Termina la película y mientras pasan los créditos aguanto las lágrimas de emocíon, me giro y veo a mi madre llorando. El silencio se instala en una sala en la que nunca mejor dicho la procesión va por dentro.
Y es que es una película emocionante, una entrañable historia entre dos hermanas, ejemplo de las muchas historias consecuencia de una guerra que si en algo estaremos todos de acuerdo, es que nunca debió haber sucedido.

Quizás no sea una gran película, y más si la evalúas desde el alto listón que dejó la novela de Dulce Chacón. Pero es una pelicula emocionante, conmovedora, que llega hasta muy adentro y que por lo tanto es 100 por 100 creíble, entre otras cosas porque es una ficción que no es ficción repleta de imagenes y sucesos que nuestros abuelos en alguna ocasión nos han contado. Y si es capaz de todo ello es porque es una buena película.
Mucha culpa de todo ello la tienen Inma Cuesta y la genial Maria León, que en su papel de Pepita derrocha humanidad, espontaneidad, transmite con todas la partes de su cuerpo e incluso es capaz de sacarte más de una sonrisa en una atmosfera tan triste. Sin duda una interpretación difícil de olvidar y por la que merece ya la pena pagar la entrada.

En definitiva, conmovedora y desgarradora pelícua una vez más con la posguerra de fondo. Y que si es así?. La cartelera está para elegir. Aunque ver este tipo de películas debería ser imprescindible , porque si somos lo que somos, es por nuestro pasado

Divertidísima americanada llevada magistralmente por dos actorazos de comedia como son Anniston y Sandler.
No me vale eso de que la Anniston hace el papel de siempre y demás, por que la peli hay que evaluarla por si sola.
Propongo un ejercicio: imaginaros que no habéis visto a la Anniston en ninguna de sus tropecientas comedias romanticas anteriores. Anniston esta genial, divertida, enamora a la cámara a sus cuarenta y tantos incluso tiene un pequeño cambio de registro sobre todo en la primera parte de la pelicula. Muy bien arropada por un gran Sandler, dos niños graciosísimos y por innumerables situaciones graciosas consecuencia de un buen guion de comedia.

Aun siendo una buena comedia, es cierto que no deja de ser una americanada, bastante previsible al final, pero es una buena americanda que te deja un poso de buen gusto y te hace pasar un gran rato con la sonrisa siempre en la boca.
Es verdad que no es una pelicula que pasara a la historia( como muchas otras por otro lado) pero ojalá todas las americanadas que poblan los cines a mi pesar durante todo el año fueran como ésta.

Bon apetit es una original historia de amor pocas veces contada, pero sobre todo es una pelicula elegante, minimalista , de diálogos inteligentes, buenos actores y de una sobriedad extraña en una opera prima.
Nora Tschirner y Unax Ugalde desprenden ternura y bordan sus papeles transmitiendo la quimica necesaria para que la historia sea creible y enganche a cualquiera. Ambos bien secundados por todos lo actores secundarios que salen en la pelicula.
Con la cocina como telón de fondo, cuenta con una dirección sorprendente, una ambientación preciosa y una banda sonora acorde con el resto.
Merece la pena verla en versión original para disfrutar aún más de sus matices.

Estamos acostumbrados ultimamente a ver como directores noveles de nuestro país triunfan con su opera prima y hacen trabajos dignos de directores más experimentados. Ahí quedan ejemplos como El Orfanato, Los ojos de Julia, Agnosia....
Pues bien esta es una película que siendo de un género diferente a las mencionadas nos muestra que "si se puede" hacer una opera prima de calidad, sobria, arriesgada y con un mensaje ejemplar.

Buena comedia la que protagonizan estos primos. Con una buena ambientación y banda sonora, es divertida, desprende ternura, frescura, original¡idad y te saca una sonrisa durante CASI toda la pelicula.
Y digo casi porque es algo irregular en su ritmo y su capacidad de divertir y sobre todo le falta algo para ser grande, ese empaque que toda gran película debe tener.

Raul Areválo esta increíble, se come la pantalla (y no es la primera vez) y junto con un Antonio de la Torre también genial protagonizan las mejores escenas. Ambos dejan un poco al descubierto la buena actuación aunque a ratos poco creible y algo sobreactuada de Quim Gutierrez. Adrian Lastra esta sorprendentemente bien, al igual que una guapisima Inma cuesta que desprende serenidad y angel apuntando a un buen futuro reciente como actriz.

En fin, película que se queda en "el casi" y que avanza un escalón respecto a "Gordos", ambas películas por debajo de la genial " Azul oscuro casi negro", opera prima de este director y que dejó el listón bastante alto. "Te seguiré esperando, Daniel."