Asesinos por naturaleza

Extraño experimento del cine exacerbado con lenguaje vulgar y violencia gratuita. Claro está que a esta última la película hace una profunda crítica. Y no solo critica ese campo…
Creo que a los fanáticos de Tarantino les gustará.

El film narra una historia mediocre realzada por los recursos visuales más gratuitos que jamás halla visto en toda mi vida. La trama es relegada a un segundo nivel. Se convierte en una mera excusa para utilizar efectos desafortunados, o bien estos efectos fueron utilizados en exceso para tratar de disimular la falta de imaginación y de chispa propias de la historia y del guión.
Si por lo menos el conjunto de estos efectos no fuera tan burdo e innecesario y pudiera considerarse como un fin en sí mismo...

Mirad, críticos sin idea de la vida, si no entendéis ASESINOS NATOS, no os esforcéis más y olvidadla. Pero por favor, no la infravaloréis porque nunca antes se había hecho nada igual. ¿Crítica a la sociedad? ¿A la violencia? ¿A los asesinos en serie? Dejaos de paparruchas. Si tiene que ser una mera y vulgar crítica, sin duda es a los medios de comunicación y a su forma de manipular las miserias de nuestra actual y violenta sociedad. Pero la película va hasta tal extremo MÁS ALLÁ que ya es un clásico de los 90 y de la historia.
Un collage audiovisual y alucinógeno no apto para paladares NO exigentes.

Un día vi las escenas eliminadas, y como suele ocurrir, me parecieron completamente inadecuadas. Mis felicitaciones al director por haber sabido cortarlas a tiempo, a pesar de contar en las mimas con varias estrellas.

La película comienza bien y apetece seguir viéndola hasta que sin ton ni son comienza la violencia descontrolada, el hastío y el aburrimiento se apodera del espectador.
Esa sensación de asquedad es propia de muchas películas de nuestro amigo Tarantino pero en esta parece ser que también estuvo secundado por Oliver Stone. En definitiva, no recomiendo esta película tan irreal como sin sentido. Lo único bueno que se puede apreciar en ella es la crítica a una sociedad sujeta a los medios de comunicación y a la fama.

Lo peor que he visto en mi corta vida de cinéfilo . Oliver Stone destroza el ya de por sí mal guión de Tarantino . Resulta incríble que a estas alturas de nuestra vida se graben películas como esta que no hacen que dejar en rídiculo , una vez más , a la meca del cine.