En su semana de estreno vi esta cinta con toda mi familia. Por eso que que hoy (ya marzo del 16') me sorprende encontrar que tiene pocas críticas positivas y un puntaje inferior al que imaginé.
Somos cinco personas en mi grupo familiar, todos con gustos distintos, pero -sorpresivamente- todos salimos contentos y satisfechos con una película muy bien lograda en todos sus aspectos: con una fotografía espectacular, una música sumergible en la atmósfera y personajes alcanzados por sus actores.
Yo, personalmente, se las recomendé a todos los que me preguntaron qué tal era in the heart of sea, y aún lo sigo haciendo.

Cuando tu novia/o te pida ver algo relajado, y alejado de cintas dramáticas o la serie de moda del momento, aquí está tu opción. A quién queremos engañar, su público está orientado para las mujeres.
Tiya Sircar (The good place) desaprovecha un protagónico como periodista en un misterio que, si estás atento y no mirando el celular, puedes resolver a los 14 minutos de cinta.
No ofrece nada nuevo, ni llamativo.
Me sorprende la capacidad de clichés que pueden aguantar en una película. Traten de contarlos acá.
Sí de verdad quieres ganarte esa tarde de sábado en el sillón, bajo la manta y con un bol de palomitas en el regazo, hay varias otras opciones de Netflix para disfrutar.

No soy patagón, como ninguno de los productores o actores en este drama chileno-argentino. Aún así, y como a ellos, viajar a la Patagonia y estar unos meses acá te permite armar un panorama muy claro de lo que es vivir en el extremo del mundo. Me sorprende que el despliegue de actrices y actores se vea tan natural, que la fuerza de sus miradas se note tanto a lo que uno ve acá en Coyhaique y más al sur, y que todo se envolvió tan cuidadosamente con una banda sonora a la altura de las carreteras legendarias del sur del mundo.
La película la sentí larga en un momento, debo admitir, pero a medida que se acercaba el final entendí porque debía desenvolverse así a su ritmo, y darme cuenta al final, en los últimos segundos de escena, el porqué (sigue abajo)

Conocí el videojuego muchos años después de su lanzamiento, y al igual que con este, salí con el mismo sentimiento después de haberlo visto. Pasable. El género es para divertir y en general la película divierte, más sí has sido invitado a la Avant premiere y estás en la sala comentandola -en susurros- con tu acompañante. Efectos especiales y de sonido a tono y altura con la tecnología actual, nada que sobresalga pero que tampoco de vergüenza ajena. Sin embargo, punto extra al audio, que lo noté bien trabajado y pulcro.
Dwayne Johnson en su papel de siempre, divertido y fuerte, Jeffrey Morgan con un buen aporte a la película, y mucha lucha entre bestias gigantes harán que las casi dos horas de film no se noten tanto.

Sin duda un regalo para los fans, pero que es dirigida sin miedo para quien no conozca a la artista. Pero a estas alturas es imposible, no?
Selena Gómez muestra trozo de sus inicios en la pantalla y con sincera honestidad muestra su día a día sin temor a los ojos críticos del espectador.
No es un documental para mostrarse heroína, desvalida, multifacética ni única; usa su influencia y la cámara para mostrarse como es: una mujer rota y perdida y que logró encontrarse a ella misma en el laberinto.
Buen ritmo, honestidad, música y relatos. Documental apropiado para todo público, especialmente para quienes creen sentirse solos.