas había. La cartelera era desastrosa y entramos a la de Percy Jackson, porque según ella (que la había visto con un primito), se había visto la primera parte y le había parecido entretenida. Si bien, no estuve muy de acuerdo con entrar, el hecho de que me mencionaran la mitología griega (de la que estoy enamorado y rindiéndole pleitesía al dios Baco) me convenció (a regañadientes). Sin embargo, salí furioso de la película, no obstante que me había quedado dormido en la mayoría de ella.

El film (y estos no son spoilers) destroza magnificas historias de la mitología griega como la del Vellocino de Oro y personajes como Polifemo, Hermes o el gran Cronos. También, en su americanización de dioses, semidioses, sátiros y ninfas, la película convierte el universo griego en una tomadura de pelo llena de chistes flojos, referencias tontas (Percy= Perseo, así no tengan nada en común) y escenas aburridas que me llevaron a dormirme luego de la visita de los héroes a un viejo conocido (según mi amiga que se había visto la película).

Entrando en asuntos puntuales los personajes son malos y por su paupérrima actuación, todos son olvidables. Los villanos son patéticos y esa rivalidad que hay desde el principio entre Percy y la hija de Ares (cuya actuación fue tan mala que ni su nombre me acuerdo) es de lo más cliché que hay en este tipo de películas. Los efectos me parecieron malitos, puesto que los defectos salen a relucir fácilmente (no obstante el gran presupuesto que se le destinó). Para no ir muy lejos, en varias de las escenas del mar, se notaba la pantalla verde de por medio. Y la justificación de la película (es decir, el problema que le da lugar a la historia) es de lo menos verosímil posible. Es decir, hubiese quedado mejor unos “juegos del hambre” versión griega, en la que hubiesen competido la hija de Ares y Percy por el trofeo “soy el hijo de papi más querido” (y se hubieran gastado menos dinero).

En conclusión, este film es un bodrio gigantesco que estoy seguro que haría enfadar a Poseidón. No lo vean, no lo tomen en cuenta, miren en otra dirección.

PD: Si en esos semidioses "we trust", apague y vámonos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
keimus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 7 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow