Auténtico despropósito sin pies ni cabeza. Absurda hasta límites insospechados. Sin embargo, con unos medios impresionantes es total y absolutamente divertida. Muy disfrutable a la par que olvidable. Celebro que se siga haciendo cine de este tipo. Consigue sobradamente el objetivo de divertir y hacernos olvidar durante un buen rato de nuestras historias y sumergirnos en la diversión.
Aunque parezca contradictorio, es muy mala pero muy divertida.

Excesiva, absurda, desproporcionada, desligada, caótica, indefinible, indescriptible, aburrida, infumable... Se me agotan los epítetos y, a la par, me valen muchos. Resumiendo, mala, muy mala. Casi lo peor es ese hedor colorista, con escenas muy grises pero con chirriantes puntos de color por todos lados, apuntando a una majestuosidad visual que, claramente, yo no percibo y, si cabe, me chirría aún más del despropósito que se despliega, se vierte más bien, en la pantalla.

Mis tragaderas son generosas, mi curiosidad también, pero reconozco que no pude verla entera. Le di al Forward (palante) en un par de puntos intermedios. Quizá eso me hizo perder la esencia ...

Al menos no es larga, extremo este que se agradece.

A pesar de sus incoherencias, sus salidas de tono, sus actos injustificados y su, en ocasiones, moralina decadente, es muy divertida y muy disfrutable. La ambientación, escenarios, vestuario, efectos, etc son muy disfrutables y embaucadores. El Cast también. Da lo que promete, pero al escarbar un poco no me satisfizo lo suficiente.

Inicialmente le di un 8 y lo habría mantenido si no fuera por el, a mi juicio, decepcionante y lamentable final. Del mismo modo, parece alargada en exceso y de forma algo forzada y con demasiadas vueltas de tuerca. No se ve redonda.

Recomendable en cualquier caso.

Es maravilloso que haya superproducciones tan "tontas" como esta, pero con tantos medios. Hay que buscar el niño que, algunos, aún llevamos dentro, o no tan dentro, y dejarse llevar y divertirse. Que de eso se trata.

¿Que es algo tontorrona?. ¡Pues sí!. ¿Y qué?. El que quiera reflexionar, que se apunte a un curso de meditación y filosofía cuántica.

Da disfrute y diversión, lo que buscaba.

De un 9 inicial lo dejo en un 8 definitivo. ¿El motivo?, las últimas temporadas, especialmente la 8. Aunque mantiene el ritmo, la intensidad, la crudeza, la espectacularidad y una larga retahíla de epítetos, te deja con una terrible sensación de vacío, de frustración, de insatisfacción, de incredulidad, de final precipitado y caprichoso e incomprensible.

En general, por su espectacularidad, cuidado diseño y crudeza, como debe ser por su temática y textos originales, es muy disfrutable y recomendable. Ha abierto un camino que espero se siga con ahínco.

Desde la temporada 3 ya se atisba una separación alarmante de los textos de Martin. Crudamente confirmada en las siguientes temporadas. A pesar de ello, el resultado general es más que notable. Se puede criticar el cast, en ocasiones desafortunado, algunas batallas poco entendibles y algún giro de guión absurdo, pero en general es muy disfrutable.

Lo malo, el coitus interruptus.