En cierta forma “Martyrs” es una película que mantiene la expectación hasta el final, aunque lamentablemente tantas torturas y tanto abuso del gore terminan diluyendo bastante la intensidad y la sorpresa del filme. Por ende se torna en una obra aburrida y redundante en muchos pasajes.

Es una película cuya historia va preparando una sorpresa narrativa, la cual supuestamente le dará el valor extra que este filme posee. Por tanto, hay que saber que no es sólo una película sobre matanzas, torturas, sadismo, gore y mutilaciones. Es un filme que en el fondo guarda en secreto otra cosa. Pero el problema es que demora demasiado en sacarlo a la luz, y uno como espectador termina cansado de ver en pantalla solamente truculencias y martirios a los cuales sólo al final se les encuentran cierto sentido.

Es muy probable que les guste a quienes disfruten de las películas que siguen la onda “torture porn”, en donde se trata de hacer sentir incómodo al espectador mostrando en pantalla todo tipo de vejaciones y maltratos físicos hacia personas.
Pero para quienes pretendan algo más, pues se sentirán que el filme no alcanza, que la sorpresa narrativa llega muy sobre la hora y que encima la misma puede que deje la molesta sensación de que se les ha tomado el pelo.

En fin, no es una cinta con violencia gratuita, pero casi que sí. Con ello quiero decir que no termina de convencer del todo la justificación (o más bien excusa para desarrollar gore) que aparece en el desenlace.