Sí, muchos dirán que es "demasiado perfecto" todo por los finales felices, que si es moñas o cursi... sí, puede serlo. Pero esta película sólo pretende eso, contar historias bonitas con finales felices.

El toque de humor que lleva toda la película es, al menos para mi gusto, fabuloso. De las 8 historias que trata, ninguna deja de al menos arrancarme una sonrisa, cuando no una carcajada.

De todas formas, quizás el mejor resumen que se puede hacer del filme es: Hugh Grant, Liam Neeson, Emma Thompson, Keira Knightley, Alan Rickman, Colin Firth, Bill Knighty, Andrew Lincoln, Laura Linney, Billy Bob Thornton, Rowan Atkinson, Elisha Cuthbert, Claudia Schiffer, Denise Richards... una selección de los mejores actores británicos (no todos, pero muchos) dirigidos por el neozelandés Richard Curtis (El Diario de Bridget Jones, Nothing Hill).

Para pasar un rato divertido, para reirte (la escena de Rowan Atkinson, con las consiguientes miradas asesinas de Alan Rickman, no tiene desperdicio), para disfrutar con algunos de los mejores actores de la actualidad, y para acabar con una sensación de alegría (la escena de Andrew Lincoln y Keira Knightley con los carteles me encanta) en el cuerpo. Preciosa.


PD. Especialmente preciosa está Keira

Sofia Coppola nos hace vivir una experiencia en otro mundo, a miles de kilómetros, sin necesidad de levantarnos del sofá. He de decir que me he sentido identificado con muchos elementos de esta película. Esa sensación de no cambiar de país sino cambiar de mundo por completo. Todo lo que habías aprendido, todo a lo que la vida te ha acostumbrado, pierde el sentido. ¿Cuál es el camino a seguir? La observación, la aceptación, la adaptación. Empaparse de cuanto te rodea, experimentar, disfrutar, aprender...

La directora nos enseña Tokyo desde el punto de vista de dos personas de clase alta, que están sufriendo la soledad de lo desconocido, pero que juntos, comenzarán el viaje que describo en anteriores líneas. ¿Por qué no se hace tedioso el ritmo, aunque pueda parecer lento? Por la comedia que se "esconde" y nos asombra siempre que estemos atentos. Simples miradas, gestos, palabras, que te disparan alguna emoción y te hacen pedir más.


La otra inmensa razón que convierte esta historia, a simple vista simple, en una obra inolvidable, son los dos actores que la dan vida. Por encima, un magistral Bill Murray, cuyo personaje ya de por sí colosal en cada frase que dice, pero que alcanza el culmen interpretado por este artista. Y seguido muy de cerca por una genial Scarlett Johansson, que demuestra que no es solo una cara bonita (que también), sino que tiene un registro interpretativo a la altura de las mejores. La conjunción entre ambos es perfecta. Como ejemplo, la escena en que están tumbados en la cama y Bill le acaricia los pies a Scarlett. Magnífica. Su "primera" despedida en el ascensor. Sublime.

La definiría como una película de visionado obligatorio para todo amante del cine. También para todo amante de viajar. Y para todo amante, en general, y... bueno, ya le vais cogiendo el truco.

Hace unos pocos días, un senador del PP dijo: "Ya no estamos en campaña, es momento de decir lo que de verdad pensamos". Creo que ese sentimiento, esa declaración de sinceridad radical, puede resumir un poco la idea de esta película.

Tenemos por una parte a Ryan Gosling (uno de mis actores favoritos, todo sea dicho), un joven que trabaja como director de comunicación de uno de los aspirantes a presidente de los EEUU. Su personaje se presenta como un idealista, alguien convencido de lo que hace y de las razones por las que lo hace. Está convencido de que su candidato es el que debe ganar, porque es una buena persona, marcará la diferencia. Lo cree sinceramente, y por ello luchará. Eso me plantea una duda, ¿es cierto que ese candidato es esa gran persona que puede llegar a cambiar las cosas?, ¿es el poder el que lo corrompe a posteriori?, ¿o ya desde un principio el chico está equivocado, e idealizaba unos valores que realmente no existían?

Por otro lado, tenemos al candidato, George Clooney. Me llama la atención (de muestra un botón) uno de los mítines que da durante la película, en que habla de revoluciones tecnológicas que pretende llevar a cabo. Habla de avanzar hacia una sociedad que no dependa del petróleo. Qué bonito, ¿verdad? Suena utópico pero... los coches eléctricos están ya en las calles. Serán más baratos de producir, y sobretodo de mantener (los precios de recarga de batería no tendrían nada que ver con lo que cuesta hoy en día llenar un depósito). ¿Por qué, aun siendo todo positivo, sigue sonando utópico? Porque el petróleo que estamos dejando de necesitar lo manejan peces muy gordos, y esos peces no van a dejarnos prescindir de él. Ojala me equivoque, y dentro de unos años veamos esa verdadera revolución en nuestras carreteras, pero lo veo más lejos de lo deseable.

¡Ah bueno! La película, es cierto. Tanto Ryan como George hacen dos papeles muy serios y complejos, dando algo más de protagonismo al primero, que tiene más escenas para lucirse (y lo hace). En la escena en que Ryan llama a George por teléfono podemos ver unas grandes interpretaciones.
Acompañando a estos dos monstruos, hay otros dos que no se quedan lejos. Tanto Philip Seymour Hoffman como Paul Giamatti ayudan a que esta película pueda colocarse a un nivel más alto que si estuvieran únicamente los dos protagonistas. Dos veteranos curtidos en mil batallas que dan más toques de seriedad e importancia a la cinta (véase la bronca de Philip a Ryan).
Destacar también el papel de Clooney, a quien veo por una vez algo alejado del cliché interpretativo a que nos tiene acostumbrados, dando muy buenos resultados.

En resumen la cinta nos deja una partida de ajedrez sumergida, una visión de las campañas electorales desde el interior, que puede ser tan cierta como amenazadora para la sociedad.

Intensidad e imaginación... quizás son lo que mejor resume esta película. Ni un minuto de descanso deja el amigo Boyle, como siempre, llevándolo todo con una banda sonora genialmente elegida, y también como siempre, que para nadie pasa inadvertida (recordar por ejemplo Slumdog Millionaire, para hacerse una idea de la fuerza que imprime a las imágenes).
La actuación de James Franco, es, como dicen, lo mejor de su carrera. Te mantiene atento a cada instante de la historia, lo hace creíble.
Me ha encantado el montaje de las escenas, mezclando lo que ocurre en la propia grieta con otras imágenes, todo ayudando a esa sensación de ritmo que te atrapa.

Tras Origen y Toy Story 3, es la tercera película que veo de las nominadas a los Oscars de este año, y la tercera que creo que realmente lo merece.

Hay muchas películas de psicópatas, pero Jaume Balagueró (director de REC) logra traernos algo novedoso, un personaje que no hemos visto antes, unas formas de actuar y de sentir tan originales como macabras e inhumanas (destacar la relación de Tosar con su madre). Ahí reside la potencia del filme, en alejarse del clásico acosador, al que en tantas otras películas hayamos podido ver, reinventando el término, aportando ideas.


He de confesar que la película, de todas formas, me ha dejado un ligero puntito por debajo de las expectativas que creé antes de verla. Quizás me esperé demasiado. Quizás Jaume Balagueró y Luis Tosar me dejaron el listón demasiado alto con REC y Celda 211 respectivamente. Pero únicamente un paso por debajo coloco esta nueva creación.


El ritmo es acertado, ameno de seguir, sin ser nunca tediosa. Hecho en falta posiblemente algo más de suspense (incluso algún susto más), pero creo que eso es culpa también de las expectativas creadas a priori. Luis Tosar cumple a la perfección (¿cuándo no?), como también logra Alberto San Juan. Destaco de todos modos a Marta Etura. No sólo por lo guapa que es, que también, sino por la naturalidad en toda su actuación (especial atención a su enérgico despertar con baile incluido al comienzo de la cinta, para comérsela). También me ha gustado el personaje de Iris Almeida (Úrsula, la niña que vive en frente de Marta Etura), el cual me parece que ayuda a que el ritmo no decaiga, incluso añadiendo algún punto de humor al principio.


En resumen, creo que se han juntado grandes artistas para dar lugar a una película original, que aporta ideas frescas al género. Sin miedos a verla de noche a oscuras, dado que no tiene nada que ver con REC o similares en cuanto a terror, siendo el suspense, y aun más, el thriller psicológico, el género que mejor la describe.