Media votos
5.5
Votos
1,708
Críticas
3
Listas
18
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Kant:
7
7.8
73,076
3 de agosto de 2011
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ayer por la noche estaba, ante la que iba a ser mi primera película Surcoreana. Escogí Oldboy para iniciarme en este nuevo estilo de películas, que hasta hoy era desconocido para mí. La elegí por su increíble nota media en Filmaffinity y porque un amigo, que de esto del cine entiende un rato, me la había recomendado.
Ayer me di cuenta de que yo, al igual que Min – Sik Choi, llevo muchos años confinado, ignorando por completo que existe buen cine muy lejos de el que todos nosotros conocemos. Un paraíso virgen y sin haber sido explotado todavía, por la gran maquinaria comercial que es el cine occidental, homogéneo y cada vez mas carente de imaginación.
A pesar de todo lo dicho, no tenía demasiadas esperanzas puestas en el film. Pensé que Oldboy, poco o nada nuevo podía aportarme. Nada de eso. Me convertí en estudiante, mi asignatura fue la película, fui estudiante de Oldboy, la cinta tenía mucho que enseñarme y al concluir el último acto me sentí pequeño. Como el estudiante fanfarrón al que el profesor de una lección de humildad. Pensé que lo tenía todo visto, y la película se vengo de mí…
Y es que aun quedan mentes brillantes con lugar para la imaginación y talento para dirigir una película de estas características. Pague mi error, grande o pequeño. Ahora entiendo el dicho:
“Sea un grano de arena o una piedra, en el agua, se hunden igual”.
Ayer me di cuenta de que yo, al igual que Min – Sik Choi, llevo muchos años confinado, ignorando por completo que existe buen cine muy lejos de el que todos nosotros conocemos. Un paraíso virgen y sin haber sido explotado todavía, por la gran maquinaria comercial que es el cine occidental, homogéneo y cada vez mas carente de imaginación.
A pesar de todo lo dicho, no tenía demasiadas esperanzas puestas en el film. Pensé que Oldboy, poco o nada nuevo podía aportarme. Nada de eso. Me convertí en estudiante, mi asignatura fue la película, fui estudiante de Oldboy, la cinta tenía mucho que enseñarme y al concluir el último acto me sentí pequeño. Como el estudiante fanfarrón al que el profesor de una lección de humildad. Pensé que lo tenía todo visto, y la película se vengo de mí…
Y es que aun quedan mentes brillantes con lugar para la imaginación y talento para dirigir una película de estas características. Pague mi error, grande o pequeño. Ahora entiendo el dicho:
“Sea un grano de arena o una piedra, en el agua, se hunden igual”.