Fantástica, salvaje, sorprendente, intrigante, innovadora, sangrienta, sensual, trágica y tremendamente adictiva. Imprescindible para aquellos que disfrutaron con Gladiator y 300, y para los nostálgicos de Espartaco de Kirk Douglas, sin duda la serie engancha desde el principio.

Andy Whitfield, un desconocido actor galés afincado desde niño en Australia, interpreta a la perfección a Spartacus, y la irreconocible neozelandesa Lucy Lawless ( ex Xena) es la esposa de Batiatus, el perverso amo de la escuela de gladiadores, interpretado por el escocés John Hannah.

Una pena que solo sean 13 capítulos, ya que la segunda parte está seriamente comprometida por un repentino cáncer del joven actor protagonista. Andy ya ha empezado el tratamiento y esperamos verle pronto espada en mano.

Pues qué quieres que te diga, creo que con 110 millones de dólares se podía haber hecho mucho más. Tras dirigir Smokin' Aces en 2007, el director Joe Carnahan nos sumerge en un torbellino de acción confusa y carente de mucho sentido, abusa de efectos especiales y explosiones para intentar tapar un guión bastante desastroso.

Los actores:
Liam Neeson: Convence y se hace con el papel de Hannibal Smith, es quien da algo de seriedad a la película.
Bradley Cooper: Interpreta con acierto al guaperas Templeton, su torso desnudo es utilizado repetidamente como reclamo femenino.
Quinton 'Rampage' Jackson: Luchador profesional en la vida real, campeon de la UFC (Ultimate Fighting championship ). El más decepcionante, actor triste y vacío, no le llega ni a la suela de los zapatos al original Mr T.
Sharlto Copley: Intenta inútilmente hacernos olvidar al Murdock original (Dwight Schultz), carente de personalidad, no hace ninguna gracia y a mí ni siquiera me llega a caer bien.

Menos mal que de vez en cuando aparece la Jessica biel para amenizar este pasatiempos veraniego...

Y es que esta peli da lo que promete.

Promete violencia y no veas como se dan.
Promete hostias y vaya si las hay, casi las sientes.
Promete actores planos pero contundentes, y el madurito Van Damme cumple como siempre, mientras que el abuelo Dolph Lundgren hasta da miedo.
Promete acción y es no parar del principio al final.

Cuando el ex-convicto Isaiah Bone ( Michael Jai White ) sale de prisión, se introduce rápidamente en las luchas callejeras en las que todo vale, hasta que se topa con el sádico jefe de una banda y su tremendo luchador atiborrado de esteroides. A partir de ahí, Bone se verá obligado a poner orden en varios asuntos a su manera...

Madre mía, qué pedazo de luchador tenemos aquí, en esta cinta salida directamente en DVD en septiembre del 2009, White se destapa definitivamente para ofrecer un amplio repertorio de golpes, patadas voladoras, llaves y rotura de huesos variados, todo ello bien dirigido por Ben Ramsey ( tambien guionista de Dragonball Evolution ) y ambientado con buena música rap.

Resumiendo, recomendable para los amantes del cine de acción y huesos rotos, diversión asegurada con un guión sencillo y sin complicaciones.

A Jason Statham, Jet Li y el mítico Jean Claude van Damme les ha salido un duro rival...

Deplorable película-documental que intenta mostrar la vida de unos muertos vivientes en la ciudad de Los Angeles.
Los supuestos zombies no son más que tipos normales con un ligero retraso mental y algo de maquillaje en la cara, son más falsos que un billete de 6 Euros, desde luego son los peores zombies en la historia del cine, que ya es decir.
Quien espere ver tensión o sustos se va a quedar con las ganas, mejor leed un libro o daros un paseo, seguro que lo pasaréis mucho mejor en vez de ver este engendro.