Al menos personalmente así ha sido. En Algunas críticas la tachan de tópica y en otras de ser extremadamente predecible, yo la he encontrado relsultona y entretenida. No encuentro justo menospreciar una película por carecer de sorprendentes revelaciones.

La película gana mucho en su version "sin cortes" del DVD subsanando las carencias sobre todo del papel de Owen, algunos tijeretazos son imperdonables.

Tal vez no fuese el objetivo de la película, o tal vez sí, pero el hecho de haber conseguido que me sintiese mal e incómodo durante 100 de sus 108 minutos e incluso despues de terminada, me parece algo muy destacable.
Una vez más recomiendo a quien quiera verla la versión DVD.

Uno siempre oye o lee a los críticos "cantar bajo la lluvia" alabanzas a los "sombreros de copa", nunca les duele calificar a "tal" mejor musical o "cual" perfecta y hermosa coreografía siempre, claro está, que no se escape de su ámbito de la crítica tradicional. Tal vez se deba a que son humanos y como tales temen lo que desconocen.

Pues si las películas antes citadas son indispensables en su género, "Érase una vez en China" también lo será para aquel que, además de disfrutar de una buena película en todos los aspectos más comunes, pueda, quiera o sepa apreciar el arte de las "artes" marciales.

Tal vez la coregrafía comparable a la de un "enamorado con impermeable" se encuentre en "Érase una vez en China 3" pero está, su madrina, no tiene nada de que avergonzarse.

Cuando a uno se le cae el primer diente le cuentan la historia del ratoncito eclipsando la experiancia traumática con su recompensa, pero no es el objetivo lo que nos ocupa.
Hay dos clases de personas, las que se creen lo del ratoncito, y las que "dicen" que desde el principio sospechaban de la historia.
Esta película es para los primeros pero dedicada a los segundos.

Shyamalan os contará un bonito cuento y si os lo creeis disfrutareis de la película, sino no. Pero no es ahí donde reside el arte o la magia de este film. Durante la película se nos definirá a toda esa gente que va al cine a hacer inventario o a buscar relojes casio en las muñecas de los romanos, la separará, les dará lo que quieren para poder criticar el trabajo de otro y así sentirse los más listos de la clase, y por último les dará una lección de humildad. Y al resto nos contará el final del cuento para poder tener felices sueños al volver a casa.

Por eso habrá a quien esta película le duela tanto en su orgullo que la crucificará para siempre y habrá a quien le haga volver a los tiempos en que era feliz creyendo en ratoncitos y le hara reirse a carcajadas de escépticos infantiles.

Por último diré que coincido con los detractores del film en que el cuento resulta flojo e improvisado, pero claro, es que yo lo veo como la excusa para la otra mitad de la película, y encima me parece una excusa bonita y perfecta. Una película muy, muy recomendable hasta para quien al final la acabe odiando.