Inge (la soberbia Ursula Werner) lleva una vida normal junto a su marido, pero un buen día Cupido se cruza en su camino y no puede resistirse a la pasión por un hombre vitalista cercano a los 80. Ella no lo buscaba...pero sucedió.
El director Andreas Dresen arriesga en esta película contándonos la insólita (por poco representada) vida sexual y sentimental de personas entre los 60 y los 80 años. Y lo hace desde la ternura, utilizando las miradas y los silencios, sin ningún tipo de cursilería empalagosa.
Sentimientos a flor de piel..mucha mucha piel.
El cine alemán que llega a nuestras pantallas en los últimos años suele ser garantía de calidad ( ahí están las magníficas "Contra la pared" y "Al otro lado" de Fatih Akin , "Good bye Lenin", "La vida de los otros" o la más reciente "La ola"). Viva el cine alemán.