Hacia mucho tiempo que no lo pasaba tan bien en un cine. Viendo cine con un par. Cine que demuestra que ser libre aún es posible. Pensar distinto, crear distinto, salirse por la tangente.
Solo por el mero hecho de querer romper la comba se merece un 20 esta peli.
Con un elenco de los de quitarse la gorra, sacar el pañuelo y pedir las 2 orejas para el Toro.
Que gente como Filmax se entregue a estas bizarradas da sentido a la vida.
Leído el libro de Orejudo hace ya unas cuantas primaveras y casi olvidado su argumento me encuentro con una obra hecha para perdurar con imágenes poderosisimas, un aquelarre de muñecas rusas enloquecidas.
Si esta peli no se convierte en deculto con sus primeros 10 minutos no sé qué coño le pasa a este jodido mundo.
Gracias señor Aritz Moreno, apuntado su nombre queda.
Gracias porque películas como la suya nos hacen volver a creer en el cine.

Cuando leo las críticas de algunas películas de acción de los últimos tiempos no puedo evitar cabrearme. Predator, Venom... Etc.
Me enfrento a POLAR habiendo leído algunas de las críticas de otros usuarios y de los gansos que se ganan la vida a base de subir o bajar películas. Y he de creer que en la política y el fútbol y demás las opiniones se venden y se compran y en el mundillo del séptimo arte no. Ja.
Me dejo contaminar. Pero he leído la obra de Víctor Santos, desde Pulp Heoes hasta VIOLENT LOVE y continuo y pulso al play. Sólo con ver a Mads me merece perder 2 horas de mi vida. Y la cosa empieza muy cachonda. Y me vuelvo a sentir como ese niño pequeño que acudía a clase excitado para comentar las pelis de la noche anterior con sus compis.
Y al jodio Jonas le sigo la pista desde Spun y joder estoy loco por ver Lord's of Chaos(os recomiendo enfebrecidamente el libro, yo espero la peli)
Y la peli continua. Y es sexista, estúpida y violenta y quiero comentarla y quiero volver a disfrutarla. Y la fiesta continúa.
Y es que, a ver, el cine es diversión y olvidarte de las facturas por pagar. Y ni todo es Fassbinder y todo no es Polar. Y gracias a dios hay momentos para llorar, para emocionarse y para sentirte un puto killer desde el sofá de tu casa.
Y doy gracias por conservar un criterio propio y haber disfrutado como un enano este peaso film de acción.
Hala. Ahí queda eso.

Recordáis la saga que se marcó Winding Renf hace ya más de una década? Muy sucia. Muy gore. Con un par de entregas magistrales. A Tonny, Milo y toda la basca? Bien. Pues mira tú por donde que a Nicolás le salen hermanitos pequeños por todos lados. (Pienso en Hyena de Gerard Johnson) Pues esta vez el brothercito viene de Francia. Y qué te parece si te digo que viene con Van Damme de la mano?
Es una suerte desprejuiciarte a la hora de ver cine hoy en día porque quien menos te lo esperas te la clava. Y muy gratamente además.
Me he encontrado una de esas pelis de acción que no te deja indiferente. Es cine musculoso, bien construido. Si bien con una coartada moral que echa un tufillo a los buenos son muy buenos,pero aún así no molesta. Es más, al final lo agradeces porque el mundo en que vivimos es el que es. Por muy bueno que seas siempre acabas pagando el pato de todos.
Solo un detalle:ese plano secuencia en la casa de crack. Nada tiene que envidiar al de True Detective 1.
Recuperamos a Jean Claude. Gozamos de 90 min de cine jodidamente negro. Y Le cascamos un 7 a esta maravilla que nos hemos sacado de la manga.
Un must seen brother.

Que las últimas veces, y no digo una ni dos, que he ido al cine haya sido para ver cine español es muy loable por mi parte. Y no es que sea yo un banderita rojaigualda. No. Es porque desde los tiempos de 'El Día de la Bestia' , 'Días Contados' y el resurgir de Almodovar después de bodrios como 'Kika' , el cine patrio ha sufrido una transformación que ninguno hemos sido capaz de asimilar. Ya sea por los mandatos de políticos depravados, por la mentalidad de industria(o su falta de ella), por tomar conciencia de que el cine es un arte mayúsculo, o vaya usted a saber, lo que los nuevos creadores nos han ido sirviendo es un manjar que pocos han sabido disfrutar. Que se jodan, che.
El efecto ochentero en el cine global lo venimos nosotros padeciendo, a conciencia, desde hace ya más de 2 décadas. Y es una gozada. Porque la falta de complejos nos hará libres.
Al turrón, Antoñito.
Matar a Dios es cine desacomplejado. De historia épica de andar por casa y de aliento castizo que sólo los tocados por la varita mágica del amor a este puto país puede pergueñar. Es costumbrismo y personajes peripateticos con los que tomas café a las 6 de la mañana antes de encajarte en un trabajo también patético, y muy español. Es cine político. Pero político de calle. De gente como tú y como yo, a los que todo nos parece culpa divina y somos incapaces de ver que el verdadero culpable lo tiene uno enfrente del espejo. Son actuaciones desbordantes de empatia y mimetismo. Aunque no es difícil ser lo que uno es. Punto y aparte para ese dios cruel y enano que desencaja la pantalla.
Esto es cine,original,necesario, para preguntarnos que carajo estamos haciendo con nuestras vidas y las de los demás.
Este cine es cine bien asimilado. Bello.
Sí señores. Esto vale lo que cuesta una entrada de cine. Y un aplauso.
Salud por ustedes.

A Vermut lo conocí por su faceta comiquera. Creo que he leído todos y cada uno de los cómics que ha dibujado y escrito. Esto no me había preparado para Diamond Flash, mucho menos para Magical Girl. Eran dos películas bien distintas, pero los mundos en los que habitaban sus personajes eran los mismos. Extraños, fríos, decadentes, de una soledad latente. Planos fijos en los que se desarrollaban escenas enfermizas de lo diario. Vermut no teme nadar en aguas estancadas de extrañeza cotidiana, en las que nos vemos reflejados.
Quién te Cantará es una disertación sobre la identidad. Identidad que a día de hoy nadie parece conocer. Todos, y digo todos, imaginamos cada día ser otro. Más alto, listo, guapo, rico. La identidad carece de sentido. Un día puedes creer ser Batman y al día siguiente Bunbury. Vermut lo tiene claro. Si de algo se jacta este nuestro cine de los últimos años es la falta de complejos. Y Carlos no iba a ser menos. Lo mismo se mira Hermano Mayor con Aguado y sus problemáticos muchachos, que te tira del Sálvame, que te mezcla el terror japonés, que te hilvana todo con Bergman. Un grande, vaya. Y una gotillas de Lynch.
Los resultados suelen ser tan aparentemente bizarros en sus manos que no puedes salir de tu asombro.
Ahora, cuando termina el film estas tan destrozado que no queda otra que mirar al suelo y reflexionar.
Si no tuviera un estilo tan jodidamente propio podrías compararlo con Almodovar. Pero sería injusto. Esto que nos presenta es tan brutalmente hermoso que sería como acusarlo de no querer ser Carlos Vermut.
Bellísima película.