Técnicamente una película bien hecha, con escenas realmente espectaculares y una fotografía preciosa... pero, ¡ay amigo!, llena de lugares comunes en el género bélico y el drama, y situaciones límite poco creíbles, por no decir simplemente fantásticas.

Las sucesivas transformaciones de los personajes tampoco me parecen muy creíbles (básicamente la del japonés), y mientras en algunos momentos la película se hace pesada, en otros va demasiado rápida para digerir lo que está ocurriendo, y los nexos de unión entre las situaciones están traídos de los pelos.

En fín, a mi juicio entretenida, pero deja poco "poso".

Ayer ví casi por casualidad este film, del que ya había leído algo hace algún tiempo. Lo cierto es que me decepcionó, pues tiene un guión disparatado, y unos actores regularcillos, sobre todo el 'atormentado' protagonista. Las escenas de batallas, aunque bien ambientadas, tienen un desarrollo ridiculo. Y del final, para qué hablar. En fin, película de mensaje poco claro, topicazos varios, sobreactuaciones, y por tanto, a mi juicio poco recomendable.

Tanto la miniserie como la serie posterior abordan una idea muy interesante y siempre presente en el devenir social: el ascenso de una ideología fascista al poder (representado aquí por extraterrestres) y las aceptaciones y resistencias que provoca en la población, que se concretan en episodios individuales y colectivos de cobardía, heroísmo, duda miedo, egoísmo, traición, acomodación... La historia del mundo, vamos.

La serie tiene pues un fondo muy interesante. Sin embargo, el paso del tiempo ha sacado aún más a la luz los fallos en la narrativa que da forma a la historia.

Las tramas y subtramas de la historia son simples, llenas de agujeros y con resoluciones infantiles que arruinan totalmente el planteamiento general de la serie (por ejemplo, es más fácil colarse en las naves alienígenas que en Carrefour). El problema no son los efectos especiales de serie ochentera, si no que no hay una historia bien contada detrás.

Ilusionante a los ojos de un niño de los 80, decepcionante años después.