Nos encontramos con un hombre que se enamora de un sistema operativo, hasta aquí bien, la idea podría dar para una buena película, hasta que empezamos a descubrir como es ese sistema y los guionistas deciden pasarse por el forro toda lógica.
En primer lugar es un sistema que aprende por si solo y es capaz de adquirir emociones humanas, primera cosa ilógica puesto que se trata de un sistema informático, que por lógica, debería aprender hasta donde es programado.
La película avanza, y si bien ya se ven irregularidades, no es hasta pasada la hora de metraje cuando pierde todo el sentido.
Nos encontramos con el recurso típico de muchas películas sobre un ser tecnológico que ha adquirido emociones humanas,pero no solo ese ser, sino todos los que son como el, hasta el punto que deciden pasar de hacer el trabajo para el que fueron programados para relacionarse entre ellos como un grupito de amigos cualquiera, cosa totalmente ilógica para cualquiera que tenga unas nociones básicas de informática.
Todo esto se podría pasar por alto suponiendo que sean sistemas extremadamente avanzados, inteligentes y desarrollados, pero el clímax de los despropósitos llega cuando los sistemas deciden marcharse a otro lugar juntitos en amor y compañía, y pregunto yo, a dónde ¿al digimundo? no nos olvidemos que son solo un montón de datos compilados, por lo que esto carece de toda lógica y sentido. Esto es, yo pago por un sistema operativo, lo instalo en mi ordenador, y el por su cuenta decide que no quiere hacer su trabajo y se larga. Que sentido tiene todo ésto tenían los guionistas alguna noción de informática, o incluso sobre las leyes de la robótica antes de perpetrar semejante despropósito
Podría haber sido una gran película pero se han empeñado en hacer una bazofia, una lástima.